En los primeros minutos del primero de diciembre se dio el cambio de administración en el estado de Veracruz para el periodo 2018-2024. Cuitláhuac García Jiménez hizo juramento en los términos de la Constitución Política del Estado de Veracruz y de esta manera se dará otro tipo de gobernar.
Las primeras medidas anunciadas van de la mano de las hechas por Manuel López Obrador, hoy nuestro presidente constitucional, que tienen que ver con las finanzas públicas.
Plan de austeridad que implique reducción de su salario en 23%. secretarios de gabinete un 13%, subsecretarios y directores generales un 9%. Directores de área y subdirectores un 7%. Eliminación de telefonía celular, gastos de seguros incluidos: gastos médicos, eliminación de contratación desmedida de asesores, eliminación de seguridad privada personal, eliminación de renta de casa, eliminación de compra de vehículos para uso personal. Además de la eliminación de otras prebendas indebidas a costa del erario. Sobre este tema concluyó: “Basta de enriquecerse con cargos públicos”. Pidió a los representantes de los poderes Judicial y Legislativo ser ejemplo de esta demanda ciudadana.
Estas medidas tienen importancia absoluta en términos monetarios, pero son relativas al presupuesto y al tamaño del problema financiero del estado.
La óptica tiene que estar centrada en lograr ahorros que permitan tener un balance presupuestario superavitario, cuyos excedentes pueden, como cita la Ley de Disciplina Financiera, aplicarse a los pasivos a cargo del estado.
En la historia de las finanzas públicas de Veracruz han sido numerosos los programas aplicados; los de mayor éxito fueron los realizados al gasto corriente, en específico a los rubros 1000, 2000, 3000, es decir, sueldo y salarios, materiales e insumos y gastos generales.
En el año 2003 y 2004 desaparecieron subsecretarías, direcciones generales, OPD, plazas extraordinarias, por honorarios y compensaciones, el ahorro fue superior a mil 500 millones de pesos.
¿Qué se pudiera hacer con voluntad política para darle viabilidad financiera al estado de Veracruz?, daré algunas líneas.
Compactar la estructura; en lugar de secretarías y subsecretarías, establecer direcciones generales subdirecciones, y direcciones de área y departamentos; como operaba la administración de Chirinos Calero, con ello se lograría disminuir los niveles salariales y seguramente sobrarían puestos y áreas.
¿Qué no se considera esta opción?; bueno, pues se reduce la estructura orgánica, con las siguientes medidas: la Secretaría de Trabajo pasaría a ser Dirección General de la Secretaria General de Gobierno. La Secretaría de Turismo pasaría a la Secretaría de Desarrollo Económico como Dirección General. La Secretaría de Medio Ambiente pasaría a la Secretaría de Salud como Dirección General. Invivienda pasaría como Dirección General a SIOP o Desarrollo Social. El Instituto del Deporte pasaría a Dirección General a la Secretaria de Educación Pública. Se sectorizaría CAEV e IFIDE (construcción de escuelas) con la Secretaría de Infraestructura y Obras Públicas como dependencias.
Otras acciones: Se eliminarían las subsecretarías en SIOP, Salud y Seguridad Pública.
Al magisterio estatal se aplicarían las reglas federales del FONE a comisionados, aviadores, dobles y triples plazas y evaluación de docentes.
Eliminación de comisionados, escoltas, choferes, ayudantes, auxiliares y asistentes en el sector central.
Eliminación de plazas extraordinarias, de honorarios y una revisión a detalle de las plazas de sólo compensación, en este segmento hay muchos trabajadores que realizan funciones operativas importantes.
Finalmente, los puntos que representarían la solución; una inmediata y otra en el mediano plazo:
Primera.- Pasar al gobierno federal el personal, control, evaluación, capacitación, supervisión de educación estatal y con ello la nómina, como funciona el estado CDMX, el de Oaxaca, y ahora con la decisión comunicada por el Gobierno del Estado de Michoacán en ese sentido.
Segunda.- Que el gobierno federal acuda en rescate del gobierno de Veracruz, absorbiendoel crédito con garantía del FAFEF y los bonos Cupón Cero, de Fonden y Seguridad Pública con un importe de casi 12 mil millones de pesos.
Con estas medidas Veracruz tendría viabilidad financiera y se tendrían recursos para rescatar su infraestructura, posibilitar una mejor seguridad pública y servicios de salud para el pueblo de Veracruz; esto es con una óptica diferente en materia de finanzas públicas.
