En la medida que se acerca la fecha para que empecemos a vivir en la República Amorosa, nos vamos enterando que las promesas de campaña no se harán realidad de manera inmediata.
Poco a poco, el futuro gobierno, que entrará en funciones el primero de diciembre, va dando los plazos en los que se concretaría cada uno de sus anuncios. Ahí están, por ejemplo, las refinerías, cuya construcción llevará años.
Y por lo que se ve, algo similar pasará con el precio de la electricidad, que tampoco bajará de inmediato, sino hasta dentro de tres años, de acuerdo con lo que explicó ayer en Boca del Río Carlos Morales Mar.
El declarante, quien asumirá la subdirección de la CFE en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, detalló que existen varios problemas por solucionar, entre ellos las pérdidas no técnicas (ilícitos), así como los temas de cartera vencida y el subsidio a usuarios de bajo consumo, además de que se revisarán los costos de producción de las plantas.
Morales Mar estimó que la administración lopezobradorista se estarían llevando de dos a tres años en corregir los problemas mencionados. Es decir, las tarifas del servicio de energía eléctrica empezarían a bajar hasta entonces.
Pero el nuevo gobierno estaría en la posibilidad de reducir las tarifas en zonas preferenciales, como los desarrollos regionales de la frontera norte, el istmo y la parte turística de la península de Yucatán. Posterior estaría en la disposición de apoyar a los estados con mayor generación de energía sin olvidar a las entidades con altas temperaturas.
El problema es que un anuncio similar lo escuchamos hace tres años, cuando el priista Enrique Ochoa Reza era director de la CFE y dio el plazo de dos años para que se empezaran a ver beneficios concretos de la Reforma Energética. En aquel entonces aseguró que uno de los objetivos claros de dicha reforma era la reducción de los costos de generación de energía eléctrica en ese periodo.
Está por terminar el sexenio de Enrique Peña y mexicanos y veracruzanos seguimos pagando tarifas de luz caras.
¿Esta vez sí se hará realidad el anuncio de bajar la luz?
Los ministros de la SCJN no bajarán su sueldo: Está visto que los señores de la Suprema Corte de Justicia de la Nación no se van a bajar los sueldos. Así lo justificó el ministro José Ramón Cossío, al señalar: “No, el sueldo de los ministros se fija por la Cámara de Diputados. Tenemos una condición que, en la Constitución, artículo 94, dice que nuestros sueldos no pueden ser disminuidos durante el tiempo de nuestro encargo”.
Tal argumento lo expuso apenas el jueves cuando dijo que la única alternativa que se puede tomar es hacer un ajuste en los gastos para bajar los costos en el Consejo de la Judicatura Federal y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
¿Y sabe usted cuánto percibe un ministro cada mes? 651 mil 741 pesos, lo que los hace los servidores públicos mejor pagados del país, por encima del presidente de la República.
Eso sí, la presidente de la Corte, Luis María Aguilar Morales, informó que ordenó racionalizar los gastos en la SCJN y en el Consejo de la Judicatura Federal en bienes y servicios, remodelaciones, mobiliario, renta de autos para funcionarios, viáticos, actividades culturales y deportivas. Esto será considerado en los proyectos de presupuestos de egresos 2019.
Mientras el INEGI ha revelado que en México los empleos mejor remunerados han ido a la baja en la última década, en tanto que los de menor ingreso aumentaron.
Notable, el contraste en los niveles de ingresos entre los mexicanos.
Opine, comente e informe a los correos electrónicos srdonrene@gmail.com y rvalle@diariodexalapa.com.mx. Y en twitter@renedelvalleb. También puede leernos en la web site www.diariodexalapa.com.mx.
