Los analistas que conocen del marketing en las redes sociales, afirman que su penetración a todas las clases sociales está garantizado y que en muchos casos son orientadoras para los usuarios, ayudándolos a descubrir formas para vivir mejor, y en otras circunstancias también sirven para desorientar y manipular de manera tendenciosa y de mala fe a los nuevos usuarios.
La verdad es que las redes sociales son una influencia definitiva para obtener resultados en el quehacer político de estos tiempos; habría que agregar que en muchos casos la intención de los expertos en el manejo de las redes, los convierte en manipuladores de esta modernidad que ya enferma de manera principal a la juventud.
Por otro lado, quienes se inician en el uso del internet son presa fácil de conducir u orientar para los experimentados bots, trolles, pejezombies que ahora han sido descubiertos por la publicación fake news (que parecen noticias verdaderas) alarmantes y resultan ser mentiras con las que mucha gente se queda.
En su inicio las redes sociales tuvieron el propósito de construir un sitio en línea, donde los agregados eran gente con intereses comunes, cuyo propósito adicional era mantener comentarios, opiniones, agendas de actividades y una comunicación a distancia, personalizada, divertida y útil.
Así surgieron MySpace, Gathers, Facebook, Black Planers, Eons, LinkedIn y cientos más; además de los llamados “agregadores de reputación” Google, Yahoo, Ask y Live convertidos en motores de búsqueda para promover productos o servicios que fueran conocidos y populares entre los usuarios mayormente selectivos.
La clase política acostumbrada al contacto personal y directo con el pueblo, en periodos electorales, caminaban el distrito o territorio a conquistar, para obtener votos y ganar la elección de alcalde, legislador o gobernante e inclusive para llegar a Los Pinos; de dos décadas a la fecha, los políticos han tenido que capacitarse en la tecnología de la comunicación o se han visto obligados a contratar a los estrategas en marketing político, ante la imposibilidad de realizar los métodos antiguos de convencer al electorado “de persona a persona”.
La comunicación a distancia se ha masificado sin más límite que el de los espacios cibernéticos de las redes sociales, y en ese sentido, el primero de Julio ganarán, en el país y en el estado de Veracruz los Pepes Meade Kuribreña y Yunes Zorrilla,
