/ sábado 16 de marzo de 2019

Imagen violenta de Veracruz; se confrontan aspirantes al PRI

Por más esfuerzos que hace el gobierno para dar a conocer el combate a la delincuencia y sus acciones para disminuir los índices de violencia, no ha logrado la difusión y menos ha influido en la percepción de que baja la inseguridad.

Los hechos ocurridos ayer en la zona de Tierra Blanca y que se extendieron hasta Córdoba desplazaron todos los demás temas de la agenda pública veracruzana y se posicionaron tanto en las redes sociales, como en las páginas web y hasta en las charlas personales de la gente en las oficinas, los talleres, en el transporte público, en la calle y en los mercados.

Los hechos como los de ayer con tráileres en llamas, enfrentamientos, policías asesinados, delincuentes abatidos, carreteras bloqueadas, la presencia del Ejército y persecuciones, imponen una imagen violenta de Veracruz que ninguna buena noticia puede eliminar.

No puede el gobierno de Veracruz continuar actuando como si estuviera emulando a las administraciones estatales anteriores, a las que tanto ha criticado.

Quienes gobernaron el estado en el pasado se desvivían publicitando cifras de detenidos, bandas desmembradas, delincuentes abatidos, armas decomisadas y otras acciones, que se perdían ante las impactantes acciones de violencia y de muerte provocadas por las acciones de los criminales.

Hoy parece repetirse esa historia del bienio pasado, porque la cruda realidad se impone y no permite que permeen las campañas de promoción turística y ni los anuncios sobre inversiones ni nada que anuncie alguna voz oficial.

Ésa es la realidad.


Apenas ayer comentaba en este espacio la oportunidad que tiene el PRI para salir airoso de este proceso interno en el que habrá de elegir a su presidente estatal para reposicionarse.

Por supuesto que la competitividad priista no será la mejor y si acaso le dará sólo para mantenerse vigente como partido y alcanzar un mínimo de votos que le permitan conservar su registro.

Para lograrlo, lo que más le conviene es que los grupos en pugna por el control del comité estatal lleguen a un acuerdo y propongan una sola fórmula para evitar la campaña interna, que sería desgastante pues conllevaría la confrontación que, por cierto, ya empezó.

Comentan priistas que entre los aspirantes hay dos que están protagonizando lo que podría llamarse de manera informal la precampaña al externar sus diferencias entre ellos al señalar ambos que aceptarían a cualquiera como dirigente, menos a uno de ellos.

De ahondarse las diferencias entre Antonio Benítez Lucho y Marlon Ramírez Marín, difícilmente podría hablarse de un proceso civilizado en ese partido y menos podría esperarse la unidad de los priistas.

Otro problema que enfrentarían tanto los aspirantes como la misma dirigencia y la Comisión Estatal de Procesos Internos es el padrón desactualizado de militantes, pues estarían basándose en uno que elaboraron en el año 2012, cuando el Revolucionario Institucional acababa de sufrir un éxodo de militantes y simpatizantes que en su mayoría se sumaron a Morena y los menos se fueron al PAN y a otros partiditos.


Y sobre lo sucesión en el PRI, ayer, la diputada local Érika Ayala consideró que deben ser los verdaderos militantes, los que se han quedado en el partido y siguen dando la cara, quienes puedan decidir al nuevo dirigente estatal.

La también dirigente de la CNOP, quien ha coincidido con su homóloga federal Anilú Ingram al señalar que no buscará la presidencia de su partido (al menos no esta vez), comentó que se está aplicando un esquema democrático que por mucho tiempo fue reclamado por la militancia.

Ella, al igual que sus correligionarios está a la espera de ver “quiénes son los que se registran, de los que se registren ya sabré a quién le doy mi voto personal como priista, porque, una cosa es que aspiren y otra que cubran los requisitos”.

Optimista, la legisladora considera que el PRI se va a recuperar cuando cada uno de sus integrantes asuma la responsabilidad que le toca y rechazó la posibilidad de una fractura.


Opine, comente e informe a los correos electrónicos srdonrene@gmail.com y rvalle@diariodexalapa.com.mx. Y en twitter@renedelvalleb. También puede leernos en la web site www.diariodexalapa.com.mx.

