/ domingo 5 de enero de 2020

Los motivos de Marlon

A menos de que la intención sea enterrar al PRI o la justificación para entregar al PAN lo que quede de él en la elección que viene o en 2024 a Morena, no se entiende el juego del presidente estatal del tricolor, Marlon Ramírez Marín, cuando quiere intimidar a cuatro de sus más connotados cuadros políticos con expulsarlos de las filas del tricolor, como demostración de poder y tratando de recomponer su liderazgo, más cuestionado que reconocido.

El mensaje llevaría dedicatoria al diputado federal Héctor Yunes Landa, exsenador y excandidato priista distanciado de los Yunes azules con quienes el inquilino del edificio de Francisco Moreno mantiene afinidad y hasta probables acuerdos, y no hacia los que mandó a balconear con filtraciones en redes sociales a través de Raúl Ramos Vicarte, presidente de la Comisión de Justicia Partidaria del CDE del PRI, señalándolos de participar en la asamblea de un nuevo proyecto político; los aludidos, todos, son de amplia trayectoria priista y pertenecen al círculo cercano de Héctor: Alicia González Cerecedo, Édgar Díaz Fuentes, Edmundo Martínez Zaleta y Jorge Moreno Salinas, siendo este último quien aclaró paradas: es priista desde hace 40 años y seguirá siéndolo. El caso estaría relacionado a la organización política Todos por Veracruz, que se encuentra en actividades de afiliación y asambleas para obtener su registro en el estado, a la que muchos vinculan a Yunes Landa y advierten que ésta, junto con Alianza Generacional del propio exsenador, otras asociaciones y partidos que se adhieran, serían la plataforma de HYL en un frente amplio para competir nuevamente en 2024 por la gubernatura. Ese sería el punto relevante de todo este entramado, la única duda es si la escaramuza es por iniciativa del exsubsecretario de Gobierno en tiempos de Duarte o si tiene el aval del líder nacional Alejandro Moreno Cárdenas que, a contrapelo, ha privilegiado el diálogo como camino para reagrupar, mantener lo que le queda de militancia y recuperar algo de lo perdido. Vale preguntar si Ramírez mide las consecuencias de sus actos por la repercusión de su bravata al interior del priismo, o si solamente se trata de presionar para negociar alguna concesión política o de un proyecto distinto que comienza a perfilar tratando de debilitar a sus adversarios internos. Todo es posible. Habrá que esperar en qué termina este episodio que, al igual que en el caso de su vecino panista, causa división en sus filas.

CABALLO BLANCO Y LA VISITA DE AMLO

El viernes, dos días antes de la gira del presidente Andrés Manuel López Obrador al estado, se dio a conocer la detención del líder del CJNG “El 50”, realizado por la Marina, presunto autor intelectual del ataque al bar ‘Caballo Blanco’ de Coatzacoalcos, donde murieron 32 personas, cometido en agosto del año pasado. Es una buena noticia, aunque faltan los autores materiales, y por lo que se advierte, no puede ser sólo coincidencia que ocurra en la víspera de la visita presidencial, de manera que habrá que solicitar públicamente al Ejecutivo federal que su presencia sea más frecuente a la entidad para que se resuelvan los pendientes.

LAS ASUNTOS PERSONALES DE DUARTE

Las visitas de Xóchitl Tress Rodríguez a Javier Duarte en el reclusorio Norte debiera ser irrelevante, cuando lo importante es que el exgobernador de Veracruz seguirá preso, al negársele la libertad condicional o prisión domiciliaria, como solicitaban sus abogados. Es un show. La sentencia de nueve años de cárcel por delitos de asociación delictuosa y lavado de dinero es una pena mínima. Además, de acuerdo con la ley, al cumplir la mitad de su condena, en 2021 o incluso antes, ya puede obtener el beneficio de la libertad condicional.

Escriba a opedro2006@gmail.com

A menos de que la intención sea enterrar al PRI o la justificación para entregar al PAN lo que quede de él en la elección que viene o en 2024 a Morena, no se entiende el juego del presidente estatal del tricolor, Marlon Ramírez Marín, cuando quiere intimidar a cuatro de sus más connotados cuadros políticos con expulsarlos de las filas del tricolor, como demostración de poder y tratando de recomponer su liderazgo, más cuestionado que reconocido.

El mensaje llevaría dedicatoria al diputado federal Héctor Yunes Landa, exsenador y excandidato priista distanciado de los Yunes azules con quienes el inquilino del edificio de Francisco Moreno mantiene afinidad y hasta probables acuerdos, y no hacia los que mandó a balconear con filtraciones en redes sociales a través de Raúl Ramos Vicarte, presidente de la Comisión de Justicia Partidaria del CDE del PRI, señalándolos de participar en la asamblea de un nuevo proyecto político; los aludidos, todos, son de amplia trayectoria priista y pertenecen al círculo cercano de Héctor: Alicia González Cerecedo, Édgar Díaz Fuentes, Edmundo Martínez Zaleta y Jorge Moreno Salinas, siendo este último quien aclaró paradas: es priista desde hace 40 años y seguirá siéndolo. El caso estaría relacionado a la organización política Todos por Veracruz, que se encuentra en actividades de afiliación y asambleas para obtener su registro en el estado, a la que muchos vinculan a Yunes Landa y advierten que ésta, junto con Alianza Generacional del propio exsenador, otras asociaciones y partidos que se adhieran, serían la plataforma de HYL en un frente amplio para competir nuevamente en 2024 por la gubernatura. Ese sería el punto relevante de todo este entramado, la única duda es si la escaramuza es por iniciativa del exsubsecretario de Gobierno en tiempos de Duarte o si tiene el aval del líder nacional Alejandro Moreno Cárdenas que, a contrapelo, ha privilegiado el diálogo como camino para reagrupar, mantener lo que le queda de militancia y recuperar algo de lo perdido. Vale preguntar si Ramírez mide las consecuencias de sus actos por la repercusión de su bravata al interior del priismo, o si solamente se trata de presionar para negociar alguna concesión política o de un proyecto distinto que comienza a perfilar tratando de debilitar a sus adversarios internos. Todo es posible. Habrá que esperar en qué termina este episodio que, al igual que en el caso de su vecino panista, causa división en sus filas.

CABALLO BLANCO Y LA VISITA DE AMLO

El viernes, dos días antes de la gira del presidente Andrés Manuel López Obrador al estado, se dio a conocer la detención del líder del CJNG “El 50”, realizado por la Marina, presunto autor intelectual del ataque al bar ‘Caballo Blanco’ de Coatzacoalcos, donde murieron 32 personas, cometido en agosto del año pasado. Es una buena noticia, aunque faltan los autores materiales, y por lo que se advierte, no puede ser sólo coincidencia que ocurra en la víspera de la visita presidencial, de manera que habrá que solicitar públicamente al Ejecutivo federal que su presencia sea más frecuente a la entidad para que se resuelvan los pendientes.

LAS ASUNTOS PERSONALES DE DUARTE

Las visitas de Xóchitl Tress Rodríguez a Javier Duarte en el reclusorio Norte debiera ser irrelevante, cuando lo importante es que el exgobernador de Veracruz seguirá preso, al negársele la libertad condicional o prisión domiciliaria, como solicitaban sus abogados. Es un show. La sentencia de nueve años de cárcel por delitos de asociación delictuosa y lavado de dinero es una pena mínima. Además, de acuerdo con la ley, al cumplir la mitad de su condena, en 2021 o incluso antes, ya puede obtener el beneficio de la libertad condicional.

Escriba a opedro2006@gmail.com