/ viernes 13 de septiembre de 2019

Gómez Cazarín y la Jucopo Camino al ORFIS

En el Congreso del Estado están por concluir el primer año de ejercicio Constitucional. En el segundo receso de la Legislatura la actividad no se ha detenido. La Diputación Permanente se encuentra instalada cumpliendo sus funciones; la próxima sesión está anunciada para el miércoles 18 de septiembre.

Mientras, la Comisión de Vigilancia, que preside el diputado Éric Domínguez, da curso al proceso de selección del próximo titular del Órgano de Fiscalización Superior del Estado (Orfis). En síntesis, podríamos decir que se respira un ambiente de trabajo en el recinto de la avenida Encanto de Xalapa.

El primer año de esta Legislatura cerró con buenas cifras y para el segundo se prevén importantes retos.

Al realizar un recorrido rápido por las opiniones de los legisladores de Morena, uno encuentra evidente cohesión. A diferencia de lo que se observa en otros grupos legislativos, como el de Acción Nacional, donde parece que habrá cambios en la presidencia de la bancada, los de Morena no enfrentan problemas de división interna.

A varios diputados del Movimiento, y sobre todo a las diputadas, su partido les encomendó la presidencia de comisiones importantes y lo han hecho bien.

A decir de varios de ellos, la bancada ha cerrado filas en torno al presidente de la Junta de Coordinación Política, Juan Javier Gómez Cazarín, quien con un estilo muy personal, desenfadado y alejado de poses acartonadas, preside la Junta de Coordinación Política, el órgano máximo de dirección en el Congreso, en el que están representadas todas las fuerzas políticas.

Con un espíritu conciliador, Gómez Cazarín ha mostrado una nueva forma de sacar adelante la conducción de semejante empresa; y entre los legisladores de Morena existe confianza en el presidente de la Jucopo.

Los diputados morenistas, primera fuerza en el Congreso de Veracruz, han reconocido la apertura de Gómez Cazarín al diálogo, y también han coincidido en que ha sabido ser enérgico al momento de hacer valer la ley, porque para eso están los representantes populares ante los atropellos y abusos de la autoridad, particularmente de quienes deberían cumplir la encomienda de procurar justicia. La autoridad simplemente se ejerce y el representante del Distrito XXV de San Andrés Tuxtla, dicen sus correligionarios, lo ha sabido hacer.

Debido a ello, el presidente de la Junta se ha afianzado en su posición. Ha recibido muestras de apoyo que lo fortalecen para mantenerse ahí durante el segundo año. Veremos qué sucede. Mientras la oposición luce descolorida y dividida por guerras intestinas, dimes y diretes, y disputas internas por el mando, los de Morena avanzan sin mayor dificultad.

CAMINO AL ORFIS

Ha concluido la segunda etapa de la convocatoria pública expedida por el Congreso del Estado para elegir o reelegir al titular del Órgano de Fiscalización Superior del Estado (Orfis) para el período 2019-2026 y el saldo ha sido positivo por diversos factores que merecen atenderse.

En principio, no se han advertido “dados cargados” y el proceso ha sido equitativo; los integrantes de la Comisión de Vigilancia de la Legislatura han estado a la altura de las expectativas sin emitir juicios o exponer sus preferencias.

Otro elemento destacado ha sido la apertura y transparencia por conocer los proyectos de los aspirantes, que incluso han coincidido en reconocer “piso parejo” en la contienda, sin intimidarse por la participación del actual auditor general, quien ha sabido comportarse durante el proceso, sin ganar más protagonismo que el natural que le confiere su encomienda.

Con relación a Lorenzo Antonio Portilla, habría que destacar su planteamiento sobre la necesidad de articular una mayor alianza entre el Poder Legislativo y el ente fiscalizador; y reformar la Ley 364 de Fiscalización Superior y Rendición de Cuentas del Estado, para homologar los procesos del Orfis con los de la Auditoría Superior de la Federación (ASF).

En medio de este proceso, otros aspirantes fueron cuestionados por sus supuestos padrinazgos o por una trayectoria con más negativos que podrían pesar a la hora de la definición de la terna. Como sea, los aspirantes han tenido el valor de pasar por la aduana legislativa y la Comisión de Vigilancia ha hecho su parte.

Entre el 23 y 24 de septiembre se emitirá el dictamen con las tres personas propuestas para el cargo, con el fin de que sea el pleno, por mayoría calificada, el que elija el 26 de septiembre al auditor general del Orfis, justo el día en que Portilla Vásquez podría presentar los informes individuales y el informe general ejecutivo de la Fiscalización Superior de las Cuentas Públicas 2018. El camino al Orfis empieza ahí mismo. @luisromero85


En el Congreso del Estado están por concluir el primer año de ejercicio Constitucional. En el segundo receso de la Legislatura la actividad no se ha detenido. La Diputación Permanente se encuentra instalada cumpliendo sus funciones; la próxima sesión está anunciada para el miércoles 18 de septiembre.

