/ viernes 14 de diciembre de 2018

Acerca de la educación

Leíamos con tristeza que nuestra entidad es la última en aprendizaje y haciendo conjeturas, creemos que nuestros compañeros maestros que se encuentran en servicio, no están trabajando correctamente, sin ser de la coordinadora, pues tenemos entendido que, en nuestra entidad, son pocos los que han aceptado actuar como ellos que pidieron, a nuestro presidente, cuando andaba en campaña, que eliminara la Reforma Educativa, pues les hacía ponerse a estudiar para prepararse mejor para trabajar con sus alumnos y no nada más al ahí se va. Es verdad que a los maestros se les pide no enseñar memorizando, sino que deben enseñar a razonar, es decir: no hacer la memorización para repetir sin razón, sino echar mano de ella para recordar el contenido de una investigación para aplicarla cuando sea necesario, para realizar una actividad. A nosotros, en la normal superior, se nos enseñó que todos y cada uno de nosotros aprendemos usando un tipo diferente de memoria, a saber. La visual, la auditiva, la motora y la polifacética (multifuncional), esta última forma de aprendizaje podemos asegurar que es esporádica (poco frecuente). No hablamos nada más por hablar, allá por el mes de agosto, recién comenzado el ciclo escolar 18-19, comentamos de una maestra, que en una escuela primaria de una colonia de nuestra ciudad, que es encargada del primer año quería que los pequeños, procedentes del kínder, ya vinieran leyendo, cuando eso le correspondía a ella, puesto que los niños apenas están llegando a la edad biológica apropiada para el aprendizaje. Mientras escribíamos estas líneas nos enteramos de una joven que habiendo cursado varios semestres en la Facultad de Leyes no llegó a titularse y por lo tanto no tiene ningún perfil educativo, y sin embargo, impulsada por alguien, fue incluida en el personal de la SEV y ahí es enviada a cubrir la falta de algún maestro en las diferentes escuelas de la ciudad. Lo que nos parece algo totalmente incorrecto. En cuanto a la comprensión de la lectura, se puede mejorar haciendo algo parecido a lo que nosotros hacíamos en el Colegio Preparatorio de Xalapa, coloquialmente conocido como “Prepa Juárez”, por su ubicación en la calle de Juárez, en el turno vespertino en la clase intitulada “taller de lectura y redacción”. En cada sesión llevábamos el tema de la clase impreso en hojas que les repartíamos y les pedíamos que la leyeran y nos preguntaran lo que no entendieran, pensando que las palabras que usábamos para muchos eran desconocidas y para poder comprenderlas necesitamos entenderlas. Esperando que ustedes apreciables y pacientes lectores/ras estén de acuerdo con nosotros, nos despedimos en esta ocasión. ¡Salud!

Leíamos con tristeza que nuestra entidad es la última en aprendizaje y haciendo conjeturas, creemos que nuestros compañeros maestros que se encuentran en servicio, no están trabajando correctamente, sin ser de la coordinadora, pues tenemos entendido que, en nuestra entidad, son pocos los que han aceptado actuar como ellos que pidieron, a nuestro presidente, cuando andaba en campaña, que eliminara la Reforma Educativa, pues les hacía ponerse a estudiar para prepararse mejor para trabajar con sus alumnos y no nada más al ahí se va. Es verdad que a los maestros se les pide no enseñar memorizando, sino que deben enseñar a razonar, es decir: no hacer la memorización para repetir sin razón, sino echar mano de ella para recordar el contenido de una investigación para aplicarla cuando sea necesario, para realizar una actividad. A nosotros, en la normal superior, se nos enseñó que todos y cada uno de nosotros aprendemos usando un tipo diferente de memoria, a saber. La visual, la auditiva, la motora y la polifacética (multifuncional), esta última forma de aprendizaje podemos asegurar que es esporádica (poco frecuente). No hablamos nada más por hablar, allá por el mes de agosto, recién comenzado el ciclo escolar 18-19, comentamos de una maestra, que en una escuela primaria de una colonia de nuestra ciudad, que es encargada del primer año quería que los pequeños, procedentes del kínder, ya vinieran leyendo, cuando eso le correspondía a ella, puesto que los niños apenas están llegando a la edad biológica apropiada para el aprendizaje. Mientras escribíamos estas líneas nos enteramos de una joven que habiendo cursado varios semestres en la Facultad de Leyes no llegó a titularse y por lo tanto no tiene ningún perfil educativo, y sin embargo, impulsada por alguien, fue incluida en el personal de la SEV y ahí es enviada a cubrir la falta de algún maestro en las diferentes escuelas de la ciudad. Lo que nos parece algo totalmente incorrecto. En cuanto a la comprensión de la lectura, se puede mejorar haciendo algo parecido a lo que nosotros hacíamos en el Colegio Preparatorio de Xalapa, coloquialmente conocido como “Prepa Juárez”, por su ubicación en la calle de Juárez, en el turno vespertino en la clase intitulada “taller de lectura y redacción”. En cada sesión llevábamos el tema de la clase impreso en hojas que les repartíamos y les pedíamos que la leyeran y nos preguntaran lo que no entendieran, pensando que las palabras que usábamos para muchos eran desconocidas y para poder comprenderlas necesitamos entenderlas. Esperando que ustedes apreciables y pacientes lectores/ras estén de acuerdo con nosotros, nos despedimos en esta ocasión. ¡Salud!