/ martes 17 de agosto de 2021

La 4T pone en riesgo la vida de niños y niñas

Como si este sexenio no tuviera suficientes muertos, el presidente Andrés Manuel López Obrador, con mucha irresponsabilidad y como de costumbre, sin estrategia, ahora pretende mandar a las niñas y niños al “contagiadero” del virus del Covid-19 y sus variantes más contagiosas.

Mientras en Estados Unidos casi mil 600 menores fueron hospitalizados con Covid-19, la semana pasada, según datos hospitalarios por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de ese país, han tenido un nuevo récord de aumentos y algunos estados ya enfrentan y trabajan en combatir contra los peores brotes de esta pandemia.

En México, el titular del ejecutivo federal y la secretaria de Educación, Delfina Gómez, con demasiada imprudencia impulsan y promueven el regreso a clases presenciales en todo el país, sin implementar las medidas necesarias para evitar más contagios.

Con corte al 1 de agosto, en México han muerto 605 menores de edad a causa de este virus, dando un total de 59 mil 127 casos confirmados, según datos de la misma Secretaría Ejecutiva del Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA).

Y el Presidente dice que “es muy raro que fallezcan niños, esa es una bendición, el que no les afecte a los niños o que se contagien”, además de repetir que existen las condiciones para que las clases presenciales se retomen el próximo 30 de agosto.

Quizá a López Obrador no le interese la integridad de los menores de edad, porque se dedica a organizar espectáculos masivos sin el mínimo cuidado, ni las medidas necesarias, aún cuando expertos en el tema han pronunciado que a medida que surge la variante Delta, es preocupante porque se puede estar en la antesala del momento más peligroso de la pandemia para los niños.

Arriesgar así la vida de los infantes será la responsabilidad de un gobierno irresponsable que no asume su parte, quizá como los niños no votan no les importa su vida, la 4T ha perdido toda capacidad y sensibilidad para atender a este sector y no continuar con las clases de manera virtual.

Para Andrés Manuel, todo es broma y ligereza, sus caminos de la vida no son los mismos para las familias de los casi 30 millones de estudiantes de nivel preescolar, primaria y secundaria, a quienes les refirió que “hay que correr ciertos riesgos” y así termina su show.

Ninguna muerte evitable es aceptable, y no es como dice el Presidente, nadie puede aplaudir eso, ni los enemigos imaginarios, ni la oposición, pero queda claro que para Morena la vida de los pequeños no tiene ningún valor; tan es así que siguen sin hacer nada ante la escasez de medicamentos oncológicos.

No cabe duda que sus “estrategias” o sistema de planeación, si es que en verdad tienen, solo van de fracaso en fracaso.

Senador por Veracruz del PAN

Como si este sexenio no tuviera suficientes muertos, el presidente Andrés Manuel López Obrador, con mucha irresponsabilidad y como de costumbre, sin estrategia, ahora pretende mandar a las niñas y niños al “contagiadero” del virus del Covid-19 y sus variantes más contagiosas.

Mientras en Estados Unidos casi mil 600 menores fueron hospitalizados con Covid-19, la semana pasada, según datos hospitalarios por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de ese país, han tenido un nuevo récord de aumentos y algunos estados ya enfrentan y trabajan en combatir contra los peores brotes de esta pandemia.

En México, el titular del ejecutivo federal y la secretaria de Educación, Delfina Gómez, con demasiada imprudencia impulsan y promueven el regreso a clases presenciales en todo el país, sin implementar las medidas necesarias para evitar más contagios.

Con corte al 1 de agosto, en México han muerto 605 menores de edad a causa de este virus, dando un total de 59 mil 127 casos confirmados, según datos de la misma Secretaría Ejecutiva del Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA).

Y el Presidente dice que “es muy raro que fallezcan niños, esa es una bendición, el que no les afecte a los niños o que se contagien”, además de repetir que existen las condiciones para que las clases presenciales se retomen el próximo 30 de agosto.

Quizá a López Obrador no le interese la integridad de los menores de edad, porque se dedica a organizar espectáculos masivos sin el mínimo cuidado, ni las medidas necesarias, aún cuando expertos en el tema han pronunciado que a medida que surge la variante Delta, es preocupante porque se puede estar en la antesala del momento más peligroso de la pandemia para los niños.

Arriesgar así la vida de los infantes será la responsabilidad de un gobierno irresponsable que no asume su parte, quizá como los niños no votan no les importa su vida, la 4T ha perdido toda capacidad y sensibilidad para atender a este sector y no continuar con las clases de manera virtual.

Para Andrés Manuel, todo es broma y ligereza, sus caminos de la vida no son los mismos para las familias de los casi 30 millones de estudiantes de nivel preescolar, primaria y secundaria, a quienes les refirió que “hay que correr ciertos riesgos” y así termina su show.

Ninguna muerte evitable es aceptable, y no es como dice el Presidente, nadie puede aplaudir eso, ni los enemigos imaginarios, ni la oposición, pero queda claro que para Morena la vida de los pequeños no tiene ningún valor; tan es así que siguen sin hacer nada ante la escasez de medicamentos oncológicos.

No cabe duda que sus “estrategias” o sistema de planeación, si es que en verdad tienen, solo van de fracaso en fracaso.

Senador por Veracruz del PAN