/ lunes 12 de noviembre de 2018

Coatepec, la trágica realidad de un pueblo mágico

Lo que ocurre en el municipio de Coatepec, en cuanto a los resultados del Ayuntamiento local, resulta preocupante y ha motivado la indignación de los habitantes del lugar.

Si en Xalapa hay comentarios sobre los problemas derivados de la disposición final de la basura y de los muchos baches que se observan en calles y avenidas, en el pueblo mágico las cosas llegan al extremo de la ineficiencia gubernamental.

Entretenido en trivialidades, el alcalde Luis Enrique Fernández Peredo ha desatendido temas fundamentales para los coatepecanos, como la recolección de basura y la eficiencia de la poca, muy poca obra pública que realiza el ayuntamiento.

En Coatepec, las calles están destruidas; el deteriorado pavimento no corresponde a un lugar incorporado al programa de Pueblos Mágicos, que canaliza recursos federales.

En 2006, este municipio fue incluido en la lista de Pueblos Mágicos de la Secretaría de Turismo; la enorme riqueza histórica, tradiciones y arquitectura fueron determinantes para que Coatepec alcanzara esta categoría. En este lugar destacan construcciones como la Parroquia de San Jerónimo, el Parque Miguel Hidalgo, el Museo de la Orquídea, y las haciendas La Orduña y Zimpizahua, considerada como una de las cunas del cultivo del café en Veracruz.

Pues bien, este pueblo mágico enfrenta ahora una tragedia producto de la ineficiencia de un gobierno municipal que ha permitido que los baches deterioren su centro histórico y que la basura inunde las calles.

Pasan días, incluso semanas, y el camión recolector de desechos no pasa por las colonias y por el centro del municipio, se han quejado en reiteradas ocasiones los habitantes del lugar a través de las redes sociales.

En las esquinas de las arterias viales de Coatepec, las bolsas con basura forman verdaderos cerros que causan una pésima imagen y constituyen un riesgo para la salud pública.

No es todo: el ayuntamiento de Fernández Peredo abrió varias calles del centro para iniciar trabajos de pavimentación; el problema es que pasan semanas y meses y arterias como la calle Quinta de Aldama, por ejemplo, siguen cerradas a la circulación desde principios de septiembre debido a una aparente mala planeación de la obra.

Igual ocurre en las calles Miguel Rebolledo y Morelos; el resultado es un caos vial, a pesar del cambio temporal del sentido de la circulación vehicular, que desalienta la llegada de los visitantes y desespera a la población local.

Ese, sin embargo, es un problema menor; la indignación entre los habitantes de Coatepec es provocada por la desidia, el desinterés y la ineficiencia del gobierno local para enfrentar y resolver el problema de la recolección de basura.


En ese lugar es evidente la molestia social con relación a una autoridad municipal calificada como incompetente, ineficiente y poco interesada en los problemas de los pobladores.

No tiene la culpa el indio, reza la sentencia popular; sin embargo, esa ineficiencia en el Ayuntamiento coatepecano pasará la factura al partido del alcalde, el PAN, en las próximas elecciones municipales, como ocurrió en el proceso del presente año.

Lo paradójico es que este lugar, que debería causar orgullo para los veracruzanos, hoy sólo provoca pena e indignación.

Muy arrepentido debe estar a estas alturas Manolo Sánchez Martínez, ex alcalde y ex diputado local, a quien se ubica como impulsor y promotor de la candidatura de Fernández Peredo. @luisromero85



Lo que ocurre en el municipio de Coatepec, en cuanto a los resultados del Ayuntamiento local, resulta preocupante y ha motivado la indignación de los habitantes del lugar.

Si en Xalapa hay comentarios sobre los problemas derivados de la disposición final de la basura y de los muchos baches que se observan en calles y avenidas, en el pueblo mágico las cosas llegan al extremo de la ineficiencia gubernamental.

Entretenido en trivialidades, el alcalde Luis Enrique Fernández Peredo ha desatendido temas fundamentales para los coatepecanos, como la recolección de basura y la eficiencia de la poca, muy poca obra pública que realiza el ayuntamiento.

En Coatepec, las calles están destruidas; el deteriorado pavimento no corresponde a un lugar incorporado al programa de Pueblos Mágicos, que canaliza recursos federales.

En 2006, este municipio fue incluido en la lista de Pueblos Mágicos de la Secretaría de Turismo; la enorme riqueza histórica, tradiciones y arquitectura fueron determinantes para que Coatepec alcanzara esta categoría. En este lugar destacan construcciones como la Parroquia de San Jerónimo, el Parque Miguel Hidalgo, el Museo de la Orquídea, y las haciendas La Orduña y Zimpizahua, considerada como una de las cunas del cultivo del café en Veracruz.

Pues bien, este pueblo mágico enfrenta ahora una tragedia producto de la ineficiencia de un gobierno municipal que ha permitido que los baches deterioren su centro histórico y que la basura inunde las calles.

Pasan días, incluso semanas, y el camión recolector de desechos no pasa por las colonias y por el centro del municipio, se han quejado en reiteradas ocasiones los habitantes del lugar a través de las redes sociales.

En las esquinas de las arterias viales de Coatepec, las bolsas con basura forman verdaderos cerros que causan una pésima imagen y constituyen un riesgo para la salud pública.

No es todo: el ayuntamiento de Fernández Peredo abrió varias calles del centro para iniciar trabajos de pavimentación; el problema es que pasan semanas y meses y arterias como la calle Quinta de Aldama, por ejemplo, siguen cerradas a la circulación desde principios de septiembre debido a una aparente mala planeación de la obra.

Igual ocurre en las calles Miguel Rebolledo y Morelos; el resultado es un caos vial, a pesar del cambio temporal del sentido de la circulación vehicular, que desalienta la llegada de los visitantes y desespera a la población local.

Ese, sin embargo, es un problema menor; la indignación entre los habitantes de Coatepec es provocada por la desidia, el desinterés y la ineficiencia del gobierno local para enfrentar y resolver el problema de la recolección de basura.


En ese lugar es evidente la molestia social con relación a una autoridad municipal calificada como incompetente, ineficiente y poco interesada en los problemas de los pobladores.

No tiene la culpa el indio, reza la sentencia popular; sin embargo, esa ineficiencia en el Ayuntamiento coatepecano pasará la factura al partido del alcalde, el PAN, en las próximas elecciones municipales, como ocurrió en el proceso del presente año.

Lo paradójico es que este lugar, que debería causar orgullo para los veracruzanos, hoy sólo provoca pena e indignación.

Muy arrepentido debe estar a estas alturas Manolo Sánchez Martínez, ex alcalde y ex diputado local, a quien se ubica como impulsor y promotor de la candidatura de Fernández Peredo. @luisromero85