/ lunes 20 de enero de 2020

Fallan los operadores

Hace un año, en enero de 2019, centenares de pobladores "enchileanchados" de Chinameca retuvieron al gobernador Cuitláhuac García.

Y lo hicieron hasta que lo obligaron a comprometerse públicamente a que no se construiría ahí el relleno sanitario que sustituiría el tiradero a cielo abierto de Las Matas, en Minatitlán, un millonario proyecto que estaba por ejecutar la empresa Gravas de Sureste, propiedad de la familia Quintanilla Hayek, ligada a la senadora de Morena con licencia, Rocío Nahle García, actual secretaria de Energía.

En aquella ocasión, como se recordará, el secretario de Gobierno, Éric Cisneros, quien a través de videos difundidos en las redes sociales daba por hecho esta relevante obra, tuvo que salir por piernas y treparse en la batea de una camioneta Pick-up.

Obviamente le llovieron críticas porque como operador político falló y expuso inclusive la integridad física de su jefe.

Y es que Cisneros Burgos, desarraigado de Veracruz desde su infancia, parecía desconocer la bravura que caracteriza a los indígenas nahuas y popolucas de la sierra de Soteapan.

Este domingo el gobernador volvió a enfrentar una situación similar pero en Soledad Atzompa, en la sierra de Zongolica, donde fue retenido por los embravecidos lugareños hasta que nueve horas después tuvo que asumir el compromiso formal de realizar las obras públicas que le estaban reclamando.

Nuevamente le fallaron sus operadores políticos, quienes parecen haber ignorado que los nahuas de Soledad Atzompa son tan bravos como los de Chinameca.

¿Nadie previó ni percibió el grado de malestar de los pobladores? ¿Acaso no recuerdan lo ocurrido hace casi un año también, en febrero de 2019, cuando en ese municipio de la sierra de Zongolica fueron linchados y asesinados seis presuntos delincuentes luego de un enfrentamiento que además dejó un policía herido y tres vehículos quemados?

Los sucesos iniciaron en la comunidad El Colorín, cuando los delincuentes intentaron levantar a maestros que iban de regreso a sus domicilios en el municipio vecino de Acultzingo. Policías comunitarios detectaron la situación y los enfrentaron, desatándose una persecución y balacera.

Tras recibir un reporte al 911, policías estatales se trasladaron a Soledad Atzompa, donde cuatro de los presuntos delincuentes ya habían sido retenidos y llevados a la cabecera municipal. Pero los policías comunitarios no lograron contener a la muchedumbre, que se apoderó de los detenidos para lincharlos. Los elementos de Fuerza Civil no pudieron acercarse. Los presuntos delincuentes fueron quemados y dos de ellos tenían un disparo en la cabeza; además, tres vehículos fueron incendiados, según informó la Secretaría de Seguridad Pública (SSP).

Más tarde, los dos hombres que habían logrado escapar fueron hallados y retenidos en la comunidad de Ahuaxkuautla, donde también murieron linchados.

Al menos esta historia debió recordarla el titular de la SSP, Hugo Gutiérrez Maldonado, quien este domingo acompañaba también al gobernador en Soledad Atzompa.

Hace un año, en enero de 2019, centenares de pobladores "enchileanchados" de Chinameca retuvieron al gobernador Cuitláhuac García.

Y lo hicieron hasta que lo obligaron a comprometerse públicamente a que no se construiría ahí el relleno sanitario que sustituiría el tiradero a cielo abierto de Las Matas, en Minatitlán, un millonario proyecto que estaba por ejecutar la empresa Gravas de Sureste, propiedad de la familia Quintanilla Hayek, ligada a la senadora de Morena con licencia, Rocío Nahle García, actual secretaria de Energía.

En aquella ocasión, como se recordará, el secretario de Gobierno, Éric Cisneros, quien a través de videos difundidos en las redes sociales daba por hecho esta relevante obra, tuvo que salir por piernas y treparse en la batea de una camioneta Pick-up.

Obviamente le llovieron críticas porque como operador político falló y expuso inclusive la integridad física de su jefe.

Y es que Cisneros Burgos, desarraigado de Veracruz desde su infancia, parecía desconocer la bravura que caracteriza a los indígenas nahuas y popolucas de la sierra de Soteapan.

Este domingo el gobernador volvió a enfrentar una situación similar pero en Soledad Atzompa, en la sierra de Zongolica, donde fue retenido por los embravecidos lugareños hasta que nueve horas después tuvo que asumir el compromiso formal de realizar las obras públicas que le estaban reclamando.

Nuevamente le fallaron sus operadores políticos, quienes parecen haber ignorado que los nahuas de Soledad Atzompa son tan bravos como los de Chinameca.

¿Nadie previó ni percibió el grado de malestar de los pobladores? ¿Acaso no recuerdan lo ocurrido hace casi un año también, en febrero de 2019, cuando en ese municipio de la sierra de Zongolica fueron linchados y asesinados seis presuntos delincuentes luego de un enfrentamiento que además dejó un policía herido y tres vehículos quemados?

Los sucesos iniciaron en la comunidad El Colorín, cuando los delincuentes intentaron levantar a maestros que iban de regreso a sus domicilios en el municipio vecino de Acultzingo. Policías comunitarios detectaron la situación y los enfrentaron, desatándose una persecución y balacera.

Tras recibir un reporte al 911, policías estatales se trasladaron a Soledad Atzompa, donde cuatro de los presuntos delincuentes ya habían sido retenidos y llevados a la cabecera municipal. Pero los policías comunitarios no lograron contener a la muchedumbre, que se apoderó de los detenidos para lincharlos. Los elementos de Fuerza Civil no pudieron acercarse. Los presuntos delincuentes fueron quemados y dos de ellos tenían un disparo en la cabeza; además, tres vehículos fueron incendiados, según informó la Secretaría de Seguridad Pública (SSP).

Más tarde, los dos hombres que habían logrado escapar fueron hallados y retenidos en la comunidad de Ahuaxkuautla, donde también murieron linchados.

Al menos esta historia debió recordarla el titular de la SSP, Hugo Gutiérrez Maldonado, quien este domingo acompañaba también al gobernador en Soledad Atzompa.

ÚLTIMASCOLUMNAS