/ martes 24 de noviembre de 2020

Cambio de baraja comenzada ya la partida

La reforma electoral de Morena fue muy arriesgada por los controvertidos cambios que propuso, por lo mismo -nos hacen ver expertos en este tema- había probabilidades muy altas de que fuera echada abajo en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), como acaba de suceder.

En ese sentido nos indican que una buena parte de las reformas y otras decisiones que ha impulsado el Movimiento de Regeneración Nacional en Veracruz han sido del mismo estilo, es decir, han estado o están al filo de la navaja.

Ésta en especial fue una bola bobita lanzada para que la batearan de jonrón los dirigentes de partidos de oposición, que no tuvieron que hacer un gran esfuerzo para presentar sus escritos ante la SCJN. Eso lo hicieron el PRI, PAN, PRD y Podemos, nos recuerdan.

Los asesores externos, funcionarios o diputados que hayan influido para que fuera presentada deberían tomar en cuenta este descalabro, pues nos dicen que una cosa es tener control sobre organismos locales y otra creer que se puede influir sobre los ministros en asuntos tan controvertidos.

La oposición de inmediato vio la intención de hacer modificaciones con el deseo de tomar ventaja por parte de Morena y así lo manifestó, pero no hubo respuesta a los reclamos.

Nos señalan que la reforma fue vendida como la intención de reducir gastos en cuestiones electorales, de ahí que bajaba en 50% lo aportado a partidos (para un supuesto ahorro de 177 millones de pesos) y eliminaba los 212 consejos electorales para dar paso solo a consejos distritales del Organismo Público Local Electoral de Veracruz.

Sin embargo, nos indican que la oposición veía en eso el deseo de reducirlos quitándoles recursos, en tanto Morena podría manejar dinero proveniente de otras fuentes, y el de estar en posibilidades de meter mano a las urnas si el contenido de éstas no era contado en el municipio en las que serían instaladas.

También nos dicen que era mal visto que la consulta para la revocación de mandato no tuviera efectos en Veracruz, siendo que es una de las principales banderas del líder de Morena, el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Ahora, con la decisión de ocho ministros de la Suprema Corte, el proceso electoral y el rumbo que llevaba da un giro importante. Quienes saben de estas cosas hacen esta comparación que nos comparten: con el juego de póker ya comenzado y con las apuestas a favor de uno de los jugadores, deciden cambiar barajas.

Así que ahora, con barajas nuevas, esta partida comienza otra vez y las apuestas cambiarán, nos dicen, de acuerdo a la que se vaya viendo en las semanas por venir.

Incluso hay quienes comentan que no sería extraño que las alianzas que estaban por concretarse puedan cambiar.

Ya se verá, pero lo que sí es un hecho, nos aseguran, es que este juego, tras la votación de los ministros de la SCJN, ya está más parejo.

Y hablando de alianzas, a diversos actores políticos no se les escapa que los de Morena, solos, no podían sacar adelante su reforma. Tuvieron que buscar aliados y uno fue el Partido Verde, por el que da la cara en Veracruz Marcelo Ruiz.

“Las reformas y adiciones a la Constitución Política del Estado de Veracruz de Ignacio de la Llave en materia electoral y de inclusión, aprobadas por la mayoría de los y las diputadas de la LXV Legislatura de Veracruz busca modernizar y hacer más eficiente el desarrollo de elecciones y la participación democrática de todos los veracruzanos bajos los principios de equidad, transparencia, austeridad y respeto a sus derechos, sostuvo el dirigente estatal del Partido Verde, Carlos Marcelo Ruiz Sánchez”, así hizo publicar un comunicado.

Qué dirá ahora que ocho ministros echaron abajo esa reforma, nos preguntan.

La reforma electoral de Morena fue muy arriesgada por los controvertidos cambios que propuso, por lo mismo -nos hacen ver expertos en este tema- había probabilidades muy altas de que fuera echada abajo en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), como acaba de suceder.

En ese sentido nos indican que una buena parte de las reformas y otras decisiones que ha impulsado el Movimiento de Regeneración Nacional en Veracruz han sido del mismo estilo, es decir, han estado o están al filo de la navaja.

Ésta en especial fue una bola bobita lanzada para que la batearan de jonrón los dirigentes de partidos de oposición, que no tuvieron que hacer un gran esfuerzo para presentar sus escritos ante la SCJN. Eso lo hicieron el PRI, PAN, PRD y Podemos, nos recuerdan.

Los asesores externos, funcionarios o diputados que hayan influido para que fuera presentada deberían tomar en cuenta este descalabro, pues nos dicen que una cosa es tener control sobre organismos locales y otra creer que se puede influir sobre los ministros en asuntos tan controvertidos.

La oposición de inmediato vio la intención de hacer modificaciones con el deseo de tomar ventaja por parte de Morena y así lo manifestó, pero no hubo respuesta a los reclamos.

Nos señalan que la reforma fue vendida como la intención de reducir gastos en cuestiones electorales, de ahí que bajaba en 50% lo aportado a partidos (para un supuesto ahorro de 177 millones de pesos) y eliminaba los 212 consejos electorales para dar paso solo a consejos distritales del Organismo Público Local Electoral de Veracruz.

Sin embargo, nos indican que la oposición veía en eso el deseo de reducirlos quitándoles recursos, en tanto Morena podría manejar dinero proveniente de otras fuentes, y el de estar en posibilidades de meter mano a las urnas si el contenido de éstas no era contado en el municipio en las que serían instaladas.

También nos dicen que era mal visto que la consulta para la revocación de mandato no tuviera efectos en Veracruz, siendo que es una de las principales banderas del líder de Morena, el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Ahora, con la decisión de ocho ministros de la Suprema Corte, el proceso electoral y el rumbo que llevaba da un giro importante. Quienes saben de estas cosas hacen esta comparación que nos comparten: con el juego de póker ya comenzado y con las apuestas a favor de uno de los jugadores, deciden cambiar barajas.

Así que ahora, con barajas nuevas, esta partida comienza otra vez y las apuestas cambiarán, nos dicen, de acuerdo a la que se vaya viendo en las semanas por venir.

Incluso hay quienes comentan que no sería extraño que las alianzas que estaban por concretarse puedan cambiar.

Ya se verá, pero lo que sí es un hecho, nos aseguran, es que este juego, tras la votación de los ministros de la SCJN, ya está más parejo.

Y hablando de alianzas, a diversos actores políticos no se les escapa que los de Morena, solos, no podían sacar adelante su reforma. Tuvieron que buscar aliados y uno fue el Partido Verde, por el que da la cara en Veracruz Marcelo Ruiz.

“Las reformas y adiciones a la Constitución Política del Estado de Veracruz de Ignacio de la Llave en materia electoral y de inclusión, aprobadas por la mayoría de los y las diputadas de la LXV Legislatura de Veracruz busca modernizar y hacer más eficiente el desarrollo de elecciones y la participación democrática de todos los veracruzanos bajos los principios de equidad, transparencia, austeridad y respeto a sus derechos, sostuvo el dirigente estatal del Partido Verde, Carlos Marcelo Ruiz Sánchez”, así hizo publicar un comunicado.

Qué dirá ahora que ocho ministros echaron abajo esa reforma, nos preguntan.

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