Como queriendo apropiarse de los cuatro asientos que quedarán libres en el Consejo General del INE, dirigentes de partidos y organizaciones políticas ya cabildean en lo “oscurito” las propuestas de los personajes de su interés...
Que habrán de sustituir a los consejeros Pamela San Martín, Marco Antonio Baños, Benito Nacif y Enrique Andrade, este último identificado por la promoción del voto de los mexicanos en el extranjero, tema que le ha servido para “turistear” de norte a sur, del Golfo al Pacífico y parte del extranjero.
Andrade González en septiembre de 2015 fue denunciado ante la Contraloría Interna del INE por el representante de Morena, Horacio Duarte Olivares, hoy flamante subsecretario del Trabajo y en aquel tiempo reconocido por su preparación académica y cercanía con el actual presidente de México. La acusación se fundó en la intromisión de Andrade, para la designación de funcionarios del OPLE; pero el respaldo de sus compañeros consejeros, impidió que se le aplicara la sanción correspondiente.
De los tres consejeros restantes que dejan el INE, puede afirmarse que cumplieron cabalmente con sus funciones, cuidando ser respetuosos de las leyes y procesos electorales, a tal grado que jamás objetaron a los opositores al gobierno de Enrique Peña Nieto, y se sumaron para emitir su voto favorable al triunfo del candidato presidencial de Morena.
Se espera legalidad y transparencia en la elección de los nuevos consejeros que habrán de ser electos el 31 de marzo en la sesión plenaria de la Cámara federal de Diputados, presidida por la diputada Laura Rojas Hernández, quien se estrenó como parlamentaria abanderada por el PAN en 2006, con una curul de la Cámara que preside.
Laura Rojas también fue senadora de 2012 a 2018 y en la actual Legislatura, después de haber pretendido ser la candidata del PAN al gobierno de Edomex, desbancada por Josefina Vázquez Mota, conserva sus aspiraciones para la próxima elección del Ejecutivo estatal del Estado de México. Experiencia y tacto político los tiene.
Pero hay un filtro que los aspirantes a consejeros del INE deben pasar y es la calificación de sus trayectorias, imágenes públicas y no haber ejercido funciones partidistas y gubernamentales por un mínimo de cuatro años antes de su registro.
Los opositores a Morena propondrán consejeros a su favor y, por su parte, los de Morena harán lo propio, para mantener un ambiente favorable a su causa.
