Falta poco para que alguna empresa televisa le ofrezca la segunda versión de “Los ricos también lloran” a Karime, la ex que sigue dando mucho de qué hablar a pesar de su lejana presencia física.
La última noticia que no es exclusiva ni mucho menos nueva, es la que público esta semana un conocido periódico en donde se retoma la compra de una fastuosa mansión en Miami, Florida, en un barrio de ricos.
Presuntamente, uno de los operadores habría informado a las autoridades federales encargadas de la investigación de dicha adquisición hecha en noviembre de 2015.
En caso de que se compruebe que el cerebro financiero fue Karime, entonces, también se confirmaría, que la esposa definitivamente vivía –hasta los últimos días- del poder, invirtiendo en lo que pensaba, sería un feliz, tranquilo y próspero futuro.
De acuerdo con la nota, el operador habría descubierto dicha transacción porque la dama habría fallado en los acuerdos; toda una trama, intensa historia y dato muy vendible, ya que se asegura además que Karime organizó la compra de cerca de 41 inmuebles que la familia compró en Estados Unidos.
Acá en Veracruz, ya nada sorprende, el tema ha sido desgastado por aquellos que buscan a través de él, desviar atención y continuar con la imagen de salvadores de los corruptos.
El cansancio de los veracruzanos va en aumento, aún con lo que parecería “Karime, la telenovela” el hartazgo permanece, los excesos se irán descubriendo en diferentes modalidades, los castigos no han sido suficientes y los casos se caerán por estar mal conformados ante la prisa por el corto periodo de gobierno.
El caso Karime seguirá su trama, que si se queda en Londres, que sí descubren más propiedades, que sí merece castigo ante la abundancia y hasta podría poner de moda algún accesorio en su próxima fotografía.
Karime, la telenovela, podría ser sin duda, la historia más impune de que tengamos memoria; y es que, por más que se diga y escriba, parece casi imposible que la ex primera dama pague por sus excesos, aunque ahora se transporte en metro, mientras lee relajada una revista.
Ágora
Nadie quiere al PRI, bueno no es novedad, pero en este caso nos referimos al Comité Directivo Estatal en Veracruz, de ese desgastado partido.
Y es que, a diferencia de otros años, nadie quiere relevar a Américo Zúñiga y el ex alcalde de manera estoica permanece ahí a pesar de que no hay un peso para mantener los gastos operativos y sueldos. Uff.
@monicamarena
