/ viernes 8 de julio de 2022

¿Por qué defender al estado de Veracruz?

En apariencia la vida de una persona que se dedica a la crítica es sencilla, pues el crítico no arriesga, emite una opinión sobre algo que ya está creado, es decir, su trabajo y su servicio se ofrecen como un juicio sobre algo que alguien más hizo o creó.

El ejercicio de crítica de todas formas es sano para cualquier sociedad y gobierno, permite el mejoramiento continuo de acciones y conductas que aportan condiciones y generaciones completas de mejores personas, sin embargo, la crítica necesita tener una carga de autoridad moral, integridad, buena intención, conocimiento y la mayoría de las veces, aparecer en el momento justo con las causas buenas y nuevas, para ser abono de los que están haciendo un esfuerzo noble por crear algo en beneficio de todos los demás.

Hace algunos días el senador plurinominal Miguel Ángel Osorio Chong expresó críticas hacia el gobierno de Veracruz, sus instituciones, y en general considero que a todo un estado, a juicio de quien escribe estas líneas, sus expresiones además de inexactas, fueron carentes de autoridad moral y desatinadas, por su desconocimiento de nuestra entidad y por lo que representa él como político, y lo voy a repetir, él forma parte de la clase política más corrupta de la historia de nuestro país, y mire que ha habido muchas, el timbre para ganárselo no es fácil, pero vayamos a un aspecto más profundo de este ejercicio y al cual nos trae como colación la actitud de este personaje político en términos electorales.

Para muestra los últimos resultados del PRI, que tiene más del 30% de reducción en su padrón electoral en este 2022, prácticamente extinto y no se ha dado cuenta. ¿Por qué defender al estado de Veracruz? Hoy razones nos sobran para justificar una defensa clara de lo que nos ha costado tanto obtener y por lo que hay que seguir día con día luchando, y esa lucha implica una defensa diaria de lo que nos pertenece, de lo que es de nosotros y nos ha costado tanto. Es necesario poner atención a nuestra historia como estado y país, para no caer en la mezquindad en la que cayó el senador, que inexactamente opinó sobre nuestra tierra; hay que tener los pies bien puestos aquí en territorio, literalmente vivir y sentir lo que han sido décadas en este estado, pero al mismo tiempo tener una visión local de nuestra realidad. Es menester observar el futuro y la esperanza de forma global, lo que nos permite ver la esperanza de un mejor mañana y con ello alejarnos de los extremos que nos tenían en una mezquindad, en la que insisto, aún continúa el senador Osorio Chong y los que piensan como él.

Desde hace tres años en Veracruz comenzó a tomarse un sabor local muy especial, se nos recordó el orgullo de ser veracruzanos, se nos recordaron cada una de las 10 regiones de nuestro estado y que cada uno de los 212 municipios teníamos un sabor y color que nos hacía únicos, pero al mismo tiempo nos hacía fuertes si observábamos en el otro a nosotros mismos para salir adelante en lo propio, en nuestra tierra nos encontramos a nosotros mismos y observamos al futuro, comenzamos a querer a esta tierra, defenderla, cuidarla, sentir amor por el pueblo, a pensar que no me encuentro con otra persona si primero no me encuentro con orgullo y firme de lo que en arraigo soy, entonces de ahí podemos –gobierno y ciudadanía– ofrecerle algo a los otros, algo verdadero, un cambio, es decir, solo es posible y real entender este cambio con el aporte original de lo que soy, de lo que somos, de lo que es nuestra sociedad y gobierno.

Traducido en términos más llanos, cada uno cuida lo propio porque lo conoce, porque lo ama, porque le pertenece, eso comenzó a pasar en cada rincón del estado de Veracruz, la mayoría lo comenzamos a sentir propio, ya no solo un malecón y una playa, ya no solo un gentilicio de jarocho, sino un sentimiento de orgullo que recorre desde Las Choapas hasta Pánuco por todas sus regiones, y comenzamos a defenderlo de todo y de todos; sus cifras avalan esta defensa, la dignidad de sus servidores la respalda, el amor de sus ciudadanas y ciudadanos se siente en esta tierra.

