De la manera más cruda el coordinador de los senadores panistas, el jarocho Julen Rementería, acaba de comprobar que depositar la confianza en exceso, en quienes no hay comprobada lealtad ni capacidad, se paga muy caro.
Distinguidos militantes de Acción Nacional, que aprecian al senador Julen, nos expusieron lo anterior y lanzan igual advertencia a otros panistas que están en las mismas que Julen.
Y encarrerados en eso de, en buen onda, advertir a políticos sobre ciertos peligros que los acechan, nos dicen que sobresalientes militantes del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) también deben andar con pies de plomo, no sea que por no cuidar de quiénes se rodean como asesores, les suceda lo mismo que a su rival panista. Estos panistas expresan que el coordinador de los senadores azules nunca debió aceptar la asesoría de dos jóvenes, identificados en redes sociales uno como Tumbaburro, originario de Tamaulipas, y otro autonombrado Donllévelo, nativo del puerto de Veracruz y quien se llama Christian Camacho.
A ellos se les identifica, principalmente a Camacho, como quienes embarcaron a Rementería en la aventura de reunirse con el líder de la ultraderechista organización Vox, Santiago Abascal, y firmar la llamada Carta Madrid, lo que desató un huracán de críticas dentro y fuera de Acción Nacional.
Ante eso, la Comisión Ejecutiva del CEN del PAN ordenó el cese de Christian Camacho, quien, nos comentan, reaccionó con sorna ante esa decisión y escribió en su cuenta de twitter:
“¿Adivinen quién no va a ir a trabajar mañana? El facho de Christian Camacho. Ah caray, soy yo.
“La vida, la libertad, la familia, la patria, la propiedad privada y la democracia se defienden al precio que sea. Uno nunca debe arrepentirse de hacer lo correcto”.
Y con eso se despidió, dejando a su exjefe y asesorado en una tormenta en la que nunca debió estar, si hubiera tenido más cuidado para escoger a algunos de sus colaboradores.
La ultraderecha en México, nos dicen estos distinguidos panistas preocupados por lo que pasa en estos días en su partido, ha estado muy arraigada en el norte y centro del país. Aparte de esas zonas, solo incursionó con fuerza en Puebla y sus intentos de penetrar en el sur fueron casi siempre infructuosos.
Uno de los lugares del sur en los que intentó penetrar con sus ideas radicales, nos precisan, fue el puerto de Veracruz, con el MURO, Yunque y la Guardia Unificadora Iberoamericana (Guia), organismo este último que dejó huella de su membrete durante muchos años en una construcción ubicada sobre la avenida Allende, muy cerca del penal del mismo nombre, que hace algunos ayeres mandó a desalojar Fidel Herrera.
Eso fue, nos indican estos panistas que no quieren ver a su partido en la ultraderecha, sobretodo en la década de los setenta, y el más conocido representante de esos grupos, nos recuerdan, fue el economista Luis Pazos, cuyo nombre estuvo asociado con el Movimiento Universitario de Renovadora Orientación (MURO).
Por lo que se ve en el puerto jarocho quedan polvos de esos lodos, nos apuntan los referidos panistas.
Deben estar preocupados otros militantes del PAN, nos remarcan estos militantes azules que se han metido a dar consejos.
¿Por qué debe haber esa preocupación?, pues nos dicen que porque simple y sencillamente Donllévelo y Tumbaburro están asesorando a más panistas de la región porteña.
Nos aseguran que entre los “asesorados” están Unánue, quien próximamente será alcalde boqueño y Polo Deschamps, entre otros, pero…
Peeero lo más sorprendente, nos aseguran estos panistas que aparte de preocupados están muy enterados, es que otros muy parecidos a este par de asesores, también le estarían prestado sus servicios a distinguidos militantes de otros partidos, archirrivales del PAN.
De eso, nos juran estos azules, debe saber el delegado estatal del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Ramírez Zepeta.
