/ viernes 31 de diciembre de 2021

Bienvenido 2022, con todas las oportunidades

Cerramos el año y somos afortunados, después de ver las estadísticas mundiales de las defunciones provocadas por el Covid-19, es decir, tenemos frente a nosotros una nueva oportunidad para ser mejores en todo y no esperar a que el gobierno nos dé lo que necesitamos.

La gran oportunidad es estar con vida, sanos y el ánimo de convertirnos en triunfadores solo queda en nosotros, porque nadie más podrá hacer lo que realmente anhelamos, lo que nos mueve a continuar luchando diariamente en esta sociedad y en este mundo.

La capacidad intelectual la tendremos que esforzar y sacar todo el provecho de esa inteligencia que Dios nos dio en igualdad de condiciones, a menos que padezcamos alguna enfermedad que no nos permita el desarrollo total, pero en términos generales estamos con los sentidos abiertos para enfrentar el futuro. En México tendremos que superar aquel concepto de que el que no tranza no avanza, porque eso nos ha mantenido muy disminuidos en nuestras capacidades y ya no puede ni debe ser así, tendremos que olvidar aquella idea de recibir una herencia, sacarnos la lotería o hacer trampa hasta que nos descubran; eso ya no puede ser parte de nuestra integridad.

Tenemos que ver el próximo año como el terreno fértil para poner en práctica todas nuestras habilidades, sentir que estamos frente a un nuevo reto para no temer a los riesgos ni detenernos a observar lo que nos podría pasar, porque sencillamente estaríamos perdiendo el tiempo.

No debemos temer ni siquiera a establecer una sociedad para iniciar un negocio, tenemos que aprovechar las fortalezas de nuestros compañeros, nuestros amigos y todos aquellos que sean capaces de entendernos y nosotros entenderlos a ellos.

Ya estuvo bien de mantenernos en el terreno intermedio, sin buscar el éxito. No hay nada que temer, sencillamente ver para adelante y descubrir nuevos nichos de oportunidades, porque afortunadamente en México y en Veracruz de manera específica, tenemos todo, entonces tenemos que aprovecharlo.

Deseo que en el brindis de la media noche, cuando llegue el esperado 2022, juntemos nuestras copas y que nuestros deseos se conviertan en un decreto, para ir directo al éxito. Muchas felicidades.

Tenemos que ver el próximo año como el terreno fértil para poner en práctica todas nuestras habilidades, sentir que estamos frente a un nuevo reto para no temer a los riesgos ni detenernos a observar lo que nos podría pasar.

Cerramos el año y somos afortunados, después de ver las estadísticas mundiales de las defunciones provocadas por el Covid-19, es decir, tenemos frente a nosotros una nueva oportunidad para ser mejores en todo y no esperar a que el gobierno nos dé lo que necesitamos.

La gran oportunidad es estar con vida, sanos y el ánimo de convertirnos en triunfadores solo queda en nosotros, porque nadie más podrá hacer lo que realmente anhelamos, lo que nos mueve a continuar luchando diariamente en esta sociedad y en este mundo.

La capacidad intelectual la tendremos que esforzar y sacar todo el provecho de esa inteligencia que Dios nos dio en igualdad de condiciones, a menos que padezcamos alguna enfermedad que no nos permita el desarrollo total, pero en términos generales estamos con los sentidos abiertos para enfrentar el futuro. En México tendremos que superar aquel concepto de que el que no tranza no avanza, porque eso nos ha mantenido muy disminuidos en nuestras capacidades y ya no puede ni debe ser así, tendremos que olvidar aquella idea de recibir una herencia, sacarnos la lotería o hacer trampa hasta que nos descubran; eso ya no puede ser parte de nuestra integridad.

Tenemos que ver el próximo año como el terreno fértil para poner en práctica todas nuestras habilidades, sentir que estamos frente a un nuevo reto para no temer a los riesgos ni detenernos a observar lo que nos podría pasar, porque sencillamente estaríamos perdiendo el tiempo.

No debemos temer ni siquiera a establecer una sociedad para iniciar un negocio, tenemos que aprovechar las fortalezas de nuestros compañeros, nuestros amigos y todos aquellos que sean capaces de entendernos y nosotros entenderlos a ellos.

Ya estuvo bien de mantenernos en el terreno intermedio, sin buscar el éxito. No hay nada que temer, sencillamente ver para adelante y descubrir nuevos nichos de oportunidades, porque afortunadamente en México y en Veracruz de manera específica, tenemos todo, entonces tenemos que aprovecharlo.

Deseo que en el brindis de la media noche, cuando llegue el esperado 2022, juntemos nuestras copas y que nuestros deseos se conviertan en un decreto, para ir directo al éxito. Muchas felicidades.

Tenemos que ver el próximo año como el terreno fértil para poner en práctica todas nuestras habilidades, sentir que estamos frente a un nuevo reto para no temer a los riesgos ni detenernos a observar lo que nos podría pasar.