/ domingo 20 de enero de 2019

Las protestas contra el Ayuntamiento de Xalapa

Para quienes siguen de cerca la información relacionada con el Ayuntamiento de Xalapa es evidente que el fin de la pasada administración estatal coincide con el cese de las manifestaciones de protesta contra el gobierno municipal.

El año pasado, cuando se llevó a efecto el proceso para renovar los poderes Ejecutivo y Legislativo de la entidad, fueron frecuentes las expresiones de descontento por temas como el de los baches o el de la recolección de basura.

El proceso electoral concluyó, pero esas expresiones de descontento se mantuvieron e incluso crecieron y ello se reflejó en las redes sociales, donde el gobierno de Pedro Hipólito Rodríguez fue muy criticado.

De igual manera, de forma frecuente ocurrieron manifestaciones de protesta contra el Ayuntamiento local y hasta bloqueos a los accesos de Palacio Municipal.

Durante 2018 fue evidente, además, la muy mala relación entre el Ayuntamiento de Xalapa y el gobierno de Miguel Ángel Yunes; en ese contexto, no faltó quien ubicara el origen de las protestas en las oficinas del Ejecutivo.

Todavía durante noviembre, último mes de Yunes Linares al frente del gobierno estatal, hubo tres manifestaciones contra el Ayuntamiento: la de la organización Antorcha Campesina, la de “Renovación Veracruzana”, que encabeza Arely Hernández Alvarado, quien por cierto pertenece al Consejo Social del Instituto Veracruzano de las Mujeres, donde ocupa la vocalía ante la Junta de Gobierno, y la de “organizaciones civiles”.

El caso de Hernández Alvarado llama particularmente la atención, dado que esa mujer, vinculada a una instancia del Gobierno del Estado como lo es el IVM, fue quien protagonizó la destrucción de la obra pública realizada por el Ayuntamiento en la colonia 21 de Marzo, lo que fue denunciado en su momento por los representantes de la instancia municipal.

El punto es que al concluir la administración de Yunes Linares, las protestas contra el Ayuntamiento de Xalapa han bajado de tono e intensidad; durante diciembre, por ejemplo, cuando ya había terminado el pasado gobierno estatal, no se registró una sola protesta en Palacio Municipal, y lo mismo se observa durante los primeros 20 días del año.

Por otro lado, con los trabajos de bacheo y pavimentación, como el realizado en el Circuito Presidentes, a la altura de la USBI, el gobierno local prácticamente desactivó las críticas por el estado de las calles; por supuesto, falta que atienda algunos puntos de la ciudad, como la transitada avenida Arco Sur, por ejemplo.

En el tema de la recolección de basura ocurre algo muy parecido: el actual Ayuntamiento recibió pocas unidades de limpia pública en buen estado y un problema derivado de la falta de un lugar apropiado para el depósito de los desechos urbanos, por lo que durante el primer año hubo deficiencias graves en ese rubro. Sin embargo, 2019 se espera que sea diferente, dada la fuerte inversión canalizada: más de 37.5 millones de pesos para 16 camiones recolectores, 4 compactadoras, 35 contenedores de separación, 13 contenedores isla de reciclaje, una prensa compactadora hidráulica y una barredora.

Así, todo apunta a que con el cambio en el Gobierno del Estado, las cosas pintan mucho mejor para el Ayuntamiento de Xalapa, cuyas autoridades enfrentaron en 2018 una fuerte campaña presuntamente orquestada por la pasada administración estatal con la finalidad de generar desgaste y desprestigio a un gobierno emanado de Morena, partido que ya se perfilaba como el principal adversario del proyecto de Yunes Linares.

@luisromero85

Para quienes siguen de cerca la información relacionada con el Ayuntamiento de Xalapa es evidente que el fin de la pasada administración estatal coincide con el cese de las manifestaciones de protesta contra el gobierno municipal.

El año pasado, cuando se llevó a efecto el proceso para renovar los poderes Ejecutivo y Legislativo de la entidad, fueron frecuentes las expresiones de descontento por temas como el de los baches o el de la recolección de basura.

El proceso electoral concluyó, pero esas expresiones de descontento se mantuvieron e incluso crecieron y ello se reflejó en las redes sociales, donde el gobierno de Pedro Hipólito Rodríguez fue muy criticado.

De igual manera, de forma frecuente ocurrieron manifestaciones de protesta contra el Ayuntamiento local y hasta bloqueos a los accesos de Palacio Municipal.

Durante 2018 fue evidente, además, la muy mala relación entre el Ayuntamiento de Xalapa y el gobierno de Miguel Ángel Yunes; en ese contexto, no faltó quien ubicara el origen de las protestas en las oficinas del Ejecutivo.

Todavía durante noviembre, último mes de Yunes Linares al frente del gobierno estatal, hubo tres manifestaciones contra el Ayuntamiento: la de la organización Antorcha Campesina, la de “Renovación Veracruzana”, que encabeza Arely Hernández Alvarado, quien por cierto pertenece al Consejo Social del Instituto Veracruzano de las Mujeres, donde ocupa la vocalía ante la Junta de Gobierno, y la de “organizaciones civiles”.

El caso de Hernández Alvarado llama particularmente la atención, dado que esa mujer, vinculada a una instancia del Gobierno del Estado como lo es el IVM, fue quien protagonizó la destrucción de la obra pública realizada por el Ayuntamiento en la colonia 21 de Marzo, lo que fue denunciado en su momento por los representantes de la instancia municipal.

El punto es que al concluir la administración de Yunes Linares, las protestas contra el Ayuntamiento de Xalapa han bajado de tono e intensidad; durante diciembre, por ejemplo, cuando ya había terminado el pasado gobierno estatal, no se registró una sola protesta en Palacio Municipal, y lo mismo se observa durante los primeros 20 días del año.

Por otro lado, con los trabajos de bacheo y pavimentación, como el realizado en el Circuito Presidentes, a la altura de la USBI, el gobierno local prácticamente desactivó las críticas por el estado de las calles; por supuesto, falta que atienda algunos puntos de la ciudad, como la transitada avenida Arco Sur, por ejemplo.

En el tema de la recolección de basura ocurre algo muy parecido: el actual Ayuntamiento recibió pocas unidades de limpia pública en buen estado y un problema derivado de la falta de un lugar apropiado para el depósito de los desechos urbanos, por lo que durante el primer año hubo deficiencias graves en ese rubro. Sin embargo, 2019 se espera que sea diferente, dada la fuerte inversión canalizada: más de 37.5 millones de pesos para 16 camiones recolectores, 4 compactadoras, 35 contenedores de separación, 13 contenedores isla de reciclaje, una prensa compactadora hidráulica y una barredora.

Así, todo apunta a que con el cambio en el Gobierno del Estado, las cosas pintan mucho mejor para el Ayuntamiento de Xalapa, cuyas autoridades enfrentaron en 2018 una fuerte campaña presuntamente orquestada por la pasada administración estatal con la finalidad de generar desgaste y desprestigio a un gobierno emanado de Morena, partido que ya se perfilaba como el principal adversario del proyecto de Yunes Linares.

@luisromero85