/ jueves 9 de agosto de 2018

Las cuatro virtudes cardinales

En la parte inferior del parque Juárez donde se encuentra el Paseo del Ayuntamiento, están localizadas cuatro estatuas que representan a las virtudes cardinales: la Templanza esculpida por el artista, con la figura de un hombre sujetando en sus manos a un caballo brioso. La Prudencia, se simboliza en una mujer que está jalando, con la mano derecha, la oreja de una persona deshonesta y desvergonzada. La Fortaleza es un hombre que mantiene en sus manos un mazo y detrás de él, a la altura de su rodilla izquierda, destaca la cabeza de un león, símbolo de fuerza y valor, y la Justicia es una figura femenina que sostiene en sus manos una espada de la que cuelgan unas cadenas a su costado izquierdo.

¿Qué nos están transmitiendo estas obras, cuando las contemplamos? Les expreso mis percepciones e interpretaciones, que pueden ser diferentes a la de usted.

De entrada es importante resaltar el significado que tiene el número de las virtudes: cuatro. Esta cifra en la sagrada Biblia es símbolo de todo lo que fue creado en el mundo, es el número de la creación. Es alegoría del cosmos y del mundo donde hay cuatro puntos cardinales y cuatro estaciones del año.

Tener la virtud de la Fortaleza significa vencer el temor, enfrentar la vida con actitud positiva caracterizada por el vigor y el gozo, ante las adversidades y contratiempos.

El ser justo es un valor que pocos seres humanos practican, sobre todo en nuestro país, pues brilla por su ausencia en todos los sectores y sistemas. Una persona justa es misericordiosa y amorosa con sus semejantes. Es ejemplar, honrado, honesto y virtuoso.

Ser prudente es actuar, en cada situación de la vida, de acuerdo a lo que es mejor con la finalidad de tomar la mejor decisión, de acuerdo a las circunstancias que se vivan. Es buscar hacer el mayor bien posible a los demás, como forma de vida. Hay que servir a los demás, no servirse de ellos.

Tener la virtud de la Templanza en este mundo globalizado y consumista que nos tocó vivir es importante. Una persona con temple es un ser humano moderado en todo su comportamiento, principalmente en el control de las pasiones las cuales están siempre sujetas a la razón.

Concluyo este artículo con un comentario a propósito del parque Juárez, en el primer nivel de ese hermoso espacio recreativo y turístico se encuentran dos o tres bancas de metal inservibles, completamente destruidas a tal grado que resulta imposible sentarse en ellas, mismas que se requieren cambiar. Esperamos que las autoridades responsables del mantenimiento de parque y jardines las cambien pronto, pues el principal parque de la capital veracruzana se lo merece.

carlos_jorge27@hotmail.com


En la parte inferior del parque Juárez donde se encuentra el Paseo del Ayuntamiento, están localizadas cuatro estatuas que representan a las virtudes cardinales: la Templanza esculpida por el artista, con la figura de un hombre sujetando en sus manos a un caballo brioso. La Prudencia, se simboliza en una mujer que está jalando, con la mano derecha, la oreja de una persona deshonesta y desvergonzada. La Fortaleza es un hombre que mantiene en sus manos un mazo y detrás de él, a la altura de su rodilla izquierda, destaca la cabeza de un león, símbolo de fuerza y valor, y la Justicia es una figura femenina que sostiene en sus manos una espada de la que cuelgan unas cadenas a su costado izquierdo.

¿Qué nos están transmitiendo estas obras, cuando las contemplamos? Les expreso mis percepciones e interpretaciones, que pueden ser diferentes a la de usted.

De entrada es importante resaltar el significado que tiene el número de las virtudes: cuatro. Esta cifra en la sagrada Biblia es símbolo de todo lo que fue creado en el mundo, es el número de la creación. Es alegoría del cosmos y del mundo donde hay cuatro puntos cardinales y cuatro estaciones del año.

Tener la virtud de la Fortaleza significa vencer el temor, enfrentar la vida con actitud positiva caracterizada por el vigor y el gozo, ante las adversidades y contratiempos.

El ser justo es un valor que pocos seres humanos practican, sobre todo en nuestro país, pues brilla por su ausencia en todos los sectores y sistemas. Una persona justa es misericordiosa y amorosa con sus semejantes. Es ejemplar, honrado, honesto y virtuoso.

Ser prudente es actuar, en cada situación de la vida, de acuerdo a lo que es mejor con la finalidad de tomar la mejor decisión, de acuerdo a las circunstancias que se vivan. Es buscar hacer el mayor bien posible a los demás, como forma de vida. Hay que servir a los demás, no servirse de ellos.

Tener la virtud de la Templanza en este mundo globalizado y consumista que nos tocó vivir es importante. Una persona con temple es un ser humano moderado en todo su comportamiento, principalmente en el control de las pasiones las cuales están siempre sujetas a la razón.

Concluyo este artículo con un comentario a propósito del parque Juárez, en el primer nivel de ese hermoso espacio recreativo y turístico se encuentran dos o tres bancas de metal inservibles, completamente destruidas a tal grado que resulta imposible sentarse en ellas, mismas que se requieren cambiar. Esperamos que las autoridades responsables del mantenimiento de parque y jardines las cambien pronto, pues el principal parque de la capital veracruzana se lo merece.

carlos_jorge27@hotmail.com