/ martes 20 de julio de 2021

Permiso al desenfreno

El aborto legal fue aprobado ayer por el Congreso de Veracruz con 25 votos a favor, 13 en contra y una abstención, y ese acto que puede servir bien en casos especiales, también podría convertirse en un permiso para el desenfreno (sin generalizar, por supuesto, pues una gran mayoría de ellas está en desacuerdo de esta modificación a la ley).

Además puede abrir una nueva grieta a la sociedad, de por sí fracturada por tantos males que los gobiernos han propiciado, como esa de legitimar el consumo lúdico de la marihuana, una droga que generalmente lleva al uso de otras, y el “matrimonio” entre parejas del mismo sexo, cuyas mayores implicaciones está en la posible adopción de niños, que muchos observadores es aberrante. Esos actos están respaldados por un criterio jurídico internacional para garantizar respeto a derechos humanos de esos grupos minoritarios que, en parte, actúan con soberbia e insolencia para exigir a la sociedad un trato igualitario, sin discriminación ni criminalización de sus decisiones. ¿Qué debe hacer la sociedad frente a leyes que conceden derechos y libertades a unos cuantos en perjuicio de otros, sobre todo si éstas siguen socavando a la familia, base de la sociedad?

Ésta y las sucesivas generaciones deberán cargar con una mayor responsabilidad y educar a sus hijos en principios y valores para que eviten ser devorados por esas nuevas modalidades que en nada contribuyen a una adecuada integración social. Cada persona puede ejercer libremente como vive su sexualidad, pero más allá de cuestiones morales, sólo unas cuantas pueden justificar el aborto como consecuencia del descuido o irresponsabilidad, en tiempos de abundante información y exceso de medios preventivos. Es un tema complicado, con pocos pros y muchas contras, sobre lo cual no se han valorado suficientemente sus alcances y consecuencias sociales. Hay excepciones que la ley establece para que las mujeres puedan abortar, como son casos de riesgos para la vida de la madre, el embarazo producto de una violación o cuando el producto fetal presenta alguna malformación congénita irreversible. Es claro que eso no es lo que quieren algunas mujeres promotoras de la despenalización, ya aprobada. Esperemos que esto no sea inicio de una mayor degradación social. Otro tema importante es la incongruencia, e indolencia, de parte de las autoridades sanitarias del estado y locales, para permitir un concierto masivo del grupo musical Los Ángeles Azules el próximo sábado 24 en el World Trade Center, en el municipio de Boca del Río que convive todos los días con Veracruz, ésta clasificada en semáforo epidemiológico rojo de alto riesgo, en el pico de la tercera ola.

En los últimos días, neumólogos e instituciones de salud como el IMSS, han pedido tomar mayores precauciones, ya que los hospitales agotan sus espacio para más enfermos; aún así, la SS del estado autorizó este espectáculo, el cual, aún con restricciones, reunirá a más de 5 mil espectadores, de acuerdo con las estimaciones de los organizadores, y sin duda será un caldo de cultivo para la propagación del virus. Estos contagios podrían convertirse en muertes, y la mayor responsabilidad recaerá en quien lo haya autorizado. Boca del Río se encuentra en semáforo amarillo, pero sería infantil pemsar que este grupo musical sólo reunirá a boqueños. La mayoría de los asistentes serán de Veracruz, agregando otros de Xalapa que también están en semáforo rojo. Ver para creer.

Escriba a opedro2006@gmail.com

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El aborto legal fue aprobado ayer por el Congreso de Veracruz con 25 votos a favor, 13 en contra y una abstención, y ese acto que puede servir bien en casos especiales, también podría convertirse en un permiso para el desenfreno (sin generalizar, por supuesto, pues una gran mayoría de ellas está en desacuerdo de esta modificación a la ley).

Además puede abrir una nueva grieta a la sociedad, de por sí fracturada por tantos males que los gobiernos han propiciado, como esa de legitimar el consumo lúdico de la marihuana, una droga que generalmente lleva al uso de otras, y el “matrimonio” entre parejas del mismo sexo, cuyas mayores implicaciones está en la posible adopción de niños, que muchos observadores es aberrante. Esos actos están respaldados por un criterio jurídico internacional para garantizar respeto a derechos humanos de esos grupos minoritarios que, en parte, actúan con soberbia e insolencia para exigir a la sociedad un trato igualitario, sin discriminación ni criminalización de sus decisiones. ¿Qué debe hacer la sociedad frente a leyes que conceden derechos y libertades a unos cuantos en perjuicio de otros, sobre todo si éstas siguen socavando a la familia, base de la sociedad?

Ésta y las sucesivas generaciones deberán cargar con una mayor responsabilidad y educar a sus hijos en principios y valores para que eviten ser devorados por esas nuevas modalidades que en nada contribuyen a una adecuada integración social. Cada persona puede ejercer libremente como vive su sexualidad, pero más allá de cuestiones morales, sólo unas cuantas pueden justificar el aborto como consecuencia del descuido o irresponsabilidad, en tiempos de abundante información y exceso de medios preventivos. Es un tema complicado, con pocos pros y muchas contras, sobre lo cual no se han valorado suficientemente sus alcances y consecuencias sociales. Hay excepciones que la ley establece para que las mujeres puedan abortar, como son casos de riesgos para la vida de la madre, el embarazo producto de una violación o cuando el producto fetal presenta alguna malformación congénita irreversible. Es claro que eso no es lo que quieren algunas mujeres promotoras de la despenalización, ya aprobada. Esperemos que esto no sea inicio de una mayor degradación social. Otro tema importante es la incongruencia, e indolencia, de parte de las autoridades sanitarias del estado y locales, para permitir un concierto masivo del grupo musical Los Ángeles Azules el próximo sábado 24 en el World Trade Center, en el municipio de Boca del Río que convive todos los días con Veracruz, ésta clasificada en semáforo epidemiológico rojo de alto riesgo, en el pico de la tercera ola.

En los últimos días, neumólogos e instituciones de salud como el IMSS, han pedido tomar mayores precauciones, ya que los hospitales agotan sus espacio para más enfermos; aún así, la SS del estado autorizó este espectáculo, el cual, aún con restricciones, reunirá a más de 5 mil espectadores, de acuerdo con las estimaciones de los organizadores, y sin duda será un caldo de cultivo para la propagación del virus. Estos contagios podrían convertirse en muertes, y la mayor responsabilidad recaerá en quien lo haya autorizado. Boca del Río se encuentra en semáforo amarillo, pero sería infantil pemsar que este grupo musical sólo reunirá a boqueños. La mayoría de los asistentes serán de Veracruz, agregando otros de Xalapa que también están en semáforo rojo. Ver para creer.

Escriba a opedro2006@gmail.com

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