/ lunes 19 de noviembre de 2018

El fuego no se apaga con el fuego

Es evidente que entre las opiniones vertidas sobre el Plan Nacional de Paz y Seguridad, planteado por el presidente electo, se tocan intereses contrarios; de ahí la presencia de aquellos que pretenden confundir al pueblo, haciéndole creer que las fuerzas militares, Ejército y Marina, asumirán las funciones de la policía.

Con el Plan Nacional de Paz y la Seguridad que se implementará en el próximo gobierno, el presidente electo de la República y el secretario de Seguridad Pública darán soporte civil a la actividad policial, soporte que actualmente no existe en el país, lo que ha ocasionado que de manera indebida se eche mano del Ejército y la Marina.

El camino hacia la paz y la seguridad se logrará a través de diversos mecanismos, entre ellos la creación de una Guardia Nacional, fortalecida a partir de elementos de las policías, Militar, Naval y la propia Policía Federal, bajo un mando civil (el presidente de la República y el secretario de Seguridad Pública), estableciendo metas a mediano y largo plazo.

Una tarea prioritaria será erradicar la corrupción y rehabilitar la procuración de justicia, generar fuentes de empleo, dar educación a todos los jóvenes, invertir en salud, desarrollo económico, y de ese modo atacar las causas que generan la delincuencia.

Se empezará por reforzar en 150 de las regiones del país con la policía de la Guardia Nacional, lo anterior aunado a la estrategia fundamental del Gobierno de la Democracia, ir al fondo de los programas integrales, de la problemática social, como se planteó de inicio, atacar las causas para eliminar los efectos, porque “el fuego no se apaga con el fuego”.

En este contexto y siguiendo la línea de la Democracia Participativa, los días 24 y 25 de noviembre se consultará a los mexicanos sobre si están de acuerdo con la construcción de dos trenes: el Maya y del Istmo de Tehuantepec, la creación de la refinería Dos Bocas en Tabasco y la aplicación de siete programas prioritarios que el nuevo gobierno plantea para los próximos años (es decir, si están de acuerdo con la reforestación de selvas, bosques y plantación de árboles frutales; aumentar la pensión a adultos mayores de 68 años, el programa Jóvenes Construyendo Futuro, becas para estudiantes, pensión para personas con discapacidad, garantizar atención médica a la población que no cuenta con seguridad social, y acceso a internet), en Veracruz existirán 118 puntos donde los ciudadanos podrán opinar.

Transformaremos el país con la ayuda de todos los mexicanos, apoyados en el gobierno federal y estatal. “El método será atacar las causas y los efectos de manera inteligente, de manera civil”.


Es evidente que entre las opiniones vertidas sobre el Plan Nacional de Paz y Seguridad, planteado por el presidente electo, se tocan intereses contrarios; de ahí la presencia de aquellos que pretenden confundir al pueblo, haciéndole creer que las fuerzas militares, Ejército y Marina, asumirán las funciones de la policía.

Con el Plan Nacional de Paz y la Seguridad que se implementará en el próximo gobierno, el presidente electo de la República y el secretario de Seguridad Pública darán soporte civil a la actividad policial, soporte que actualmente no existe en el país, lo que ha ocasionado que de manera indebida se eche mano del Ejército y la Marina.

El camino hacia la paz y la seguridad se logrará a través de diversos mecanismos, entre ellos la creación de una Guardia Nacional, fortalecida a partir de elementos de las policías, Militar, Naval y la propia Policía Federal, bajo un mando civil (el presidente de la República y el secretario de Seguridad Pública), estableciendo metas a mediano y largo plazo.

Una tarea prioritaria será erradicar la corrupción y rehabilitar la procuración de justicia, generar fuentes de empleo, dar educación a todos los jóvenes, invertir en salud, desarrollo económico, y de ese modo atacar las causas que generan la delincuencia.

Se empezará por reforzar en 150 de las regiones del país con la policía de la Guardia Nacional, lo anterior aunado a la estrategia fundamental del Gobierno de la Democracia, ir al fondo de los programas integrales, de la problemática social, como se planteó de inicio, atacar las causas para eliminar los efectos, porque “el fuego no se apaga con el fuego”.

En este contexto y siguiendo la línea de la Democracia Participativa, los días 24 y 25 de noviembre se consultará a los mexicanos sobre si están de acuerdo con la construcción de dos trenes: el Maya y del Istmo de Tehuantepec, la creación de la refinería Dos Bocas en Tabasco y la aplicación de siete programas prioritarios que el nuevo gobierno plantea para los próximos años (es decir, si están de acuerdo con la reforestación de selvas, bosques y plantación de árboles frutales; aumentar la pensión a adultos mayores de 68 años, el programa Jóvenes Construyendo Futuro, becas para estudiantes, pensión para personas con discapacidad, garantizar atención médica a la población que no cuenta con seguridad social, y acceso a internet), en Veracruz existirán 118 puntos donde los ciudadanos podrán opinar.

Transformaremos el país con la ayuda de todos los mexicanos, apoyados en el gobierno federal y estatal. “El método será atacar las causas y los efectos de manera inteligente, de manera civil”.


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