/ martes 20 de abril de 2021

Disputa Morena - Yunes

En realidad el exgobernador Miguel Ángel Yunes Linares genera temor al gobierno, tanto, como la pretensión de retirarlo de la política, y con él a sus hijos, y más a uno de los ellos, a Miguel Ángel, quien él quiere enfilar nuevamente para la gubernatura de Veracruz.

No se encuentra otra razón para desempolvar una indagatoria por presumibles irregularidades en el ISSSTE, de la que fue director en tiempos del presidente Felipe Calderón Hinojosa, hace once años, denuncia que presentó la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) el año pasado, en tiempo para la no prescripción del delito, en caso de que pueda probarse. De encontrarse algún elemento, por mínimo que sea, probablemente puedan fincarle alguna responsabilidad penal, y al final, como ha sucedido en otros casos, surja una negociación para que se olvide de la política en Veracruz, y de ese desafío de “la lucha continúa”, cuando perdió la la elección que, a través de su primogénito, lo mantendría seis años más en Palacio de Gobierno. ¿Es una acción política? Pocos lo dudarían. Yunes lo sabe, él mismo ha empleado en el pasado esos mismos métodos para disuadir a sus adversarios, aunque en su caso, político curtido en las adversidades, seguramente va a resistir los embates, a sabiendas de que de sus decisiones depende no sólo su sobrevivencia política, también la de su prole y de su grupo. La idea de Morena es ganar la presidencia municipal de Veracruz, municipio de vital importancia política y económica, y su tradición liberal, incluso dejándole que sigan gobernando en Boca del Río. Es cuestión estratégica, pues si el partido en el poder deja en libertad al jefe del clan, difícilmente van a retener la gubernatura, y ese escenario no podría admitirse en el propio Palacio Nacional. ¿Van a proceder contra el choleño? Cada quien va a mover las piezas que les convenga, aunque en los tiempos actuales Yunes no es el dueño del juego, y si se obstina, no sólo podría perder políticamente.

Aún queda un mes, plazo en que se definirá lo que vaya a pasar, y en el caso de sus adversarios, probablemente la “encuesta” favorezca al empresario Ricardo Exsome Zapata, o a Antonino “Nino” Baxzi Mata, con mayor posicionamiento que el diputado federal con licencia, y de esa manera no se encontraría obstáculo para ganar la plaza porteña con la movilización de las huestes morenistas, que tienen fortaleza, del PVEM que cuenta con una firme estructura y con el PT, que cuenta con algunos seguidores en dicho municipio. Cuestión de tiempo.

En Medellín, otro de los municipios clave en la zona conurbada más importante del estado, el PAN con sus aliados del PRI y PRD, encabeza las preferencias para la alcaldía de ese lugar con Gabriel Cárdenas Guízar, exdiputado federal por elección directa en Cosamaloapan, y quien hasta hace poco fuera jefe de gabinete de ese Ayuntamiento con Leopoldo Deschamps Barros, el alcalde saliente que jugará, a su vez, como candidato a diputado local. Cárdenas tiene buena imagen, y su mayor adversario es Marcos Isleño, del PVEM-Morena-PT, quien trae lo suyo y podría repuntar, aunque también arrastra acusaciones de violencia intrafamiliar. Ya se ha comentado en este mismo espacio que Medellín es una demarcación que tiene pujanza y desarrollo, como pocos en el estado de Veracruz.

opedro2006@gmail.com

En realidad el exgobernador Miguel Ángel Yunes Linares genera temor al gobierno, tanto, como la pretensión de retirarlo de la política, y con él a sus hijos, y más a uno de los ellos, a Miguel Ángel, quien él quiere enfilar nuevamente para la gubernatura de Veracruz.

No se encuentra otra razón para desempolvar una indagatoria por presumibles irregularidades en el ISSSTE, de la que fue director en tiempos del presidente Felipe Calderón Hinojosa, hace once años, denuncia que presentó la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) el año pasado, en tiempo para la no prescripción del delito, en caso de que pueda probarse. De encontrarse algún elemento, por mínimo que sea, probablemente puedan fincarle alguna responsabilidad penal, y al final, como ha sucedido en otros casos, surja una negociación para que se olvide de la política en Veracruz, y de ese desafío de “la lucha continúa”, cuando perdió la la elección que, a través de su primogénito, lo mantendría seis años más en Palacio de Gobierno. ¿Es una acción política? Pocos lo dudarían. Yunes lo sabe, él mismo ha empleado en el pasado esos mismos métodos para disuadir a sus adversarios, aunque en su caso, político curtido en las adversidades, seguramente va a resistir los embates, a sabiendas de que de sus decisiones depende no sólo su sobrevivencia política, también la de su prole y de su grupo. La idea de Morena es ganar la presidencia municipal de Veracruz, municipio de vital importancia política y económica, y su tradición liberal, incluso dejándole que sigan gobernando en Boca del Río. Es cuestión estratégica, pues si el partido en el poder deja en libertad al jefe del clan, difícilmente van a retener la gubernatura, y ese escenario no podría admitirse en el propio Palacio Nacional. ¿Van a proceder contra el choleño? Cada quien va a mover las piezas que les convenga, aunque en los tiempos actuales Yunes no es el dueño del juego, y si se obstina, no sólo podría perder políticamente.

Aún queda un mes, plazo en que se definirá lo que vaya a pasar, y en el caso de sus adversarios, probablemente la “encuesta” favorezca al empresario Ricardo Exsome Zapata, o a Antonino “Nino” Baxzi Mata, con mayor posicionamiento que el diputado federal con licencia, y de esa manera no se encontraría obstáculo para ganar la plaza porteña con la movilización de las huestes morenistas, que tienen fortaleza, del PVEM que cuenta con una firme estructura y con el PT, que cuenta con algunos seguidores en dicho municipio. Cuestión de tiempo.

En Medellín, otro de los municipios clave en la zona conurbada más importante del estado, el PAN con sus aliados del PRI y PRD, encabeza las preferencias para la alcaldía de ese lugar con Gabriel Cárdenas Guízar, exdiputado federal por elección directa en Cosamaloapan, y quien hasta hace poco fuera jefe de gabinete de ese Ayuntamiento con Leopoldo Deschamps Barros, el alcalde saliente que jugará, a su vez, como candidato a diputado local. Cárdenas tiene buena imagen, y su mayor adversario es Marcos Isleño, del PVEM-Morena-PT, quien trae lo suyo y podría repuntar, aunque también arrastra acusaciones de violencia intrafamiliar. Ya se ha comentado en este mismo espacio que Medellín es una demarcación que tiene pujanza y desarrollo, como pocos en el estado de Veracruz.

opedro2006@gmail.com