/ martes 22 de octubre de 2019

Cisneros-Huerta, roces

Este domingo, luego de los incidentes que se suscitaron el día anterior en las Asambleas Distritales de Morena para elegir coordinadoras y coordinadores distritales, congresistas estatales, consejeras y consejeros estatales, así como congresistas nacionales, el gobernador Cuitláhuac García difundió por Twitter una fotografía en la que aparecía reunido en su despacho con su secretario de Gobierno, Éric Cisneros, y el súper delegado del gobierno federal Manuel Huerta. A los tres, de pie, se les veía sonrientes. El texto del mandatario estatal decía: “La unidad y el trabajo coordinado entre el gobierno estatal y la representación del federal a cargo del compañero Manuel Huerta, será fundamental para atender la prioridad que es el bienestar de nuestro pueblo veracruzano”.

Sin embargo, a pesar de la obvia intención del jefe del Ejecutivo por zanjar las presuntas diferencias políticas entre Cisneros y Huerta, éstas siguen remarcándose.

Y es que se sabe que aunque el secretario de Gobierno y el delegado de la Secretaría de Bienestar coinciden con la supuesta línea marcada por la nomenclatura de Morena a favor de Bertha Luján para sustituir en la dirigencia nacional a Yeidckol Polevnsky, en realidad sus diferencias se han hecho más que evidentes por la disputa del control de la dirigencia estatal del partido lopezobradorista.

Huerta, según ha trascendido, estaría apoyando al diputado federal de Papantla, Jaime Humberto Pérez Bernabé, mientras que Cisneros —se supone que de acuerdo con el gobernador— estaría operando a favor de otros dos aspirantes más allegados al mandatario veracruzano: la exdiputada local de Xalapa, Tanya Carola Viveros Cházaro y Gonzalo Vicencio Flores, actual secretario general del comité estatal de Morena, exalcalde de Chicontepec y esposo de la secretaria estatal de Trabajo, Guadalupe Argüelles Lozano.

Casualmente, este domingo el diputado federal Pérez Bernabé denunció públicamente en las instalaciones de la Fiscalía regional de Papantla que teme por su vida e integridad física, responsabilizando directamente al secretario de Gobierno de cualquier atentado en contra suya y/o de su familia. También acusó la corrupción que según él impera en la Secretaría de Gobierno y en el Congreso del Estado, señalando que el titular de la Segob y el diputado local de Morena, Éric Domínguez, presidente de la Comisión de Vigilancia, actúan en contubernio con exfuncionarios duartistas, como el exdirigente priista Jorge Carvallo Delfín, para limpiar las cuentas públicas de algunos alcaldes.

Este lunes, coincidentemente, de la Fiscalía General del Estado, a cargo de Verónica Hernández Giadáns, exdirectora jurídica de la Segob, fue filtrada a los medios una orden de aprehensión que habría sido girada en contra del legislador papanteco por secuestro.

Pérez Bernabé, obviamente, volvió a arremeter en contra de Cisneros, exigiendo su renuncia por entrometerse en el proceso interno de Morena.


Este domingo, luego de los incidentes que se suscitaron el día anterior en las Asambleas Distritales de Morena para elegir coordinadoras y coordinadores distritales, congresistas estatales, consejeras y consejeros estatales, así como congresistas nacionales, el gobernador Cuitláhuac García difundió por Twitter una fotografía en la que aparecía reunido en su despacho con su secretario de Gobierno, Éric Cisneros, y el súper delegado del gobierno federal Manuel Huerta. A los tres, de pie, se les veía sonrientes. El texto del mandatario estatal decía: “La unidad y el trabajo coordinado entre el gobierno estatal y la representación del federal a cargo del compañero Manuel Huerta, será fundamental para atender la prioridad que es el bienestar de nuestro pueblo veracruzano”.

Sin embargo, a pesar de la obvia intención del jefe del Ejecutivo por zanjar las presuntas diferencias políticas entre Cisneros y Huerta, éstas siguen remarcándose.

Y es que se sabe que aunque el secretario de Gobierno y el delegado de la Secretaría de Bienestar coinciden con la supuesta línea marcada por la nomenclatura de Morena a favor de Bertha Luján para sustituir en la dirigencia nacional a Yeidckol Polevnsky, en realidad sus diferencias se han hecho más que evidentes por la disputa del control de la dirigencia estatal del partido lopezobradorista.

Huerta, según ha trascendido, estaría apoyando al diputado federal de Papantla, Jaime Humberto Pérez Bernabé, mientras que Cisneros —se supone que de acuerdo con el gobernador— estaría operando a favor de otros dos aspirantes más allegados al mandatario veracruzano: la exdiputada local de Xalapa, Tanya Carola Viveros Cházaro y Gonzalo Vicencio Flores, actual secretario general del comité estatal de Morena, exalcalde de Chicontepec y esposo de la secretaria estatal de Trabajo, Guadalupe Argüelles Lozano.

Casualmente, este domingo el diputado federal Pérez Bernabé denunció públicamente en las instalaciones de la Fiscalía regional de Papantla que teme por su vida e integridad física, responsabilizando directamente al secretario de Gobierno de cualquier atentado en contra suya y/o de su familia. También acusó la corrupción que según él impera en la Secretaría de Gobierno y en el Congreso del Estado, señalando que el titular de la Segob y el diputado local de Morena, Éric Domínguez, presidente de la Comisión de Vigilancia, actúan en contubernio con exfuncionarios duartistas, como el exdirigente priista Jorge Carvallo Delfín, para limpiar las cuentas públicas de algunos alcaldes.

Este lunes, coincidentemente, de la Fiscalía General del Estado, a cargo de Verónica Hernández Giadáns, exdirectora jurídica de la Segob, fue filtrada a los medios una orden de aprehensión que habría sido girada en contra del legislador papanteco por secuestro.

Pérez Bernabé, obviamente, volvió a arremeter en contra de Cisneros, exigiendo su renuncia por entrometerse en el proceso interno de Morena.


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