/ miércoles 30 de diciembre de 2020

Berrinche del PT

Una vez definida la alianza entre Morena, Partido Verde y PT en el proceso electoral federal de 2021, la dirigencia estatal de este último partido evidenció su inconformidad por haber quedado con las manos vacías en la distribución de las candidaturas a las diputaciones.

En los términos de la negociación en dicha coalición, de las 12 diputaciones federales por igual número de distritos en los que habrá suma de partidos en Veracruz, a Morena correspondieron 8; al PVEM, 4. El PT, a pesar de ser parte de esa suma de fuerzas, se quedó mirando.

Para la dirigencia estatal del PT no fue consuelo la postulación de candidatos en 44 distritos en todo el país. Lo importante para los petistas veracruzanos es que no tendrán un solo diputado federal.

La reacción de la dirigencia fue sacar al partido de la alianza local en Veracruz; el PT iría sólo en el proceso para elegir diputados locales y ediles.

La realidad es que la dirigencia de dicho partido en la entidad arrastraba su molestia, su resentimiento con Morena prácticamente desde que se integró el gabinete estatal del gobernador Cuitláhuac García.

Al igual que el desaparecido Partido Encuentro Social, el PT no fue tomado en cuenta a la hora de los nombramientos en el gobierno veracruzano.

El PT se quedó con las manos vacías; el partido logró algunas diputaciones locales, pero en el Poder Ejecutivo, nada, ni siquiera hubo militantes en espacios menores.

Parece que a la hora de designar colaboradores, el gobernador analizó y ponderó el verdadero peso del PT en la entidad: una muy pequeña estructura, apenas un puñado de militantes que permanecieron al margen de la contienda de 2018; sólo aparecieron sus cabezas visibles con alguna conferencia de prensa de forma ocasional.

Cuitláhuac García ganó la gubernatura con más de un millón 460 mil votos; a esa causa, el PT sólo aportó poco más de 73 mil. Muy probablemente por ello, el PT fue excluido de los nombramientos del gobierno estatal.

Antes de la contienda de 2018, en las elecciones para renovar ayuntamientos, 2017, el PT ganó sólo en 4 municipios, Amatitlán, Las Choapas, Filomeno Mata y Saltabarranca; 4.7 por ciento de los votos en la entidad; en tanto que en la elección para gobernador de 2016, con Alba Leonila Méndez Herrera como candidata, una ex panista que llegaba con cierto cartel en la zona de Atzalan, Tlapacoyan y Martínez de la Torre, el partido no logró ni siquiera 50 mil votos.

A esa escasa aportación y al hecho de que el PT no cuenta con liderazgos de peso, podría deberse que el partido fue excluido de las candidaturas a las diputaciones federales.

Así, la dirigencia hace un berrinche y a medida de presión su dirigencia anuncia que salen de la coalición y que irán solos en la elección para alcaldes y diputados.

¿Implica esa decisión de los petistas un golpe contundente a Morena?; en definitiva, no; el PT aporta muy poco, casi nada, porque sólo es un membrete; carece de cuadros y su estructura es muy limitada. Con o sin ese partido, la alianza Morena-Partido Verde será protagonista en la contienda de 2021; y quienes tienen el control del Movimiento tienen muy claro ese cálculo.

Una vez definida la alianza entre Morena, Partido Verde y PT en el proceso electoral federal de 2021, la dirigencia estatal de este último partido evidenció su inconformidad por haber quedado con las manos vacías en la distribución de las candidaturas a las diputaciones.

En los términos de la negociación en dicha coalición, de las 12 diputaciones federales por igual número de distritos en los que habrá suma de partidos en Veracruz, a Morena correspondieron 8; al PVEM, 4. El PT, a pesar de ser parte de esa suma de fuerzas, se quedó mirando.

Para la dirigencia estatal del PT no fue consuelo la postulación de candidatos en 44 distritos en todo el país. Lo importante para los petistas veracruzanos es que no tendrán un solo diputado federal.

La reacción de la dirigencia fue sacar al partido de la alianza local en Veracruz; el PT iría sólo en el proceso para elegir diputados locales y ediles.

La realidad es que la dirigencia de dicho partido en la entidad arrastraba su molestia, su resentimiento con Morena prácticamente desde que se integró el gabinete estatal del gobernador Cuitláhuac García.

Al igual que el desaparecido Partido Encuentro Social, el PT no fue tomado en cuenta a la hora de los nombramientos en el gobierno veracruzano.

El PT se quedó con las manos vacías; el partido logró algunas diputaciones locales, pero en el Poder Ejecutivo, nada, ni siquiera hubo militantes en espacios menores.

Parece que a la hora de designar colaboradores, el gobernador analizó y ponderó el verdadero peso del PT en la entidad: una muy pequeña estructura, apenas un puñado de militantes que permanecieron al margen de la contienda de 2018; sólo aparecieron sus cabezas visibles con alguna conferencia de prensa de forma ocasional.

Cuitláhuac García ganó la gubernatura con más de un millón 460 mil votos; a esa causa, el PT sólo aportó poco más de 73 mil. Muy probablemente por ello, el PT fue excluido de los nombramientos del gobierno estatal.

Antes de la contienda de 2018, en las elecciones para renovar ayuntamientos, 2017, el PT ganó sólo en 4 municipios, Amatitlán, Las Choapas, Filomeno Mata y Saltabarranca; 4.7 por ciento de los votos en la entidad; en tanto que en la elección para gobernador de 2016, con Alba Leonila Méndez Herrera como candidata, una ex panista que llegaba con cierto cartel en la zona de Atzalan, Tlapacoyan y Martínez de la Torre, el partido no logró ni siquiera 50 mil votos.

A esa escasa aportación y al hecho de que el PT no cuenta con liderazgos de peso, podría deberse que el partido fue excluido de las candidaturas a las diputaciones federales.

Así, la dirigencia hace un berrinche y a medida de presión su dirigencia anuncia que salen de la coalición y que irán solos en la elección para alcaldes y diputados.

¿Implica esa decisión de los petistas un golpe contundente a Morena?; en definitiva, no; el PT aporta muy poco, casi nada, porque sólo es un membrete; carece de cuadros y su estructura es muy limitada. Con o sin ese partido, la alianza Morena-Partido Verde será protagonista en la contienda de 2021; y quienes tienen el control del Movimiento tienen muy claro ese cálculo.