/ martes 5 de julio de 2022

Huerta se “encarta”

En reuniones con simpatizantes y operadores políticos del Movimiento de Regeneración Nacional –grupos de cuarenta o cincuenta personas–, el delegado de los programas federales en Veracruz, Manuel Huerta Ladrón de Guevara ha externado su aspiración por buscar la candidatura al gobierno de Veracruz.

Unas de las más recientes se llevó a efecto en la zona conurbada, donde estuvo acompañado por el diputado José Magdaleno Rosales Torres, cuadro importante de Morena en los municipios de la región de Medellín de Bravo; en Orizaba y en Los Tuxtlas.

El delegado sabe lo que trae; encabeza la dependencia que representa al gobierno federal en Veracruz; tiene el control de los programas sociales; y cuenta con un ejército de “servidores de la nación” que bien podría verse como un potencial equipo de promotores del voto. Son personas que todos los días caminan el territorio estatal llevando bajo el brazo los padrones de los cientos de miles de beneficiarios del “Programa para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores”; de “Sembrando Vida”; de los apoyos enfocados en las personas con discapacidad y en los hijos de madres trabajadoras; y de los que se destinan a estudiantes de bachillerato.

Los programas sociales, una de las principales fortalezas del delegado, dispersan anualmente unos 60 mil millones de pesos, reveló el pasado 27 de enero el gobernador Cuitláhuac García, quien señaló que ese monto equivale a la mitad del presupuesto anual de Veracruz.

Bimestralmente, cada adulto mayor de 65 años en la entidad recibe 3 mil 850 pesos. Hablamos de casi un millón de potenciales beneficiarios, sin contar con personas en condición de discapacidad, ni con las becas y apoyos que se destinan a niños.

Precisamente por ese peso político y por el control de los servidores de la Nación que trabajan en Veracruz, Manuel Huerta podría surgir como una posibilidad rumbo a 2024, no sólo pensando en la sucesión en el gobierno estatal, sino en la carrera por la única posición para el sexo masculino en la contienda al Senado.

Así, sin importar si logre o no la candidatura al gobierno estatal –en cuya carrera figuran nombres como los de Rocío Nahle García, Zenyazen Escobar García, Juan Javier Gómez Cazarín, Sergio Gutiérrez Luna y Ricardo Ahued Bardahuil, por citar algunos–, es un hecho que el delegado federal será tomado en cuenta; porque, además, es de los muy pocos activos de Morena que cuenta con estructura en la entidad.

Ni siquiera Nahle tiene tantos activos en la entidad

Lo cierto es que en la carrera sucesoria de Veracruz, parecería que la secretaria de Energía del gobierno federal es puntera, debido a la importancia de su actual cargo, y sobre todo a la cercanía con López Obrador, más que por su presencia real en la entidad; pero si el Movimiento privilegia el trabajo en las bases, entonces otros nombres serán encartados como posibles sucesores de Cuitláhuac García.

Por su perfil más bien discreto, Manuel Huerta cuida sus expresiones políticas y sus pronunciamientos públicos; su trabajo se ha centrado en la organización y, como en el ajedrez, en las posiciones; por ello sin duda se verá su mano en la próxima renovación del consejo estatal de Morena.

En reuniones con simpatizantes y operadores políticos del Movimiento de Regeneración Nacional –grupos de cuarenta o cincuenta personas–, el delegado de los programas federales en Veracruz, Manuel Huerta Ladrón de Guevara ha externado su aspiración por buscar la candidatura al gobierno de Veracruz.

Unas de las más recientes se llevó a efecto en la zona conurbada, donde estuvo acompañado por el diputado José Magdaleno Rosales Torres, cuadro importante de Morena en los municipios de la región de Medellín de Bravo; en Orizaba y en Los Tuxtlas.

El delegado sabe lo que trae; encabeza la dependencia que representa al gobierno federal en Veracruz; tiene el control de los programas sociales; y cuenta con un ejército de “servidores de la nación” que bien podría verse como un potencial equipo de promotores del voto. Son personas que todos los días caminan el territorio estatal llevando bajo el brazo los padrones de los cientos de miles de beneficiarios del “Programa para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores”; de “Sembrando Vida”; de los apoyos enfocados en las personas con discapacidad y en los hijos de madres trabajadoras; y de los que se destinan a estudiantes de bachillerato.

Los programas sociales, una de las principales fortalezas del delegado, dispersan anualmente unos 60 mil millones de pesos, reveló el pasado 27 de enero el gobernador Cuitláhuac García, quien señaló que ese monto equivale a la mitad del presupuesto anual de Veracruz.

Bimestralmente, cada adulto mayor de 65 años en la entidad recibe 3 mil 850 pesos. Hablamos de casi un millón de potenciales beneficiarios, sin contar con personas en condición de discapacidad, ni con las becas y apoyos que se destinan a niños.

Precisamente por ese peso político y por el control de los servidores de la Nación que trabajan en Veracruz, Manuel Huerta podría surgir como una posibilidad rumbo a 2024, no sólo pensando en la sucesión en el gobierno estatal, sino en la carrera por la única posición para el sexo masculino en la contienda al Senado.

Así, sin importar si logre o no la candidatura al gobierno estatal –en cuya carrera figuran nombres como los de Rocío Nahle García, Zenyazen Escobar García, Juan Javier Gómez Cazarín, Sergio Gutiérrez Luna y Ricardo Ahued Bardahuil, por citar algunos–, es un hecho que el delegado federal será tomado en cuenta; porque, además, es de los muy pocos activos de Morena que cuenta con estructura en la entidad.

Ni siquiera Nahle tiene tantos activos en la entidad

Lo cierto es que en la carrera sucesoria de Veracruz, parecería que la secretaria de Energía del gobierno federal es puntera, debido a la importancia de su actual cargo, y sobre todo a la cercanía con López Obrador, más que por su presencia real en la entidad; pero si el Movimiento privilegia el trabajo en las bases, entonces otros nombres serán encartados como posibles sucesores de Cuitláhuac García.

Por su perfil más bien discreto, Manuel Huerta cuida sus expresiones políticas y sus pronunciamientos públicos; su trabajo se ha centrado en la organización y, como en el ajedrez, en las posiciones; por ello sin duda se verá su mano en la próxima renovación del consejo estatal de Morena.