La semana pasada Morena presentó una iniciativa de ley para que las personas nacidas fuera del estado de Veracruz puedan ser consideradas ciudadanas de esta entidad y, por ende, aspirar a cargos de elección popular.
Esta modificación a la Constitución local fue aprobada de forma virtual en menos de 24 horas y con ello abrir la posibilidad que las personas no nacidas en territorio veracruzano puedan aspirar y ser elegidas como gobernador.
Sin importar que hay más de 50 iniciativas de ley pendientes de discusión y posterior a su aprobación, la premura de los diputados, de mayoría Morena y aliados, fue acatar la instrucción de quienes dirigen el partido y el gobierno de sacar una reforma con dedicatoria personal, sin respetar los procedimientos legislativos y sobresaliendo los intereses personales.
Por si ello no fuera suficiente ya hay 117 actas de cabildo de municipios gobernados por Morena que ya sesionaron y votaron a favor de la reforma al artículo 11 de la Constitución local, mejor conocida como la “Ley Nahle”, que solo corrobora la ambición y el abuso del poder que ejerce Morena, así como el menosprecio que tienen por los veracruzanos al quitarles el derecho y desestimar sus capacidades.
Tal parece que ahora todo el país y sus Congresos locales, en este caso Veracruz, ya emiten leyes a la carta, a contentillo, confeccionan un traje a la medida a particulares: “Lo que usted diga y mande señor!, olvidando que las leyes no están para favorecer los caprichos políticos, las leyes se hicieron para favorecer a los ciudadanos.
Morena asiduamente viola la Constitución, primero fue la “Ley Bonilla”, que falsamente reformaba el régimen interno del estado de Baja California, donde alteraron los resultados de un proceso electoral concluido, que violaba el voto público y la soberanía popular, y ahora viene la “Ley Nahle”, que hace a un lado los derechos políticos de todos los veracruzanos con una ley privativa para beneficiar a una persona.
Este asalto a la Constitución es un gran retroceso para la entidad, es regresar a esos tiempos que tanto ha criticado la mal llamada “Cuarta Transformación”, aunque quieran convencer esta vez a los veracruzanos de ser “progresistas”.
Esta ley es un agravio y un insulto para los veracruzanos de nacimiento e identidad, todo por cumplir con favores políticos, y no es en contra de una mujer, mi respeto para todas ellas, es el abuso y la ofensa de una premisa que ha aplicado Morena desde el día uno que empezó a gobernar, “de qué sirve el poder si no se abusa de él”.
Lo realizado la semana pasada fue una completa cobardía de un grupo de diputados locales cuya prioridad fue obedecer y servir a sus jefes y no a los veracruzanos que creyeron y votaron por ellos, pero los ciudadanos les demostraremos que ¡Veracruz es de los veracruzanos!
(*) Coordinador de los senadores del PAN
