/ jueves 5 de diciembre de 2019

El plan de Romo para cuidar a Cuitláhuac García

Hace algunos meses adelanté en este mismo espacio que uno de los planes para Veracruz, ordenado por Alfonso Romo desde Palacio Nacional, era buscar cobijar al gobernador Cuitláhuac García después de su primer año de labores.

Esta protección consistía en colocar (poco a poco) personas afines en el Órgano de Fiscalización Superior, en la Fiscalía veracruzana y en el Poder Judicial del Estado, además de conservar la Junta de Coordinación Política del Congreso local. Doce meses después, (sugerido y operado desde el centro del país), el plan se concretó.

Derivado del desgaste que sufrió la imagen del presidente López Obrador en Veracruz por los errores de Cuitláhuac García, particularmente en los primeros ocho meses de su mandato, los estrategas de Alfonso Romo se apuraron a llevar las riendas del estado desde Palacio Nacional.

“Mientras el presidente decide si después del segundo año releva a Cuitláhuac (sic) como Gobernador, nosotros teníamos que contener el daño que en Veracruz sufre la imagen de AMLO, pues el desencanto de la gente con su mandatario se lo pasa a traer, poco a poco”, me dijeron.

“Remover a Cuitláhuac García después de sus dos primeros años de gobierno sigue vigente, sin embargo, tal como te lo adelantamos, el Presidente propuso intentar ayudarlo por todas las vías posibles para evitar dicho relevo, pues lo considera leal a su proyecto, además de estimar a su padre, Atanasio García”, me sostuvieron vía telefónica.

De acuerdo con estas fuentes, el plan para evitar que AMLO continúe “regalándole” prestigio al gobernador de Veracruz ha funcionado. Si bien es cierto los errores continúan (y el presidente permanece siendo el soporte de la poca o mucha confianza ciudadana en Cuitláhuac García), lo cierto es que la estrategia “para proteger a López Obrador en el estado” ha rendido frutos.

En resumen, la primera parte del plan ya fue ejecutada: darle al gobernador el apoyo de las Fiscalías (General y Anticorrupción), del Orfis y del Poder Judicial, así como conservar la Jucopo y la Mesa Directiva en el Congreso.

“¿Y cuál es la segunda parte?”, cuestioné.

“Relevar a los secretarios de Despacho que estén afectando directamente al gobernador, o a cualquiera que se sienta por encima de él”, me afirmaron. “AMLO intenta salvarlo antes de los dos años, para no tomar medidas”.

alejandroaguirre77@gmail.com

Hace algunos meses adelanté en este mismo espacio que uno de los planes para Veracruz, ordenado por Alfonso Romo desde Palacio Nacional, era buscar cobijar al gobernador Cuitláhuac García después de su primer año de labores.

Esta protección consistía en colocar (poco a poco) personas afines en el Órgano de Fiscalización Superior, en la Fiscalía veracruzana y en el Poder Judicial del Estado, además de conservar la Junta de Coordinación Política del Congreso local. Doce meses después, (sugerido y operado desde el centro del país), el plan se concretó.

Derivado del desgaste que sufrió la imagen del presidente López Obrador en Veracruz por los errores de Cuitláhuac García, particularmente en los primeros ocho meses de su mandato, los estrategas de Alfonso Romo se apuraron a llevar las riendas del estado desde Palacio Nacional.

“Mientras el presidente decide si después del segundo año releva a Cuitláhuac (sic) como Gobernador, nosotros teníamos que contener el daño que en Veracruz sufre la imagen de AMLO, pues el desencanto de la gente con su mandatario se lo pasa a traer, poco a poco”, me dijeron.

“Remover a Cuitláhuac García después de sus dos primeros años de gobierno sigue vigente, sin embargo, tal como te lo adelantamos, el Presidente propuso intentar ayudarlo por todas las vías posibles para evitar dicho relevo, pues lo considera leal a su proyecto, además de estimar a su padre, Atanasio García”, me sostuvieron vía telefónica.

De acuerdo con estas fuentes, el plan para evitar que AMLO continúe “regalándole” prestigio al gobernador de Veracruz ha funcionado. Si bien es cierto los errores continúan (y el presidente permanece siendo el soporte de la poca o mucha confianza ciudadana en Cuitláhuac García), lo cierto es que la estrategia “para proteger a López Obrador en el estado” ha rendido frutos.

En resumen, la primera parte del plan ya fue ejecutada: darle al gobernador el apoyo de las Fiscalías (General y Anticorrupción), del Orfis y del Poder Judicial, así como conservar la Jucopo y la Mesa Directiva en el Congreso.

“¿Y cuál es la segunda parte?”, cuestioné.

“Relevar a los secretarios de Despacho que estén afectando directamente al gobernador, o a cualquiera que se sienta por encima de él”, me afirmaron. “AMLO intenta salvarlo antes de los dos años, para no tomar medidas”.

alejandroaguirre77@gmail.com