/ viernes 10 de enero de 2020

Muerte a las brujas

La cacería de brujas era un fenómeno característico en Europa central en los siglos XVI, XVII.

Nueve millones de mujeres fueron víctimas de genocidio con crueles torturas y espantosas muertes, acusadas de brujería estas mujeres no se les reconoce por su sabiduría, conocimiento, independencia o por ayudar a quien se los pedía, si no por un icono de maldad y terror con historias narradas de generación en generación.

Por un rumor era suficiente para ser señalada y llevada a la hoguera a cualquier mujer, solo bastaba que la vecina aconsejara a su hijo o soltara su lengua viperina o porque dio a luz un hijo muerto y lo exagerado, porque la cruz se le rompió, o bajara la vista cuando se hablaba de brujas, aquellas mujeres que estudiaban las yerbas para hacer pomadas curativas, brebajes, curar a las personas y niños, también se encargaban de la natalidad y de practicar los abortos, estas mujeres llamadas brujas por el pueblo y la iglesia, fueron acusadas y procesadas por brujería y herejía, cuando una mujer era acusada por ese delito, era muy difícil que fuera absuelta ya que en la tortura morían y a las que lograban sobrevivir, las obligaban a decir que eran brujas y terminaban en la hoguera.

Aquellas mujeres que ejercían el papel de lideresas espirituales, eran ejecutadas en público, esto con el fin de intimidar a la sociedad, las victimas idóneas eran las mujeres viudas, ancianas, sin marido o sin familia, era acusadas de brujería para quedarse con sus propiedades, así lo señala la investigadora Carol Karlsen sobre los procesos en Inglaterra, también eran acusadas por otras mujeres cuando se sentían disgustadas o celosas ya que la juventud y belleza eran un peligro para las no agraciadas, por envidia o celos las acusaban y señalaban de brujería, si una mujer se defendía de un hombre las propias mujeres la consideraban peligrosa y la acusaban de brujería.

También se les atribuía de tener pacto con el diablo, se creía que el diablo las marcaba en el cuerpo, al ser detenida les hacían una inspección para poder ver que no tuvieran marca alguna, de lo contrario si había una cicatriz, lunar o algo que no les gustara, eran sospechosas, también decían que el pacto consistía que les daban poderes sobre naturales, estos eran maléficos además de manejar los elementos de la naturaleza, así como dar muerte a niños y canibalismo, pero lo más risorio es que decían que tenían metamorfosis y que volaban en escobas.

El caso más sonado es el de las brujas de Salem y las brujas de Zugarramurdi, donde murieran cientos de mujeres en la hoguera señaladas por practicar la brujería.

En 1682 se pone fin a las hogueras y terminan los procesos de brujería.

lexfemme.12@hotmail.com

La cacería de brujas era un fenómeno característico en Europa central en los siglos XVI, XVII.

Nueve millones de mujeres fueron víctimas de genocidio con crueles torturas y espantosas muertes, acusadas de brujería estas mujeres no se les reconoce por su sabiduría, conocimiento, independencia o por ayudar a quien se los pedía, si no por un icono de maldad y terror con historias narradas de generación en generación.

Por un rumor era suficiente para ser señalada y llevada a la hoguera a cualquier mujer, solo bastaba que la vecina aconsejara a su hijo o soltara su lengua viperina o porque dio a luz un hijo muerto y lo exagerado, porque la cruz se le rompió, o bajara la vista cuando se hablaba de brujas, aquellas mujeres que estudiaban las yerbas para hacer pomadas curativas, brebajes, curar a las personas y niños, también se encargaban de la natalidad y de practicar los abortos, estas mujeres llamadas brujas por el pueblo y la iglesia, fueron acusadas y procesadas por brujería y herejía, cuando una mujer era acusada por ese delito, era muy difícil que fuera absuelta ya que en la tortura morían y a las que lograban sobrevivir, las obligaban a decir que eran brujas y terminaban en la hoguera.

Aquellas mujeres que ejercían el papel de lideresas espirituales, eran ejecutadas en público, esto con el fin de intimidar a la sociedad, las victimas idóneas eran las mujeres viudas, ancianas, sin marido o sin familia, era acusadas de brujería para quedarse con sus propiedades, así lo señala la investigadora Carol Karlsen sobre los procesos en Inglaterra, también eran acusadas por otras mujeres cuando se sentían disgustadas o celosas ya que la juventud y belleza eran un peligro para las no agraciadas, por envidia o celos las acusaban y señalaban de brujería, si una mujer se defendía de un hombre las propias mujeres la consideraban peligrosa y la acusaban de brujería.

También se les atribuía de tener pacto con el diablo, se creía que el diablo las marcaba en el cuerpo, al ser detenida les hacían una inspección para poder ver que no tuvieran marca alguna, de lo contrario si había una cicatriz, lunar o algo que no les gustara, eran sospechosas, también decían que el pacto consistía que les daban poderes sobre naturales, estos eran maléficos además de manejar los elementos de la naturaleza, así como dar muerte a niños y canibalismo, pero lo más risorio es que decían que tenían metamorfosis y que volaban en escobas.

El caso más sonado es el de las brujas de Salem y las brujas de Zugarramurdi, donde murieran cientos de mujeres en la hoguera señaladas por practicar la brujería.

En 1682 se pone fin a las hogueras y terminan los procesos de brujería.

lexfemme.12@hotmail.com