Siembran de tres o hasta cuatro granos de maíz seleccionados, se depositan en un pequeño orificio que se hace en suelo fértil y posteriormente se cubre. Se van formando los surcos sin medida, a puro cálculo. Entre vecinos, amistades y compañeros acompañan al dueño del terreno para sembrar esta gramínea que será el alimento para varias personas.
Con el tiempo surgen las hojas y empieza a crecer una pequeña vaina. Es el totomoxtle, que protege la mazorca y en la cúspide brota una bella cabellera amarilla, muy delgada, aún está tierno el fruto de la planta de maíz. Llega el instante que la siembra de maíz está en jilote, derivada la palabra náhuatl, “xilotl” que significa mazorca tierna, aún con lechecilla, pero con un delicioso sabor para quienes podemos degustarla.
En un mágico lugar localizado a escasos 40 minutos de la ciudad de Xalapa, rodeado de cerros, de historias que se ocultan en el túnel del esquilón, las haciendas antiguas de La Concepción y los vestigios arqueológicos que aún están por descubrirse, se encuentra Jilotepec, el cerro de la mazorca tierna, de la mazorca de oro, donde una cabellera inspira a los pequeños poetas y escritores de este enigmático espacio, dedicado a las actividades agropecuarias.
Suelen correr la voz de generación en generación, en donde se comparten historias, mitos, leyendas, vivencias de los abuelos, de los totonacas que residieron en esos suelos, de los nahua hablantes que les heredaron el nombre de Xilotepetl. Son varias comunidades, rancherías las que rodean a la cabecera municipal, en algunas de ellas se cuenta con escuelas de nivel preescolar, primaria, secundaria y telebachillerato. Ahí surgen los nuevos escritores y poetas, la niñez es creadora por excelencia.
Del 28 de febrero al 3 de marzo llegaron varios visitantes amantes de la poesía, del cuento y de la narración con motivo del “Encuentro Nacional de Poetas y Escritores, Niebla entre las palabras”. Escritores de poesía de Tlaxcala, Puebla, Chihuahua, Nayarit, España y Veracruz fueron a compartir su experiencia a los pequeños, en sus escuelas, en sus aulas. Se deleitaron los poemas de destacados escritores, sin embargo lo más maravilloso fue que los mismos niños a través de sus dibujos y unos breves textos crearon sus propios versos poéticos y se los compartieron a los integrantes de la Academia Nacional de Poesía que preside en el país Sergio Morett Majarrez y a nivel estatal, Marco Antonio Figueroa Quinto.
Fue con María Presentación Regueira, presidente del comité municipal de la Academia Nacional de Poesía; Blanca Luz Amezcua, asesora general del comité estatal de la Academia Nacional de Poesía; Abigail Landa López, directora de Turismo y Cultura del Ayuntamiento; Manuel Benítez, director de la orquesta sinfónica del municipio, así como con su servidor cuando recorrimos Vista Hermosa primera manzana, Las Lomas, Piedra de Agua y La Concepción, donde se dio ese constante enriquecimiento al escuchar la voz de los pequeños, inspirados en la naturaleza, sus padres, sus maestros o por alguien cercano.
Jilotepec es la capital nacional de la poesía por su niñez, su gente y la buena coordinación con el alcalde Sergio Fernández Lara y Lourdes Lara. Digno reconocimiento a María Carmen, Willians Alejandro Fernández y Joan David Landa, entre otros, integrantes de Turismo y Cultura. Paxkatkatsini (Gracias)
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