Por más esfuerzos que hace el gobierno para dar a conocer el combate a la delincuencia y sus acciones para disminuir los índices de violencia, no ha logrado la difusión y menos ha influido en la percepción de que baja la inseguridad.

Los hechos ocurridos ayer en la zona de Tierra Blanca y que se extendieron hasta Córdoba desplazaron todos los demás temas de la agenda pública veracruzana y se posicionaron tanto en las redes sociales, como en las páginas web y hasta en las charlas personales de la gente en las oficinas, los talleres, en el transporte público, en la calle y en los mercados.

Los hechos como los de ayer con tráileres en llamas, enfrentamientos, policías asesinados, delincuentes abatidos, carreteras bloqueadas, la presencia del Ejército y persecuciones, imponen una imagen violenta de Veracruz que ninguna buena noticia puede eliminar.

No puede el gobierno de Veracruz continuar actuando como si estuviera emulando a las administraciones estatales anteriores, a las que tanto ha criticado.

Quienes gobernaron el estado en el pasado se desvivían publicitando cifras de detenidos, bandas desmembradas, delincuentes abatidos, armas decomisadas y otras acciones, que se perdían ante las impactantes acciones de violencia y de muerte provocadas por las acciones de los criminales.

Hoy parece repetirse esa historia del bienio pasado, porque la cruda realidad se impone y no permite que permeen las campañas de promoción turística y ni los anuncios sobre inversiones ni nada que anuncie alguna voz oficial.

Ésa es la realidad.


Apenas ayer comentaba en este espacio la oportunidad que tiene el PRI para salir airoso de este proceso interno en el que habrá de elegir a su presidente estatal para reposicionarse.

Por supuesto que la competitividad priista no será la mejor y si acaso le dará sólo para mantenerse vigente como partido y alcanzar un mínimo de votos que le permitan conservar su registro.

Para lograrlo, lo que más le conviene es que los grupos en pugna por el control del comité estatal lleguen a un acuerdo y propongan una sola fórmula para evitar la campaña interna, que sería desgastante pues conllevaría la confrontación que, por cierto, ya empezó.

Comentan priistas que entre los aspirantes hay dos que están protagonizando lo que podría llamarse de manera informal la precampaña al externar sus diferencias entre ellos al señalar ambos que aceptarían a cualquiera como dirigente, menos a uno de ellos.

De ahondarse las diferencias entre Antonio Benítez Lucho y Marlon Ramírez Marín, difícilmente podría hablarse de un proceso civilizado en ese partido y menos podría esperarse la unidad de los priistas.

Otro problema que enfrentarían tanto los aspirantes como la misma dirigencia y la Comisión Estatal de Procesos Internos es el padrón desactualizado de militantes, pues estarían basándose en uno que elaboraron en el año 2012, cuando el Revolucionario Institucional acababa de sufrir un éxodo de militantes y simpatizantes que en su mayoría se sumaron a Morena y los menos se fueron al PAN y a otros partiditos.


Y sobre lo sucesión en el PRI, ayer, la diputada local Érika Ayala consideró que deben ser los verdaderos militantes, los que se han quedado en el partido y siguen dando la cara, quienes puedan decidir al nuevo dirigente estatal.

La también dirigente de la CNOP, quien ha coincidido con su homóloga federal Anilú Ingram al señalar que no buscará la presidencia de su partido (al menos no esta vez), comentó que se está aplicando un esquema democrático que por mucho tiempo fue reclamado por la militancia.

Ella, al igual que sus correligionarios está a la espera de ver “quiénes son los que se registran, de los que se registren ya sabré a quién le doy mi voto personal como priista, porque, una cosa es que aspiren y otra que cubran los requisitos”.

Optimista, la legisladora considera que el PRI se va a recuperar cuando cada uno de sus integrantes asuma la responsabilidad que le toca y rechazó la posibilidad de una fractura.


Opine, comente e informe a los correos electrónicos srdonrene@gmail.com y rvalle@diariodexalapa.com.mx. Y en twitter@renedelvalleb. También puede leernos en la web site www.diariodexalapa.com.mx.