/ domingo 13 de mayo de 2018

Gasolina electoral

El miércoles pasado el subsecretario de Hacienda y Crédito Público, Miguel Messmacher Linartas, realizó declaraciones en torno a los precios de los combustibles, congruentes a los tiempos presentes, puntualizando que las gasolinas serán un reflejo del precio internacional del petróleo y del tipo de cambio.

Agregó que bajo estas premisas la gasolina puede subir o puede bajar; mencionando que una de las causas del incremento a los precios se deriva del conflicto suscitado entre Estados Unidos e Irán por el desistimiento del primero del acuerdo sobre armamento nuclear convenido con el segundo.

Manifestando que todavía hay margen de maniobra para contener el aumento, aplicando el proceso de transición de la liberación de los precios, mediante un mecanismo de flexibilización en la SHCP, al aplicar a estas fluctuaciones, movimientos en la tasa del IEPS, según sean las condiciones de mercado; es decir, puede aumentar o disminuir; al aumentar el precio se acordará un subsidio mayor.

¿Pero que es el IEPS?; es el Impuesto Especial sobre Bienes y Servicios que afecta a determinados productos y servicios: como refrescos, cervezas, bebidas endulzantes, frituras o productos chatarra, licores y gasolinas entre otras: tiene su propia ley y tratándose de combustibles aplica de la siguiente manera:

Ley Del IEPS publicada en el Diario Oficial de la Federación el día 21 de diciembre de 2007, determina que:

“quienes realicen la venta de combustible al público en general, trasladarán un monto equivalente al impuesto establecido en esta fracción, pero en ningún caso, lo harán en forma expresa y por separado… Las cuotas a las que se refiere este artículo no computarán para el cálculo del Impuesto al Valor Agregado “.

En conclusión: El impuesto el IEPS que se aplica a la gasolina y diésel, es un tributo de tasa variable que permite ajustar el precio internacional; esta política en el mercado interno ha provocado que este gravamen funcione como subsidio en la venta final de gasolinas y diésel.

El IEPS, tiene tres componentes:

1. La primera, y la de mayor magnitud, es la cuota del impuesto federal, que sustituye una tasa variable, con la finalidad de ajustar el precio al público de los combustibles, y es administrado por el Ejecutivo federal.

2. La segunda cuota del IEPS es la que se destina a estados y municipios.

3. La tercera cuota se aplica a los combustibles fósiles por las emisiones de carbono y el daño que generan al medio ambiente.


Además, el precio de la gasolina tiene otros integrantes:

a) El IVA se aplica a una tasa general del 16% sobre el precio, pero no considera la cuota estatal del IEPS.

b) Los costos de distribución y logística se incluyen en la tarifa Venta de Primera Mano (VPM); La VPM es el precio que cobra Pemex por abastecer de combustible a una estación sin importar su ubicación. No se incurre en los mismos costos de traslado en el norte del país, ciudades cercanas a Estados Unidos que utilizan ductos, al sur, que se abastece por barcos, trenes y camiones.

c) Desde luego el precio de la gasolina es vendida por refinerías del estado de Texas, donde Pemex tiene intereses.


El caso es; que el lunes pasado la gasolina Premium llego a la banda de los $ 20.00 por litro en estaciones de servicio de la CDMX y la magna se mantiene ligeramente por debajo de los $ 19.00.; el consumo hoy en México es de 200 millones de litros diarios de gasolina

El IEPS es un lastre que se magnifico con la reforma energética y que constituye hoy un ingreso importante para la federación, que de no aplicarlo generaría un hoyo financiero que se tendría que sustituir con deuda.

Otro de los puntos citados en el precio es que el 90% de las gasolinas son importadas y se han abandonado las refinerías con que cuenta el país por razones de insumos que dificultan su operación, según declaraciones del titular de la SHCP.

La reforma energética permitió que accesaran al mercado mexicano más de treinta marcas y gasolinas, donde cada participante en la cadena de suministro pone su precio, obteniendo su margen no importándole el libre mercado, casi todos tienen los mismos precios al público.

La ley obliga que a partir del mes de mayo todas las gasolineras (más de 12,000) en el país exhiban sus precios de venta para que el consumidor elija.

El asunto esta; que el tema lo han vuelto político, que el gobierno federal estableció estas políticas públicas y que, dentro de los puntos ofertados por Andrés Manuel López Obrador, es bajar el costo de los combustibles, modernizar las actuales refinerías y construir dos más, por su parte el representante de la coalición por “México al Frente”, Ricardo Anaya Cortes, ofreció eliminar el IEPS y bajar los precios.

Meade por su parte ha manifestado que él continuaría la política de mercado y con los ajustes temporales a los precios; esto es con el propósito de no crear problemas que el corto plazo tendría mayores consecuencias para el país.

En tiempos electorales con los precios al alza en la gasolina, se afectan los bolsillos de los ciudadanos, sea porque usan los combustibles como insumo de transporte o de trabajo o bien como usuarios del servicio público.

Políticamente afecta a la economía del mexicano y tiene antipatía con el partido que administra el país, bandera que enarbolan de los partidos opuestos al PRI.

En términos financieros este es un problema a resolver en el largo plazo y con inversiones de desarrollo tecnológico, que ningún partido tiene la solución, somos al igual que el mundo globalizado presas del mercado.

