Aunque la intención sea firme, las pruebas de lengua tendrán que traducirse en jurídicas para poder emprenderla en contra del ex gobernador Miguel Ángel Yunes Linares.
Y es que, como lo han demostrado de manera fehaciente, en eso de los procesos legales para presuntamente poner orden, no se les da a los de la actual administración estatal morenista.
Desde antes de rendir protesta el gobernador Cuitláhuac García Jiménez por acá, todos apostaban a que el fiscal Jorge Winkler, herencia azul de los de Boca del Río se iría, por las buenas o por las malas.
Sin embargo, no ha resultado fácil para quienes pensaron que con el solo hecho de gobernar desde el ejecutivo, podrían echar abajo los acuerdos con antelación que habrían dejado planchado desde el legislativo.
Muy a pesar de contar con mayoría de MORENA en el Congreso Local, hubo lo que popularmente se conoce como “palo” a la intentona de quitar al fiscal que fue elegido por un periodo nada menos que de 9 años.
Todo este enredo entre los que se fueron pero dejaron insertados por mucho tiempo a sus aliados y quienes llegaron con mucho poder, pero falta de experiencia en operación política, mantiene en vilo al estado de Veracruz.
Algo debe pasar, no solo con declaraciones explosivas del secretario de gobierno Eric Patrocinio Cisneros, quien nuevamente asegura que los veracruzanos nos vamos a sorprender de las denuncias que interpondrán ante la Fiscalía General de la República (FGR) en contra de la dupla Yunes-Winkler.
Se supone, que ahora sí, tendrían pruebas contundentes de esos acuerdos que siempre olieron mal, con los presuntos decomisos ilegales de propiedades y extorsiones en contra de funcionarios “duartistas”.
De confirmarse lo dicho de manera muy adelantada por el secretario de gobierno, entonces, repetimos, se supone, que ahora sí, tendrían amarrados jurídicamente los casos y aquí cabría la pregunta ¿Podrán con Yunes?
Ágora
Mal y de malas algunos funcionarios de la 4T veracruzana; y es que, menudo favor le hacen al presidente López Obrador los que ya lucen engolosinados con los lujos que les conceden, solo por el hecho de estar cerca del poder.
Para mal ejemplo, una funcionaria de la secretaria de gobierno que presumió en redes sociales haber viajado en helicóptero propiedad del gobierno del estado a un festival a la zona de Costa Esmeralda.
¿Cuál sufrir?
@monicamarena
