/ sábado 14 de septiembre de 2019

Falta amor a la Patria, las nuevas generaciones tienen la palabra.

Uno de los Símbolos Patrios, menos conocido es el de la “alegoría a la Patria Mexicana” y es que otros símbolos nacionales tales como: la bandera, el escudo nacional, la Virgen de Guadalupe han opacado la imagen que surge apenas iniciada la Guerra de Independencia, imagen alusiva a un impreso que en 1808, el rey Fernando VII, recibió de sus coterráneos. La Vieja y la Nueva España representadas por dos mujeres que defienden la corona de Fernando VII, dos años antes de la convocatoria del padre Miguel Hidalgo para lograr la Independencia de nuestro país.

Once años después de la proclama o Grito de Dolores, en 1821 Agustín de Iturbide autodenominado Emperador de México, se expresaba en abierta propaganda al Ejército de las Tres Garantías, como el principal defensor de los emblemas y de la resurrección de la nación mexicana. Al pie de la alegoría de la patria, Agustín de Iturbide mandó grabar lo siguiente: “Qual cadáver la America yacía inmóvil y sin vida se notaba, ni arco ni flechas ni carcax tenía Una dura Cadena la enlazaba. Su águila hermosa parece que dormía y ninguna esperanza le quedaba: más Iturbide le extendió su mano y revivió el Imperio Mexicano”.

El Símbolo Patrio mayormente conocido es la bandera tricolor con el águila sobre un nopal en el centro, devorando una serpiente; sin embargo se registran 14 emblemas que a lo largo de la historia de nuestro país, han sido enarboladas por quienes encabezaron las luchas para dar a los mexicanos Independencia y libertad; desde aquel legendario estandarte guadalupano que usó el cura Miguel Hidalgo y Costilla, pasando por una recreación de banderas, que incluyen el estandarte doliente de Hidalgo, el de las tropas independentistas de José Maria Morelos y Pavón. Por solo mencionar los tres primeros símbolos patrios.

En casi todas aparece el águila con las alas extendidas, salvo en la actual bandera en donde el águila aparece de perfil con el ala izquierda levantada, que los mexicanos de todas las edades identifican y que debería constituir la solidaridad social obligada ““entre los individuos, como entre las naciones””, imperando el respeto a que aludía el Benemérito Benito Juárez García. En 1968, tras la represión y muerte de los miles de estudiantes, cuya responsabilidad se atribuyó al expresidente Gustavo Díaz Ordaz, él mismo emitió un decreto para que la actual bandera fuera la definitiva y a la fecha el mencionado decreto no ha sido revocado.

Uno de los Símbolos Patrios, menos conocido es el de la “alegoría a la Patria Mexicana” y es que otros símbolos nacionales tales como: la bandera, el escudo nacional, la Virgen de Guadalupe han opacado la imagen que surge apenas iniciada la Guerra de Independencia, imagen alusiva a un impreso que en 1808, el rey Fernando VII, recibió de sus coterráneos. La Vieja y la Nueva España representadas por dos mujeres que defienden la corona de Fernando VII, dos años antes de la convocatoria del padre Miguel Hidalgo para lograr la Independencia de nuestro país.

Once años después de la proclama o Grito de Dolores, en 1821 Agustín de Iturbide autodenominado Emperador de México, se expresaba en abierta propaganda al Ejército de las Tres Garantías, como el principal defensor de los emblemas y de la resurrección de la nación mexicana. Al pie de la alegoría de la patria, Agustín de Iturbide mandó grabar lo siguiente: “Qual cadáver la America yacía inmóvil y sin vida se notaba, ni arco ni flechas ni carcax tenía Una dura Cadena la enlazaba. Su águila hermosa parece que dormía y ninguna esperanza le quedaba: más Iturbide le extendió su mano y revivió el Imperio Mexicano”.

El Símbolo Patrio mayormente conocido es la bandera tricolor con el águila sobre un nopal en el centro, devorando una serpiente; sin embargo se registran 14 emblemas que a lo largo de la historia de nuestro país, han sido enarboladas por quienes encabezaron las luchas para dar a los mexicanos Independencia y libertad; desde aquel legendario estandarte guadalupano que usó el cura Miguel Hidalgo y Costilla, pasando por una recreación de banderas, que incluyen el estandarte doliente de Hidalgo, el de las tropas independentistas de José Maria Morelos y Pavón. Por solo mencionar los tres primeros símbolos patrios.

En casi todas aparece el águila con las alas extendidas, salvo en la actual bandera en donde el águila aparece de perfil con el ala izquierda levantada, que los mexicanos de todas las edades identifican y que debería constituir la solidaridad social obligada ““entre los individuos, como entre las naciones””, imperando el respeto a que aludía el Benemérito Benito Juárez García. En 1968, tras la represión y muerte de los miles de estudiantes, cuya responsabilidad se atribuyó al expresidente Gustavo Díaz Ordaz, él mismo emitió un decreto para que la actual bandera fuera la definitiva y a la fecha el mencionado decreto no ha sido revocado.