Ahora que ha transcurrido más de un mes de campaña autorizada por el Instituto Nacional Electoral para la candidata y los candidatos a la presidencia de la República, las redes sociales, los diversos medios de comunicación en cada determinado tiempo hablan o comentan sobre los punteros, las encuestas, los recorridos, las multitudes, las ausencias, los chapulines de los partidos, entre otros, sin embargo, los caricaturistas tienen una competencia más, los “memes”.
Noticiarios matutinos, vespertinos, nocturnos, periódicos nacionales y estatales hacen alusión a los presidenciables. Los nombres de ellos son Margarita Zavala, Pepe Meade, Ricardo Anaya, Obrador y Jaime Rodríguez. Cada uno trae un historial y un perfil propio. Dos expriistas, dos panistas y un candidato ciudadano avalado por el Partido Revolucionario Institucional, el Partido Verde Ecologista de México y el Partido Nueva Alianza. Unos con mayor ventaja para moverse en el territorio nacional, sobre todo donde tienen gobiernos locales de los partidos que los abanderan, en cambio otros buscan a sus cuates o amistades para acercarse. A los independientes se les complica más porque no hay estructuras, la van construyendo paso a paso.
Margarita Zalava es conservadora, formada en el PAN, esposa del expresidente Felipe Calderón. A Calderón se le recuerda como el presidente que entró a San Lázaro de una manera muy incómoda, hizo su papel y la ciudadanía mexicana volvió a darle la oportunidad al PRI. Jaime Rodríguez, conocido como el Bronco, gobernador con licencia de Nuevo León, exdirigente nacional de la Vanguardia Juvenil Agrarista de la CNC, entrón y con discursos polémicos.
Jose Antonio Meade trabajó en el gobierno federal durante dos sexenios, tiene experiencia en el servicio público y privado. Pepe Meade es reservado, está preparado y es capaz de darle un giro justo para mejorar la situación del país. Ricardo Anaya, joven preparado en oratoria y con cierto personaje atrás de él que lo asesora bien, sin embargo, es un joven impulsivo. Obrador desde que fue jefe de Gobierno en el Distrito Federal, hoy Ciudad de México; se promocionó en los medios, al salir buscó la presidencia, perdió y desde entonces ha seguido promoviéndose para ser presidente, hasta crear su propio partido con sentido religioso, haciendo alusión a la Morena de Tepeyac. Obrador es su partido, él se elige a sí mismo y ha sido menos explosivo que en los procesos electorales pasados. Su carácter y su discurso lo delatan. Todos los presidenciables tienen militantes y simpatizantes, la conducción adecuada sería por medio del respeto, lo cual es lo que menos practican muchos de sus seguidores.
La sociedad no debe reaccionar por el impulso, sino bajo un análisis, reflexión y crítica constructiva hacia los personajes que aspiran y buscan ser la presidenta o el presidente de este gran país. Los problemas de ayer se parecen a los problemas de ahora, los políticos de ahora pretenden aparecerse a los políticos de ayer. Para gobernar un país se requieren muchas manos y en el gabinete como secretarios o subsecretarios pueden llegar personas sin sensibilidad para servir a los mexicanos. Sin embargo, es un derecho como ciudadanos ejerzamos nuestro voto. El primero de julio va ganar el mejor porque México lo merece.
Paxkatkatsini (Gracias)
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