/ lunes 3 de junio de 2019

Comida en San Julián, confirma rupturas y verdes alianzas

El PRI vive sin duda el peor de sus momentos, queda claro después de los penosos resultados del pasado domingo, sin contar el derrumbe de proporciones nunca imaginadas que vivió ese partido en julio del 2018 al perder la presidencia.

Sin embargo, varios de los actores políticos, militantes de ese partido y simpatizantes externos siguen apostando por un resurgimiento que se antoja imposible, empezando por las claras fracturas al interior del desvencijado PRI.

El viernes pasado tuvo lugar una comida en el rancho San Julián de don José Yunes Suárez, padre del ex candidato al gobierno de Veracruz, Pepe Yunes Zorrilla, quien a su vez fungió como anfitrión del ex abanderado presidencial José Antonio Meade, su amigo cercano.

El evento estuvo nutrido, pero las señales son dignas de análisis y por fuerza retratan el momento que vive el PRI desde Veracruz, un estado, que antes fue estratégico y considerado gran bastión de votos.

Ausentes, el diputado federal del PRI, ex senador y ex candidato al gobierno de Veracruz, Héctor Yunes Landa, nada podría justificar no haber acudido a saludar a Pepe Meade, salvo porque no haya sido requerido o haya decidido no asistir, en cualquiera de los dos casos es inevitable notar un alejamiento.

También llamó la atención la ausencia del actual presidente estatal del PRI, Marlon Ramírez, quien de igual forma tendría que haber estado presente, sí es que estuviera en el ánimo de los “Pepes”, pareciera que no es así.

Invitado especial y muy apapachado, nada menos que el hijo del ex gobernador Fidel Herrera Beltrán, el ex diputado Javier Herrera Borunda a quienes muchos ven como fuerte aspirante por el PVEM y otros partidos al próximo gobierno de Veracruz.

Llama la atención también la ausencia de conocidas legisladoras locales y federales del PRI y PVEM.

En síntesis, la lista de invitados al rancho San Julián estuvo bien planeada y diseñada, pareciera, que fueron convocados como se dice popularmente “puros cuadernos, nada de hojas sueltas”.

Ágora

Pisaron callos. Resulta que el subsecretario de Finanzas que recientemente renunció a su cargo en Sefiplan de Veracruz, fue recomendación expresa del poderoso secretario de Hacienda, Carlos Urzúa.

Al parecer, Pavel Pazos Rincón estorbó y no se apegó a las directrices de un pariente consentido que se ha convertido en el verdadero jefe de finanzas, muy por encima del propio titular de dicha dependencia.

@monicamarena


El PRI vive sin duda el peor de sus momentos, queda claro después de los penosos resultados del pasado domingo, sin contar el derrumbe de proporciones nunca imaginadas que vivió ese partido en julio del 2018 al perder la presidencia.

Sin embargo, varios de los actores políticos, militantes de ese partido y simpatizantes externos siguen apostando por un resurgimiento que se antoja imposible, empezando por las claras fracturas al interior del desvencijado PRI.

El viernes pasado tuvo lugar una comida en el rancho San Julián de don José Yunes Suárez, padre del ex candidato al gobierno de Veracruz, Pepe Yunes Zorrilla, quien a su vez fungió como anfitrión del ex abanderado presidencial José Antonio Meade, su amigo cercano.

El evento estuvo nutrido, pero las señales son dignas de análisis y por fuerza retratan el momento que vive el PRI desde Veracruz, un estado, que antes fue estratégico y considerado gran bastión de votos.

Ausentes, el diputado federal del PRI, ex senador y ex candidato al gobierno de Veracruz, Héctor Yunes Landa, nada podría justificar no haber acudido a saludar a Pepe Meade, salvo porque no haya sido requerido o haya decidido no asistir, en cualquiera de los dos casos es inevitable notar un alejamiento.

También llamó la atención la ausencia del actual presidente estatal del PRI, Marlon Ramírez, quien de igual forma tendría que haber estado presente, sí es que estuviera en el ánimo de los “Pepes”, pareciera que no es así.

Invitado especial y muy apapachado, nada menos que el hijo del ex gobernador Fidel Herrera Beltrán, el ex diputado Javier Herrera Borunda a quienes muchos ven como fuerte aspirante por el PVEM y otros partidos al próximo gobierno de Veracruz.

Llama la atención también la ausencia de conocidas legisladoras locales y federales del PRI y PVEM.

En síntesis, la lista de invitados al rancho San Julián estuvo bien planeada y diseñada, pareciera, que fueron convocados como se dice popularmente “puros cuadernos, nada de hojas sueltas”.

Ágora

Pisaron callos. Resulta que el subsecretario de Finanzas que recientemente renunció a su cargo en Sefiplan de Veracruz, fue recomendación expresa del poderoso secretario de Hacienda, Carlos Urzúa.

Al parecer, Pavel Pazos Rincón estorbó y no se apegó a las directrices de un pariente consentido que se ha convertido en el verdadero jefe de finanzas, muy por encima del propio titular de dicha dependencia.

@monicamarena