A regañadientes, el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares declinó a su facultad de ley de proponer a los doce magistrados que ocuparán las plazas vacantes en el Poder Judicial del Estado y, al hacerlo, allana el camino hacia una transición de gobierno menos tensa. “He decidido no presentar ninguna propuesta al Congreso del Estado para el nombramiento de magistrados, y dejar que lo haga quien me sucederá como Gobernador; él propondrá y será la siguiente Legislatura quien decida”, señaló en conferencia de prensa a la que convocó en Palacio de gobierno, con el argumento de que su decisión la tomó “para no lastimar la imagen” de su administración. ¿Qué hizo al mandatario decidir por la conciliación y no por la confrontación? Acaso el avistamiento de otra tormenta política como la que se presentó por la imposición del Fiscal Anticorrupción (con sólo 27 votos, cuando la ley exige que sean 34 para estos casos) que hizo la mayoría panista y perredista en la Cámara de Diputados, que obedecen a sus intereses, cuya elección y permanencia será llevada a tribunales, según lo anticiparon el propio mandatario electo, Cuitláhuac García Jiménez, miembros de la actual bancada de MORENA y varios de los aspirantes a ese cargo que consideran ilegal su nombramiento, lo cual en algún momento también podría obligar a la solicitud de renuncia por parte del propio Marcos Even Torres Zamudio por su cuestionada designación que, pese a sus méritos profesionales, le resta desde ahora credibilidad en el desempeño de esa función. Como quiera que sea, es un buen signo que el gobierno entrante debe saludar, y este a su vez demostrar que se sujetará a la ley en la propuesta y elección de los nuevos funcionarios judiciales, sin beneficiar a socios ni amigos, tentación del poder que muy pocos pueden eludir. Esperemos
QUIEREN SUBIR A 11 PESOS EL TRANSPORTE CHATARRA
+++Desde luego que debe considerarse un juego tramposo ese anuncio de ayer de los camioneros de que van a aumentar las tarifas del pasaje a 11 pesos, aún sin autorización y parejo, es decir, no habrá descuento a estudiantes ni a personas de la tercera edad en el servicio urbano de transporte, como hasta ahora lo ha sido. Lo es porque ocurre en un momento en que dichos concesionarios pudiera advertir un gobierno débil en el último tramo de su periodo, que no se cree que sea y en cambio sí puede tratarse de lo que suele llamarse “valores entendidos”, o como coloquialmente se dice: “tentarle el agua a los camotes” de la administración entrante, cuyo posicionamiento deberá ocurrir de un momento a otro. Los transportistas podrán tener las razones que esgrimen, como eso de que la gasolina ha sufrido incrementos, pero también saben que aumentar el costo del pasaje “por sus pistolas” es una infracción a la ley que se castiga cuando menos con multas, detención de unidades e, incluso, hasta con el retiro de los títulos de concesión. Además, también se aprovechó que los estudiantes universitarios regresarán a clases hasta el próximo lunes, como es el caso de la UV, que serían los primeros en protestar por una medida que los afecta directamente. ¿Qué debe esperarse? Que el gobierno del estado los llame al orden o aplique los correctivos previstos para estos casos, en caso de que cumplan su amenaza. En realidad los que deberían exigir un mejor servicio público de transporte son los usuarios, cambiar la mayoría de las unidades que son verdaderas chatarras, sucias y malolientes, con fallas mecánicas y conductores que ponen en constante peligro de muerte a las personas que tienen la necesidad de utilizar este servicio. Como en todo, sí hay líneas camioneras que son modelo de cómo debe ser el SU, como Ruta 85, parte de la Miguel Alemán y de Boca del Río, estos con aire acondicionado y que cobran diez pesos, un peso más de lo autorizado, que las personas pagan con gusto por ese valor agregado. Las demás, están para llorar.
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