JFA 11.05.18




El miércoles pasado el subsecretario de Hacienda y Crédito Público, Miguel Messmacher Linartas, realizó declaraciones en torno a los precios de los combustibles, congruentes a los tiempos presentes, puntualizando que las gasolinas serán un reflejo del precio internacional del petróleo y del tipo de cambio.

Agregó que bajo estas premisas la gasolina puede subir o puede bajar; mencionando que una de las causas del incremento a los precios se deriva del conflicto suscitado entre Estados Unidos e Irán por el desistimiento del primero del acuerdo sobre armamento nuclear convenido con el segundo.

Manifestando que todavía hay margen de maniobra para contener el aumento, aplicando el proceso de transición de la liberación de los precios, mediante un mecanismo de flexibilización en la SHCP, al aplicar a estas fluctuaciones, movimientos en la tasa del IEPS, según sean las condiciones de mercado; es decir, puede aumentar o disminuir; al aumentar el precio se acordará un subsidio mayor.

¿Pero que es el IEPS?; es el Impuesto Especial sobre Bienes y Servicios que afecta a determinados productos y servicios: como refrescos, cervezas, bebidas endulzantes, frituras o productos chatarra, licores y gasolinas entre otras: tiene su propia ley y tratándose de combustibles aplica de la siguiente manera:

Ley Del IEPS publicada en el Diario Oficial de la Federación el día 21 de diciembre de 2007, determina que:

“quienes realicen la venta de combustible al público en general, trasladarán un monto equivalente al impuesto establecido en esta fracción, pero en ningún caso, lo harán en forma expresa y por separado… Las cuotas a las que se refiere este artículo no computarán para el cálculo del Impuesto al Valor Agregado “.

En conclusión: El impuesto el IEPS que se aplica a la gasolina y diésel, es un tributo de tasa variable que permite ajustar el precio internacional; esta política en el mercado interno ha provocado que este gravamen funcione como subsidio en la venta final de gasolinas y diésel.

El IEPS, tiene tres componentes:

1. La primera, y la de mayor magnitud, es la cuota del impuesto federal, que sustituye una tasa variable, con la finalidad de ajustar el precio al público de los combustibles, y es administrado por el Ejecutivo federal.

2. La segunda cuota del IEPS es la que se destina a estados y municipios.

3. La tercera cuota se aplica a los combustibles fósiles por las emisiones de carbono y el daño que generan al medio ambiente.


Además, el precio de la gasolina tiene otros integrantes:

a) El IVA se aplica a una tasa general del 16% sobre el precio, pero no considera la cuota estatal del IEPS.

b) Los costos de distribución y logística se incluyen en la tarifa Venta de Primera Mano (VPM); La VPM es el precio que cobra Pemex por abastecer de combustible a una estación sin importar su ubicación. No se incurre en los mismos costos de traslado en el norte del país, ciudades cercanas a Estados Unidos que utilizan ductos, al sur, que se abastece por barcos, trenes y camiones.

c) Desde luego el precio de la gasolina es vendida por refinerías del estado de Texas, donde Pemex tiene intereses.


El caso es; que el lunes pasado la gasolina Premium llego a la banda de los $ 20.00 por litro en estaciones de servicio de la CDMX y la magna se mantiene ligeramente por debajo de los $ 19.00.; el consumo hoy en México es de 200 millones de litros diarios de gasolina

El IEPS es un lastre que se magnifico con la reforma energética y que constituye hoy un ingreso importante para la federación, que de no aplicarlo generaría un hoyo financiero que se tendría que sustituir con deuda.

Otro de los puntos citados en el precio es que el 90% de las gasolinas son importadas y se han abandonado las refinerías con que cuenta el país por razones de insumos que dificultan su operación, según declaraciones del titular de la SHCP.

La reforma energética permitió que accesaran al mercado mexicano más de treinta marcas y gasolinas, donde cada participante en la cadena de suministro pone su precio, obteniendo su margen no importándole el libre mercado, casi todos tienen los mismos precios al público.

La ley obliga que a partir del mes de mayo todas las gasolineras (más de 12,000) en el país exhiban sus precios de venta para que el consumidor elija.

El asunto esta; que el tema lo han vuelto político, que el gobierno federal estableció estas políticas públicas y que, dentro de los puntos ofertados por Andrés Manuel López Obrador, es bajar el costo de los combustibles, modernizar las actuales refinerías y construir dos más, por su parte el representante de la coalición por “México al Frente”, Ricardo Anaya Cortes, ofreció eliminar el IEPS y bajar los precios.

Meade por su parte ha manifestado que él continuaría la política de mercado y con los ajustes temporales a los precios; esto es con el propósito de no crear problemas que el corto plazo tendría mayores consecuencias para el país.

En tiempos electorales con los precios al alza en la gasolina, se afectan los bolsillos de los ciudadanos, sea porque usan los combustibles como insumo de transporte o de trabajo o bien como usuarios del servicio público.

Políticamente afecta a la economía del mexicano y tiene antipatía con el partido que administra el país, bandera que enarbolan de los partidos opuestos al PRI.

En términos financieros este es un problema a resolver en el largo plazo y con inversiones de desarrollo tecnológico, que ningún partido tiene la solución, somos al igual que el mundo globalizado presas del mercado.

JFA 11.05.18