/ martes 24 de agosto de 2021

Pasividad e insensibilidad

El presidente Andrés Manuel López Obrador acudió ayer a la ceremonia conmemorativa de los 200 años de la firma de los Tratados de Córdoba en esa ciudad...

De ahí se trasladó a Xalapa --donde las torrenciales lluvias causaron un deslave que sepultó a seis miembros de una familia que no fue traslada por autoridades municipales o estatales a un albergue a pesar de habitar en una zona de alto riesgo--, para encabezar una reunión del plan de apoyo a los damnificados de la zona devastada del norte de Veracruz, de Tecolutla a Álamo y, en especial, Papantla y Poza Rica, donde los pobladores perdieron su patrimonio por el destructivo huracán Grace, zona que el Ejecutivo federal no caminará, pero sobrevolará en helicóptero para constatar la calamidad de esos miles de veracruzanos que han clamado ayuda en el desierto, mientras el gobernador Cuitláhuac García Jiménez, cuestionado por su pasividad, ha posteado fotos desde su oficina “atendiendo” los apoyos a la población, otra “trabajando” con una pala en mano sacando agua estancada en una colonia; una más en Tuxpan, en una reunión y mensaje desde el salón de un hotel que abandonó hora y media para regresar a su cómoda silla de Palacio de Gobierno, y la última con machete en mano cortando la rama de un árbol . Vamos, habría acaparado reflectores con solicitar que los víveres de “ayuda humanitaria” a Cuba y Haití fueran repartidos a los veracruzanos que más lo necesitan. De ahí que desde el lunes se hayan viralizado en redes sociales fotos y videos de esas unidades de transporte con toneladas de carga de alimentos listas para descargarse y subirlas a los barcos de la Armada de México para llevarlos a esos países caribeños, lo que coloquialmente ha sido calificado como ejemplo de que el gobierno de México “es candil de la calle y oscuridad de su casa”. Todavía peor, el diputado local electo por Morena, Fernando Arteaga Aponte, y el senador del mismo partido, Martí Batres, se aventaron la puntada de instalar Centros de Acopio de Ayuda Humanitaria en los zócalos de Veracruz y la ciudad de México, solicitando la solidaridad de la población para los damnificados, en lugar de pedir al gobierno federal cancelar el envío de víveres a países extranjeros para llevar esa ayuda a los veracruzanos; o, en todo caso, solicitar a Morena, a sus correligionarios y a los funcionarios de dicha organización política en el gobierno federal, del estado y municipios, donar su sueldo, o un día salarial, para crear un fondo de apoyo solidario. Insensibilidad en todos ellos, a los que no parece importarles el dolor ajeno. Ayer se informó que se amplía a 58 municipios la solicitud de declaratoria de desastre, lo que da idea del tamaño de la tragedia sufrida por el impacto del meteoro.

Por cierto, esa “mea culpa” de la secretaría de Protección Civil del estado, Guadalupe Osorno, de no dimensionar la magnitud del fenómeno natural del fin de semana y ni la lluvia tan intensa como la que se presentó y ocasionó el deslave y muerte de seis personas en Xalapa, a quien por lo menos debería sancionarse con su cese.

opedro2006@gmail.com

El presidente Andrés Manuel López Obrador acudió ayer a la ceremonia conmemorativa de los 200 años de la firma de los Tratados de Córdoba en esa ciudad...

De ahí se trasladó a Xalapa --donde las torrenciales lluvias causaron un deslave que sepultó a seis miembros de una familia que no fue traslada por autoridades municipales o estatales a un albergue a pesar de habitar en una zona de alto riesgo--, para encabezar una reunión del plan de apoyo a los damnificados de la zona devastada del norte de Veracruz, de Tecolutla a Álamo y, en especial, Papantla y Poza Rica, donde los pobladores perdieron su patrimonio por el destructivo huracán Grace, zona que el Ejecutivo federal no caminará, pero sobrevolará en helicóptero para constatar la calamidad de esos miles de veracruzanos que han clamado ayuda en el desierto, mientras el gobernador Cuitláhuac García Jiménez, cuestionado por su pasividad, ha posteado fotos desde su oficina “atendiendo” los apoyos a la población, otra “trabajando” con una pala en mano sacando agua estancada en una colonia; una más en Tuxpan, en una reunión y mensaje desde el salón de un hotel que abandonó hora y media para regresar a su cómoda silla de Palacio de Gobierno, y la última con machete en mano cortando la rama de un árbol . Vamos, habría acaparado reflectores con solicitar que los víveres de “ayuda humanitaria” a Cuba y Haití fueran repartidos a los veracruzanos que más lo necesitan. De ahí que desde el lunes se hayan viralizado en redes sociales fotos y videos de esas unidades de transporte con toneladas de carga de alimentos listas para descargarse y subirlas a los barcos de la Armada de México para llevarlos a esos países caribeños, lo que coloquialmente ha sido calificado como ejemplo de que el gobierno de México “es candil de la calle y oscuridad de su casa”. Todavía peor, el diputado local electo por Morena, Fernando Arteaga Aponte, y el senador del mismo partido, Martí Batres, se aventaron la puntada de instalar Centros de Acopio de Ayuda Humanitaria en los zócalos de Veracruz y la ciudad de México, solicitando la solidaridad de la población para los damnificados, en lugar de pedir al gobierno federal cancelar el envío de víveres a países extranjeros para llevar esa ayuda a los veracruzanos; o, en todo caso, solicitar a Morena, a sus correligionarios y a los funcionarios de dicha organización política en el gobierno federal, del estado y municipios, donar su sueldo, o un día salarial, para crear un fondo de apoyo solidario. Insensibilidad en todos ellos, a los que no parece importarles el dolor ajeno. Ayer se informó que se amplía a 58 municipios la solicitud de declaratoria de desastre, lo que da idea del tamaño de la tragedia sufrida por el impacto del meteoro.

Por cierto, esa “mea culpa” de la secretaría de Protección Civil del estado, Guadalupe Osorno, de no dimensionar la magnitud del fenómeno natural del fin de semana y ni la lluvia tan intensa como la que se presentó y ocasionó el deslave y muerte de seis personas en Xalapa, a quien por lo menos debería sancionarse con su cese.

opedro2006@gmail.com