/ miércoles 28 de julio de 2021

Evitar la fatalidad

Por si había alguna duda de la grave situación de emergencia que nuevamente vive el país, y en especial Veracruz, por contagios de Covid-19...

Las autoridades de Salud del estado se vieron obligadas a reabrir los Centros de Atención Médica Expandida (CAME-19) del Velódromo de Xalapa (que ya está ocupado en un 77%) y el Centro de Raqueta de Boca del Río, que comienza a llenarse, debido al repunte de miles de casos en la entidad. Aunque la incidencia de muertos ha disminuido, no puede desestimarse el reporte de la Red de Infección Respiratoria Aguda Grave (IRAG) de este lunes, más cuando los Hospitales del IMSS de ciudades importantes como Lerdo de Tejada, Martínez de la Torre, el Hospital General de Boca del Río y la Unidad de Medicina de Alta Especialidad del IMSS del puerto de Veracruz, se encuentran al 100% de su capacidad; el Hospital de Orizaba está al 93%, el Hospital del IMSS 71 de Veracruz al 91%, el 24 de Poza Rica al 90%, el Hospital General de Alta Especialidad del puerto al 89%, el Centro de Especialidad “Dr. Rafael Lucio” de Xalapa, al 82%, el Hospital General de Minatitlán de PEMEX al 69%, el Hospital General de Zona de Córdoba al 71%, el Hospital General de Coatzacoalcos al 61% y el Hospital del IMSS de Cosamaloapan al 50%, es decir, no hay más camas o se tienen pocas para recibir a enfermos en esos centros hospitalarios del sector público, y en algunos casos estarían faltando respiradores para pacientes en avanzado estado de gravedad que lo requieren. Otro dato relevante es que al día de ayer el estado de Veracruz acumulaba más de 76 mil casos de personas con el virus y casi 10 mil 500 fallecimientos. A pesar de la información que difunden todos los días los medios de comunicación, no está tomándose con seriedad esta situación, aunque muchas personas que salen a la calle para realizar sus compras de alimentos o a sus trabajos, sí utilizan las mascarillas, muchas otras no lo hacen, y los antros siguen funcionando de manera normal en la mayoría de los municipios, con excepción de Xalapa, donde las autoridades municipales sí han procedido a aplicar medidas restrictivas. En Veracruz y Boca del Río, por ejemplo, nada impide que los fines de semana sigan abiertos los antros, en la zona de Los Portales e Independencia desde el viernes por la tarde hay cientos de personas “conviviendo” y los juegos de beisbol en el estadio “Beto” Ávila siguen recibiendo a miles de aficionados, aunque ahí sí se tiene mucha vigilancia para que las personas usen los cubrebocas. En fin, esos decretos que ha expedido el gobierno del estado no van a servir de mucho si no se vigila su cumplimiento y si los gobiernos municipales no se aplican en dictar medidas de contención para evitar que se llegue al extremo, incluso, de impedir que las personas circulen por las calles o haya cierre de establecimientos. El riesgo es mayúsculo, y no debe esperarse que haya una pérdida de un ser querido para que las personas tomen conciencia de la necesidad de ser responsables, por protección personal, familiar, pero sobre todo, social. Esperemos que esa fatalidad no alcance a quienes no quieren entender que nos encontramos ante una grave emergencia sanitaria.

opedro2006@gmail.com

Por si había alguna duda de la grave situación de emergencia que nuevamente vive el país, y en especial Veracruz, por contagios de Covid-19...

Las autoridades de Salud del estado se vieron obligadas a reabrir los Centros de Atención Médica Expandida (CAME-19) del Velódromo de Xalapa (que ya está ocupado en un 77%) y el Centro de Raqueta de Boca del Río, que comienza a llenarse, debido al repunte de miles de casos en la entidad. Aunque la incidencia de muertos ha disminuido, no puede desestimarse el reporte de la Red de Infección Respiratoria Aguda Grave (IRAG) de este lunes, más cuando los Hospitales del IMSS de ciudades importantes como Lerdo de Tejada, Martínez de la Torre, el Hospital General de Boca del Río y la Unidad de Medicina de Alta Especialidad del IMSS del puerto de Veracruz, se encuentran al 100% de su capacidad; el Hospital de Orizaba está al 93%, el Hospital del IMSS 71 de Veracruz al 91%, el 24 de Poza Rica al 90%, el Hospital General de Alta Especialidad del puerto al 89%, el Centro de Especialidad “Dr. Rafael Lucio” de Xalapa, al 82%, el Hospital General de Minatitlán de PEMEX al 69%, el Hospital General de Zona de Córdoba al 71%, el Hospital General de Coatzacoalcos al 61% y el Hospital del IMSS de Cosamaloapan al 50%, es decir, no hay más camas o se tienen pocas para recibir a enfermos en esos centros hospitalarios del sector público, y en algunos casos estarían faltando respiradores para pacientes en avanzado estado de gravedad que lo requieren. Otro dato relevante es que al día de ayer el estado de Veracruz acumulaba más de 76 mil casos de personas con el virus y casi 10 mil 500 fallecimientos. A pesar de la información que difunden todos los días los medios de comunicación, no está tomándose con seriedad esta situación, aunque muchas personas que salen a la calle para realizar sus compras de alimentos o a sus trabajos, sí utilizan las mascarillas, muchas otras no lo hacen, y los antros siguen funcionando de manera normal en la mayoría de los municipios, con excepción de Xalapa, donde las autoridades municipales sí han procedido a aplicar medidas restrictivas. En Veracruz y Boca del Río, por ejemplo, nada impide que los fines de semana sigan abiertos los antros, en la zona de Los Portales e Independencia desde el viernes por la tarde hay cientos de personas “conviviendo” y los juegos de beisbol en el estadio “Beto” Ávila siguen recibiendo a miles de aficionados, aunque ahí sí se tiene mucha vigilancia para que las personas usen los cubrebocas. En fin, esos decretos que ha expedido el gobierno del estado no van a servir de mucho si no se vigila su cumplimiento y si los gobiernos municipales no se aplican en dictar medidas de contención para evitar que se llegue al extremo, incluso, de impedir que las personas circulen por las calles o haya cierre de establecimientos. El riesgo es mayúsculo, y no debe esperarse que haya una pérdida de un ser querido para que las personas tomen conciencia de la necesidad de ser responsables, por protección personal, familiar, pero sobre todo, social. Esperemos que esa fatalidad no alcance a quienes no quieren entender que nos encontramos ante una grave emergencia sanitaria.

opedro2006@gmail.com