El Papa ofreció su último documento, como él mismo sostiene se trata de una encíclica social que nos permita soñar con la fraternidad y amistad social.
¿Por qué este nombre? La tercera encíclica del papa Francisco, titulada Fratelli Tutti, debe su nombre a la manera en la que san Francisco se dirigía a todos los hermanos y hermanas. ¿Cuál es el tema general del documento?, la fraternidad y la amistad social, en los límites sin fronteras de una fraternidad abierta. ¿Cómo se organiza el texto?, es un discurso realmente extenso. Lo configuran casi 140 páginas, ocho numerales ofrecen una apasionante introducción y ocho son los capítulos en los que se extiende. Un total de 287 numerales. El total de citas de las que se ha valido para justificar su documento es de 288 citas bibliográficas.
El santo padre ha usado la parábola del buen samaritano como ejemplo para explicar muchas actitudes y la gran invitación del evangelio, recordamos que ha invitado en muchas ocasiones a ser una Iglesia en salida, de las periferias, samaritana; sin temor de bajar y bajar y seguir bajando, con tal de acercarse al extraño que está tirado en los caminos, no sólo para compadecerse de él, sino para actuar en su provecho. En el primer capítulo, las sombras de un mundo cerrado, nos invita a estar atentos de todas las tendencias actuales que no favorecen el desarrollo de la fraternidad universal. El segundo capítulo, un extraño en el camino, nos invita a dejarnos interpelar por esta historia que se repite, para reconocernos en los buenos samaritanos o en los indiferentes viajantes que pasan de largo. El tercer capítulo, pensar y gestar un mundo abierto, pensando y soñando con otra humanidad.
El cuarto capítulo, un corazón abierto al mundo entero, nos traslada al terrible tema de la migración, con todos los agravantes que esto implica. Francisco invita a superar las visiones individualistas, a dejar de cuidarnos unos de otros y a superar vernos como competidores o enemigos peligrosos, con miedo y desconfianza. El capítulo quinto, la mejor política, plantea su concepción política del verdadero servicio al bien común, donde nos permite soñar con una política desvelada, con un amor preferencial por los pobres. El capítulo sexto, diálogo y amistad social, nos pide aspirar una cultura del encuentro. Y en el capítulo séptimo, nos permite reconocer los caminos del reencuentro. Termina el documento, en el capítulo octavo, invitando a reconocer los valores religiosos del encuentro, del diálogo y la solidaridad.