Mientras, la Comisión de Vigilancia, que preside el diputado Éric Domínguez, da curso al proceso de selección del próximo titular del Órgano de Fiscalización Superior del Estado (Orfis). En síntesis, podríamos decir que se respira un ambiente de trabajo en el recinto de la avenida Encanto de Xalapa.

El primer año de esta Legislatura cerró con buenas cifras y para el segundo se prevén importantes retos.

Al realizar un recorrido rápido por las opiniones de los legisladores de Morena, uno encuentra evidente cohesión. A diferencia de lo que se observa en otros grupos legislativos, como el de Acción Nacional, donde parece que habrá cambios en la presidencia de la bancada, los de Morena no enfrentan problemas de división interna.

A varios diputados del Movimiento, y sobre todo a las diputadas, su partido les encomendó la presidencia de comisiones importantes y lo han hecho bien.

A decir de varios de ellos, la bancada ha cerrado filas en torno al presidente de la Junta de Coordinación Política, Juan Javier Gómez Cazarín, quien con un estilo muy personal, desenfadado y alejado de poses acartonadas, preside la Junta de Coordinación Política, el órgano máximo de dirección en el Congreso, en el que están representadas todas las fuerzas políticas.

Con un espíritu conciliador, Gómez Cazarín ha mostrado una nueva forma de sacar adelante la conducción de semejante empresa; y entre los legisladores de Morena existe confianza en el presidente de la Jucopo.

Los diputados morenistas, primera fuerza en el Congreso de Veracruz, han reconocido la apertura de Gómez Cazarín al diálogo, y también han coincidido en que ha sabido ser enérgico al momento de hacer valer la ley, porque para eso están los representantes populares ante los atropellos y abusos de la autoridad, particularmente de quienes deberían cumplir la encomienda de procurar justicia. La autoridad simplemente se ejerce y el representante del Distrito XXV de San Andrés Tuxtla, dicen sus correligionarios, lo ha sabido hacer.

Debido a ello, el presidente de la Junta se ha afianzado en su posición. Ha recibido muestras de apoyo que lo fortalecen para mantenerse ahí durante el segundo año. Veremos qué sucede. Mientras la oposición luce descolorida y dividida por guerras intestinas, dimes y diretes, y disputas internas por el mando, los de Morena avanzan sin mayor dificultad.

CAMINO AL ORFIS

Ha concluido la segunda etapa de la convocatoria pública expedida por el Congreso del Estado para elegir o reelegir al titular del Órgano de Fiscalización Superior del Estado (Orfis) para el período 2019-2026 y el saldo ha sido positivo por diversos factores que merecen atenderse.

En principio, no se han advertido “dados cargados” y el proceso ha sido equitativo; los integrantes de la Comisión de Vigilancia de la Legislatura han estado a la altura de las expectativas sin emitir juicios o exponer sus preferencias.

Otro elemento destacado ha sido la apertura y transparencia por conocer los proyectos de los aspirantes, que incluso han coincidido en reconocer “piso parejo” en la contienda, sin intimidarse por la participación del actual auditor general, quien ha sabido comportarse durante el proceso, sin ganar más protagonismo que el natural que le confiere su encomienda.

Con relación a Lorenzo Antonio Portilla, habría que destacar su planteamiento sobre la necesidad de articular una mayor alianza entre el Poder Legislativo y el ente fiscalizador; y reformar la Ley 364 de Fiscalización Superior y Rendición de Cuentas del Estado, para homologar los procesos del Orfis con los de la Auditoría Superior de la Federación (ASF).

En medio de este proceso, otros aspirantes fueron cuestionados por sus supuestos padrinazgos o por una trayectoria con más negativos que podrían pesar a la hora de la definición de la terna. Como sea, los aspirantes han tenido el valor de pasar por la aduana legislativa y la Comisión de Vigilancia ha hecho su parte.

Entre el 23 y 24 de septiembre se emitirá el dictamen con las tres personas propuestas para el cargo, con el fin de que sea el pleno, por mayoría calificada, el que elija el 26 de septiembre al auditor general del Orfis, justo el día en que Portilla Vásquez podría presentar los informes individuales y el informe general ejecutivo de la Fiscalización Superior de las Cuentas Públicas 2018. El camino al Orfis empieza ahí mismo. @luisromero85