Por eso se puede defender a Veracruz, porque si no lo hacemos se nos vendrá abajo y volverá a las manos de los rufianes que tanto daño le hicieron y volveremos atrás, al Veracruz de la corrupción y de la impunidad, al de solo unos pocos, al de solo unos apellidos y millones de pobres y muertos. Hay una parte del libro santo que dice: -el que no tiene espada, venda su capa y compre una- Lucas 22.36. Si interpretamos con sabiduría y cautela esta parte, entenderemos que el hombre más maravilloso de la historia sabía que podría estar amenazado y sus hombres también, porque eventualmente el transformador siempre correrá ese riesgo, pero había que defenderlo, en efecto a capa y espada. En esta reflexión es necesario ampliar nuestra mirada para poder entender la profundidad del cambio en favor de las mayorías y que nos beneficia a todos de muchas y varias formas.

Esto solo es una parte de la política integral del estado de Veracruz que hoy permite una mejor condición de vida a muchos que tenemos precisamente toda una existencia en este estado, a quienes hemos visto y seguimos viendo su evolución, tres años por supuesto que no son suficientes, pero vamos por el rumbo adecuado y por ello hay que cuidarlo, cuidarlo como la semilla de mostaza, que un hombre tomó y sembró, era la más pequeña de todas, pero cuando creció, como crece nuestro estado, se hace un árbol enorme en donde vienen aves del cielo y hacen sus nidos, pero esto requiere cuidado, defensa, valor, y estar atentos a los ataques de quienes no pueden percibir una nueva realidad de nuestro país, porque la negación no se los permite, o porque no pueden ver una realidad de nuestro estado porque simplemente no la conocen, y además no tienen la autoridad moral, porque esa solo les viene del interior del propio ser humano, de la transmisión y coordinación ideal de principios y valores que se puedan entender desde el interior, lo local, de un estado o del corazón de una persona, que de forma casi perfecta se exterioricen en actos manifiestos de amor por su estado y persona, permitiendo establecer un orgullo e identidad por su persona y región, que personas como Miguel Ángel Osorio Chong y todos lo de su clase jamás podrán entender, porque para ellos no hay orgullo, solo hay dinero e intereses en la política y eso ya se acabó.

(*) Diputado federal. Morena

En apariencia la vida de una persona que se dedica a la crítica es sencilla, pues el crítico no arriesga, emite una opinión sobre algo que ya está creado, es decir, su trabajo y su servicio se ofrecen como un juicio sobre algo que alguien más hizo o creó.

El ejercicio de crítica de todas formas es sano para cualquier sociedad y gobierno, permite el mejoramiento continuo de acciones y conductas que aportan condiciones y generaciones completas de mejores personas, sin embargo, la crítica necesita tener una carga de autoridad moral, integridad, buena intención, conocimiento y la mayoría de las veces, aparecer en el momento justo con las causas buenas y nuevas, para ser abono de los que están haciendo un esfuerzo noble por crear algo en beneficio de todos los demás.

Hace algunos días el senador plurinominal Miguel Ángel Osorio Chong expresó críticas hacia el gobierno de Veracruz, sus instituciones, y en general considero que a todo un estado, a juicio de quien escribe estas líneas, sus expresiones además de inexactas, fueron carentes de autoridad moral y desatinadas, por su desconocimiento de nuestra entidad y por lo que representa él como político, y lo voy a repetir, él forma parte de la clase política más corrupta de la historia de nuestro país, y mire que ha habido muchas, el timbre para ganárselo no es fácil, pero vayamos a un aspecto más profundo de este ejercicio y al cual nos trae como colación la actitud de este personaje político en términos electorales.

Para muestra los últimos resultados del PRI, que tiene más del 30% de reducción en su padrón electoral en este 2022, prácticamente extinto y no se ha dado cuenta. ¿Por qué defender al estado de Veracruz? Hoy razones nos sobran para justificar una defensa clara de lo que nos ha costado tanto obtener y por lo que hay que seguir día con día luchando, y esa lucha implica una defensa diaria de lo que nos pertenece, de lo que es de nosotros y nos ha costado tanto. Es necesario poner atención a nuestra historia como estado y país, para no caer en la mezquindad en la que cayó el senador, que inexactamente opinó sobre nuestra tierra; hay que tener los pies bien puestos aquí en territorio, literalmente vivir y sentir lo que han sido décadas en este estado, pero al mismo tiempo tener una visión local de nuestra realidad. Es menester observar el futuro y la esperanza de forma global, lo que nos permite ver la esperanza de un mejor mañana y con ello alejarnos de los extremos que nos tenían en una mezquindad, en la que insisto, aún continúa el senador Osorio Chong y los que piensan como él.

