Polémico como lo ha sido desde que arribó a su cargo, Eric Patrocinio Cisneros acaba de protagonizar un hecho que ha puesto en evidencia a la administración estatal.
Son varias las aristas de las que se habla a raíz de que se dio a conocer que el secretario de Gobierno enfermó de Coronavirus.
Una es que se trató de un simple distractor, pues hay quienes cuestionan que el propio funcionario difundiera su fotografía en la que se le ve sonriente en una cama de un hospital privado.
Es su estancia, precisamente, en un nosocomio de paga en la zona conurbada Veracruz-Boca del Río, lo que más le han criticado a Éric Patrocinio, pues mientras él, como funcionario de gobierno recibe ese tipo de atención, miles de veracruzanos sufren porque no pueden acceder a un hospital oficial.
Como ejemplo está el caso del motociclista que trabajaba como repartidor y falleció luego de un accidente de tránsito.
Sus compañeros protestaron bloqueando la céntrica calle de Enríquez, frente al Palacio de Gobierno, porque la familia del repartidor recorrió seis hospitales y ninguno lo admitió.
No hubo quien atendiera al joven accidentado para curarle sus heridas y como consecuencia de eso murió. En cambio el secretario, después de haber sido atendido con prontitud en el Centro de Alta Especialidad de Xalapa, fue llevado a un hospital privado.
Es aquí donde se han escuchado las voces inconformes por la diferencia de trato, pues mientras un alto funcionario recibe atención pronta y de primera, un trabajador muere porque ni siquiera lo atienden.
Mencionan además la diferencia entre Cisneros Burgos y el director del IMSS, Zoé Robledo, quien también se contagió de Covid, con el detalle de que él fue atendido en una unidad médica del mismo seguro social.
Esta diferencia de trato hacia los veracruzanos explicaría en parte por qué muchos fallecen, en unos casos por la falta de atención y en otros porque aún estando internados en un hospital no reciben los medicamentos.
Son bastante conocidas las protestas de derechohabientes por el desabasto de medicamentos o por la falta de equipo médico especializado para atender a pacientes.
Muchos enfermos y sus familiares sufren esa realidad y se decepcionan y se enojan cuando ven que a un funcionario le dan trato preferencial y de primera.
LOS NUEVOS PARTIDOS ESTÁN EN RIESGO
Con Morena sería suficiente para que a los cuatro nuevos partidos políticos locales se les complique alcanzar el mínimo de votos que les permitiría continuar vigentes.
No la tienen nada fácil Cinthya Lobato Calderón con Unidad Ciudadana, Todos Por Veracruz con Jesús Vázquez González, Francisco Garrido con Podemos y Antonio Luna con Bienestar y Justicia Social.
A pesar de que algunos de ellos sobresalgan por su activismo de poco les va a servir, pues si en Morena tienen una competencia, también deben agregar a la contienda venidera los otros partidos nacionales, los que ya existen y los que acaban de crearse.
Es decir, lo previsible es que el voto se pulverice y que la mayoría de los partidos reciban unos cuantos sufragios, de tal forma que algunos no alcanzarán ni el tres por ciento. Ya se verá.
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