/ jueves 23 de diciembre de 2021

Los tres adversarios

Veracruz está convertido en un campo de batalla donde la 4T y tres de sus más duros adversarios dirimen sus diferencias políticas:

Miguel Ángel Yunes Linares, ex gobernador panista y declarado enemigo del actual régimen; Ricardo Monreal Ávila, presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Senado, aspirante a la presidencia de la República contra la voluntad presidencial, y Dante Delgado Rannauro, senador y ex aliado del actual Ejecutivo federal de quien se separó para atrincherarse en Movimiento Ciudadano (MC), partido que fundó hace 24 años y lo ha llevado a adquirir una impresionante fuerza electoral y política en el país. Son distintas historias de poder; Yunes, de Gobernador, buscó descarrilar al candidato AMLO para evitar su llegada a la Presidencia, lo insultó y lo llamó “loco”; su primogénito perdió la gubernatura, que quiso heredar, frente a un Cuitláhuac García Jiménez montado en la ola de popularidad de Andrés Manuel. Ante esa realidad, sabía lo que le esperaba; sin embargo, a su salida, advirtió: “la lucha sigue”, y ahí está, herido y oculto, pero no muerto políticamente. Dante, de fuerte temperamento, rompió relación política con AMLO, y esa discrepancia ha subido de tono; tal situación, y la detención y encarcelamiento del ex diputado federal José Manuel del Río Virgen, actual secretario técnico de la Jucopo del Senado de la República, acusado de la autoría intelectual del asesinato de Remigio Tovar, quien fuera candidato a la presidencia municipal de Cazones de Herrera, detonó abiertamente esa lucha. Viejo militante en el MC, la detención de Del Río Virgen resultó muy extraña, apenas unos días después de que el senador zacatecano denunció abusos de poder del gobierno veracruzano cometidos con el delito de “ultrajes a la autoridad”, muy cuestionado en amplios sectores de la sociedad, por excesivo, que se aplica a ciudadanos inocentes, políticos opositores, periodistas y hasta funcionarios, y la presión ejercida por este político para liberar a seis jóvenes acusados de dicho crimen. Sobre este delito, hay quienes afirman que hay mar de fondo, y la hipótesis es que Veracruz fue tomado como laboratorio para medir la reacción social de su aplicación, de lo cual depende extenderlo a los demás estados del país. Eso habría provocado que Monreal hubiera pedido formalmente su derogación, pero la respuesta fue la detención del colaborador del presidente de la Jucopo, y militante de Movimiento Ciudadano. Ahora, se ha formado una Comisión Especial del Senado para investigar casos de abusos de autoridad que va a encabezar, como presidente, Dante y el panista Julen Rementría del Puerto, de la que formarán parte Beatriz Paredes Rangel del PRI, Raúl Bolaños del PVEM, Miguel Ángel Mancera del PRD y un senador del PES. Ellos estarán en Veracruz a recabar información con afectados y autoridades, y después de esa tarea, seguramente vendrá una solicitud de desaparición de poderes en el estado de Veracruz. Esa posibilidad es real y es inminente que la enfrente el mandatario veracruzano, quien ayer fue respaldado por el Presidente de la República en su conferencia mañanera, algo que se repite frecuentemente, pero que no significa un blindaje total para García Jiménez. Son tres pesos completos los que enfrenta, y de ellos, en este momento de menor riesgo es Miguel Ángel Yunes, aunque ya se sabe los alcances de este político de duro cuero, a quien la 4T no puede vencer, como lo prueban la disputa por la Alcaldía de Veracruz entre Morena y el PAN de los Yunes que los aventaja y el Comité Directivo Estatal azul, que también ganó esa familia en las urnas a Joaquín Ronsendo Guzmán Avilés y al propio gobierno veracruzano. Complicado escenario.

opedro2006@gmail.com

Veracruz está convertido en un campo de batalla donde la 4T y tres de sus más duros adversarios dirimen sus diferencias políticas:

Miguel Ángel Yunes Linares, ex gobernador panista y declarado enemigo del actual régimen; Ricardo Monreal Ávila, presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Senado, aspirante a la presidencia de la República contra la voluntad presidencial, y Dante Delgado Rannauro, senador y ex aliado del actual Ejecutivo federal de quien se separó para atrincherarse en Movimiento Ciudadano (MC), partido que fundó hace 24 años y lo ha llevado a adquirir una impresionante fuerza electoral y política en el país. Son distintas historias de poder; Yunes, de Gobernador, buscó descarrilar al candidato AMLO para evitar su llegada a la Presidencia, lo insultó y lo llamó “loco”; su primogénito perdió la gubernatura, que quiso heredar, frente a un Cuitláhuac García Jiménez montado en la ola de popularidad de Andrés Manuel. Ante esa realidad, sabía lo que le esperaba; sin embargo, a su salida, advirtió: “la lucha sigue”, y ahí está, herido y oculto, pero no muerto políticamente. Dante, de fuerte temperamento, rompió relación política con AMLO, y esa discrepancia ha subido de tono; tal situación, y la detención y encarcelamiento del ex diputado federal José Manuel del Río Virgen, actual secretario técnico de la Jucopo del Senado de la República, acusado de la autoría intelectual del asesinato de Remigio Tovar, quien fuera candidato a la presidencia municipal de Cazones de Herrera, detonó abiertamente esa lucha. Viejo militante en el MC, la detención de Del Río Virgen resultó muy extraña, apenas unos días después de que el senador zacatecano denunció abusos de poder del gobierno veracruzano cometidos con el delito de “ultrajes a la autoridad”, muy cuestionado en amplios sectores de la sociedad, por excesivo, que se aplica a ciudadanos inocentes, políticos opositores, periodistas y hasta funcionarios, y la presión ejercida por este político para liberar a seis jóvenes acusados de dicho crimen. Sobre este delito, hay quienes afirman que hay mar de fondo, y la hipótesis es que Veracruz fue tomado como laboratorio para medir la reacción social de su aplicación, de lo cual depende extenderlo a los demás estados del país. Eso habría provocado que Monreal hubiera pedido formalmente su derogación, pero la respuesta fue la detención del colaborador del presidente de la Jucopo, y militante de Movimiento Ciudadano. Ahora, se ha formado una Comisión Especial del Senado para investigar casos de abusos de autoridad que va a encabezar, como presidente, Dante y el panista Julen Rementría del Puerto, de la que formarán parte Beatriz Paredes Rangel del PRI, Raúl Bolaños del PVEM, Miguel Ángel Mancera del PRD y un senador del PES. Ellos estarán en Veracruz a recabar información con afectados y autoridades, y después de esa tarea, seguramente vendrá una solicitud de desaparición de poderes en el estado de Veracruz. Esa posibilidad es real y es inminente que la enfrente el mandatario veracruzano, quien ayer fue respaldado por el Presidente de la República en su conferencia mañanera, algo que se repite frecuentemente, pero que no significa un blindaje total para García Jiménez. Son tres pesos completos los que enfrenta, y de ellos, en este momento de menor riesgo es Miguel Ángel Yunes, aunque ya se sabe los alcances de este político de duro cuero, a quien la 4T no puede vencer, como lo prueban la disputa por la Alcaldía de Veracruz entre Morena y el PAN de los Yunes que los aventaja y el Comité Directivo Estatal azul, que también ganó esa familia en las urnas a Joaquín Ronsendo Guzmán Avilés y al propio gobierno veracruzano. Complicado escenario.

opedro2006@gmail.com