/ viernes 5 de junio de 2020

Responsabilidad municipal ante la pandemia

El problema originado por la pandemia de coronavirus ha rebasado la capacidad de países desarrollados y con sistemas de salud eficientes y de vanguardia.

En México, sin importar el tema de la eficiencia o ineficiencia gubernamental, prácticamente no hay entidad que se salve: algunos estados, CDMX, Edomex o Veracruz, tienen más contagios que otros, pero en general se trata de una emergencia sanitaria que ha golpeado a todos los sectores y en todas las regiones.

En Veracruz, si bien los contagios se concentran en su mayoría en tres o cuatro zonas —como el Puerto-Boca del Río-Alvarado-Medellín, Coatzacoalcos-Minatitlán, y Poza Rica—, hay casos en 140 municipios y la preocupación se extiende a toda la geografía estatal.

El reporte del pasado miércoles de la Secretaría de Salud consigna más de 4 mil 300 casos y más de 600 muertes por Covid-19. La zona conurbada de Veracruz-Boca del Río-Alvarado-Medellín concentra casi la mitad de esos casos, mil 970. Sin embargo, la preocupación se ha extendido de forma comprensible a todos los municipios de la entidad.

Xalapa, por ejemplo, tiene 91 casos y ello ha obligado a la autoridad municipal a extremar medidas preventivas.

Hay otros municipios veracruzanos donde el número de casos es alarmante, no por la cifra, sino por la proporción con relación al tamaño en términos demográficos.

En Perote había, hasta el pasado miércoles, 22 casos de coronavirus; es nada si se compara con los mil 670 del puerto de Veracruz, pero muchos si se toma en cuenta que el municipio contaba, hasta el censo intermedio de 2015, con poco más de 72 mil habitantes.

Esos 22 casos y 6 defunciones encendieron los focos de alerta en el Ayuntamiento que preside el doctor Juan Francisco Hervert Prado; en ese lugar se tomaron acciones prácticamente desde que llegaron los primeros casos de Covid-19 al país, porque sabían que todo era cuestión de tiempo para que comenzaran los llamados contagios comunitarios.

Perote fue uno de los primeros municipios veracruzanos donde las autoridades locales tomaron con responsabilidad y seriedad el tema de la pandemia.

Probablemente por la formación profesional del alcalde y por sus antecedentes al servicio del Sector Salud, este lugar tuvo una rápida reacción: los parques y espacios públicos fueron cerrados, se instalaron filtros sanitizantes, se limitó la actividad comercial, se prohibieron las aglomeraciones, se distribuyó de forma masiva gel antibacterial, se fortaleció desde el DIF municipal la atención a los grupos vulnerables.

Este jueves, el alcalde sostuvo una reunión con representantes de la empresa ADO-AU, cuya terminal es la más importante de esa zona en cuanto al movimiento de pasajeros; Hervert Prado se refirió a la situación de emergencia a causa del Covid-19, y a la necesidad de salvaguardar la salud de los peroteños.

Acordaron extremar las medidas sanitarias en la terminal, que es considerada un posible foco de contagio; en el acceso a ese lugar se instalará un arco sanitizante, con la finalidad de frenar la propagación del virus.

Lamentablemente no todos los alcaldes actúan con el mismo nivel de responsabilidad, seriedad y, sobre todo, conocimiento del tema epidemiológico; contrario al caso de Perote encontramos, por ejemplo, el de Medellín de Bravo, con un alcalde cuya actividad más destacada ha sido un baile tipo Tik Tok en redes sociales; patético.

El problema originado por la pandemia de coronavirus ha rebasado la capacidad de países desarrollados y con sistemas de salud eficientes y de vanguardia.

En México, sin importar el tema de la eficiencia o ineficiencia gubernamental, prácticamente no hay entidad que se salve: algunos estados, CDMX, Edomex o Veracruz, tienen más contagios que otros, pero en general se trata de una emergencia sanitaria que ha golpeado a todos los sectores y en todas las regiones.

En Veracruz, si bien los contagios se concentran en su mayoría en tres o cuatro zonas —como el Puerto-Boca del Río-Alvarado-Medellín, Coatzacoalcos-Minatitlán, y Poza Rica—, hay casos en 140 municipios y la preocupación se extiende a toda la geografía estatal.

El reporte del pasado miércoles de la Secretaría de Salud consigna más de 4 mil 300 casos y más de 600 muertes por Covid-19. La zona conurbada de Veracruz-Boca del Río-Alvarado-Medellín concentra casi la mitad de esos casos, mil 970. Sin embargo, la preocupación se ha extendido de forma comprensible a todos los municipios de la entidad.

Xalapa, por ejemplo, tiene 91 casos y ello ha obligado a la autoridad municipal a extremar medidas preventivas.

Hay otros municipios veracruzanos donde el número de casos es alarmante, no por la cifra, sino por la proporción con relación al tamaño en términos demográficos.

En Perote había, hasta el pasado miércoles, 22 casos de coronavirus; es nada si se compara con los mil 670 del puerto de Veracruz, pero muchos si se toma en cuenta que el municipio contaba, hasta el censo intermedio de 2015, con poco más de 72 mil habitantes.

Esos 22 casos y 6 defunciones encendieron los focos de alerta en el Ayuntamiento que preside el doctor Juan Francisco Hervert Prado; en ese lugar se tomaron acciones prácticamente desde que llegaron los primeros casos de Covid-19 al país, porque sabían que todo era cuestión de tiempo para que comenzaran los llamados contagios comunitarios.

Perote fue uno de los primeros municipios veracruzanos donde las autoridades locales tomaron con responsabilidad y seriedad el tema de la pandemia.

Probablemente por la formación profesional del alcalde y por sus antecedentes al servicio del Sector Salud, este lugar tuvo una rápida reacción: los parques y espacios públicos fueron cerrados, se instalaron filtros sanitizantes, se limitó la actividad comercial, se prohibieron las aglomeraciones, se distribuyó de forma masiva gel antibacterial, se fortaleció desde el DIF municipal la atención a los grupos vulnerables.

Este jueves, el alcalde sostuvo una reunión con representantes de la empresa ADO-AU, cuya terminal es la más importante de esa zona en cuanto al movimiento de pasajeros; Hervert Prado se refirió a la situación de emergencia a causa del Covid-19, y a la necesidad de salvaguardar la salud de los peroteños.

Acordaron extremar las medidas sanitarias en la terminal, que es considerada un posible foco de contagio; en el acceso a ese lugar se instalará un arco sanitizante, con la finalidad de frenar la propagación del virus.

Lamentablemente no todos los alcaldes actúan con el mismo nivel de responsabilidad, seriedad y, sobre todo, conocimiento del tema epidemiológico; contrario al caso de Perote encontramos, por ejemplo, el de Medellín de Bravo, con un alcalde cuya actividad más destacada ha sido un baile tipo Tik Tok en redes sociales; patético.