Desde hace tres años en Veracruz comenzó a tomarse un sabor local muy especial, se nos recordó el orgullo de ser veracruzanos, se nos recordaron cada una de las 10 regiones de nuestro estado y que cada uno de los 212 municipios teníamos un sabor y color que nos hacía únicos, pero al mismo tiempo nos hacía fuertes si observábamos en el otro a nosotros mismos para salir adelante en lo propio, en nuestra tierra nos encontramos a nosotros mismos y observamos al futuro, comenzamos a querer a esta tierra, defenderla, cuidarla, sentir amor por el pueblo, a pensar que no me encuentro con otra persona si primero no me encuentro con orgullo y firme de lo que en arraigo soy, entonces de ahí podemos –gobierno y ciudadanía– ofrecerle algo a los otros, algo verdadero, un cambio, es decir, solo es posible y real entender este cambio con el aporte original de lo que soy, de lo que somos, de lo que es nuestra sociedad y gobierno.

Traducido en términos más llanos, cada uno cuida lo propio porque lo conoce, porque lo ama, porque le pertenece, eso comenzó a pasar en cada rincón del estado de Veracruz, la mayoría lo comenzamos a sentir propio, ya no solo un malecón y una playa, ya no solo un gentilicio de jarocho, sino un sentimiento de orgullo que recorre desde Las Choapas hasta Pánuco por todas sus regiones, y comenzamos a defenderlo de todo y de todos; sus cifras avalan esta defensa, la dignidad de sus servidores la respalda, el amor de sus ciudadanas y ciudadanos se siente en esta tierra.

Por eso se puede defender a Veracruz, porque si no lo hacemos se nos vendrá abajo y volverá a las manos de los rufianes que tanto daño le hicieron y volveremos atrás, al Veracruz de la corrupción y de la impunidad, al de solo unos pocos, al de solo unos apellidos y millones de pobres y muertos. Hay una parte del libro santo que dice: -el que no tiene espada, venda su capa y compre una- Lucas 22.36. Si interpretamos con sabiduría y cautela esta parte, entenderemos que el hombre más maravilloso de la historia sabía que podría estar amenazado y sus hombres también, porque eventualmente el transformador siempre correrá ese riesgo, pero había que defenderlo, en efecto a capa y espada. En esta reflexión es necesario ampliar nuestra mirada para poder entender la profundidad del cambio en favor de las mayorías y que nos beneficia a todos de muchas y varias formas.

Esto solo es una parte de la política integral del estado de Veracruz que hoy permite una mejor condición de vida a muchos que tenemos precisamente toda una existencia en este estado, a quienes hemos visto y seguimos viendo su evolución, tres años por supuesto que no son suficientes, pero vamos por el rumbo adecuado y por ello hay que cuidarlo, cuidarlo como la semilla de mostaza, que un hombre tomó y sembró, era la más pequeña de todas, pero cuando creció, como crece nuestro estado, se hace un árbol enorme en donde vienen aves del cielo y hacen sus nidos, pero esto requiere cuidado, defensa, valor, y estar atentos a los ataques de quienes no pueden percibir una nueva realidad de nuestro país, porque la negación no se los permite, o porque no pueden ver una realidad de nuestro estado porque simplemente no la conocen, y además no tienen la autoridad moral, porque esa solo les viene del interior del propio ser humano, de la transmisión y coordinación ideal de principios y valores que se puedan entender desde el interior, lo local, de un estado o del corazón de una persona, que de forma casi perfecta se exterioricen en actos manifiestos de amor por su estado y persona, permitiendo establecer un orgullo e identidad por su persona y región, que personas como Miguel Ángel Osorio Chong y todos lo de su clase jamás podrán entender, porque para ellos no hay orgullo, solo hay dinero e intereses en la política y eso ya se acabó.

(*) Diputado federal. Morena