Para los malquerientes del PRI, este partido es como un muerto viviente que en cualquier momento dejará de caminar, sin embargo, la larga lista de aspirantes a dirigirlo y los jaloneos que se están dando entre los grupos que quieren el control lo hacen ver como si fuera un instituto que pasa por su mejor momento. Claro que esta percepción puede resultar engañosa.
Pues resultado de esas presiones han surgido voces discordantes que se quejan y prefieren apartarse del proceso de renovación de la dirigencia estatal.
Ayer, uno de los aspirantes a la presidencia del CDE, Antonio Benítez Lucho, dio a conocer en sus redes sociales que se retira de la contienda interna bajo el argumento de que se trata de una farsa perversa.
En un documento que publicó y dirigió “A quien deba enterarse”, Benítez señala que ha tomado la decisión de no participar porque “no existen garantías que permitan dar certidumbre al proceso por no cumplirse muchos de los principios fundamentales de una elección…”.
Entre sus argumentos expone que persiste un secuestro del PRI “por un grupo de personas aviesas” y también que el padrón de militantes no está vigente pues “los registros más actualizados son del 2014”.
Otro que también está inconforme es Raúl Díaz Diez, quien asegura que no habrá condiciones de igualdad dentro del proceso para la renovación de la dirigencia estatal si Julio Cerecedo y Zeferino Tejeda continúan dentro de la organización.
Para él, no hay piso parejo, pues los dados están cargados a favor de uno de los 13 aspirantes que hasta ahora han alzado la mano con el interés de contender por la dirigencia del partido.
Arranca el registro de los aspirantes y, como ya se retiró uno, hasta ahora quedan 12. Decía que puede resultar engañosa la percepción de que es un instituto que pasa por su mejor momento, porque detrás del control político que quieren los grupos está el manejo de las prerrogativas.
¿Subgabinetes federales especializados, gobierno paralelo al estatal?
Hace unos días el delegado del gobierno federal,Manuel Huerta, detalló algo de lo que serán los subgabinetes especializados que trabajarán de la mano con los 32 estados del país.
Según él, este esquema permitirá obtener mayores recursos y beneficios para los ciudadanos a través de las secretarías de Seguridad Pública, Comunicaciones, Economía y Bienestar.
Además funcionarán con cuatro coordinadores que están por definirse y que serán los responsables de la forma de operar de laFederación en cada uno de los estados.
Precisó que dichas estructuras velarán por el óptimo desarrollo de cada uno de los programas que se lleven a cabo, además de que darán el apoyo económico y administrativo para que haya un ahorro económico.
Se supone que los nuevos funcionarios le rendirían cuentas al coordinador estatal de losProgramas de Desarrollo, es decir, a Huerta Ladrón de Guevara, lo que vendría a fortalecer a este funcionario de quien se ha comentado hace las veces de representante del presidente de la República.
De acuerdo con lo informado, serán siete nuevos nombramientos de los que se formarán los subgabinetes especializados que tendrán representación en los 32 estados del país.
Veracruz no escapa a esta nueva superestructura, lo que ya algunos grupos de Morena que no simpatizan con el también llamado superdelegado ven como un riesgo por el mayor manejo político y económico que tendrá, lo que daría pie a que se convirtiera en un gobierno paralelo al estatal.
Obviamente los inconformes están viendo el futuro político que tiene que ver con la gubernatura de Veracruz.
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