Hasta el mes de noviembre se registraron 53 feminicidios en el estado de Veracruz, de acuerdo con datos del Observatorio Universitario de Violencias contra las Mujeres. Más allá de los discursos triunfalistas, el año no termina y los asesinatos de mujeres continúan. En materia de desapariciones, el mismo organismo ha registrado 816 casos.
¿Fue 2023 un año perdido en la atención de las violencias contra las mujeres? Observemos lo que ha pasado en los últimos once meses.
Si bien el dato oficial luce un decremento del treinta por ciento de feminicidios, afirmación a debatir dada la manera en que la Fiscalía General del Estado de Veracruz da apertura a las carpetas de investigación, la prevención y debida sanción de las violencias por parte de la autoridad local ha dejado mucho qué desear.
Frecuentes son las quejas respecto al maltrato que reciben las familias de víctimas de feminicidio, el extravío de la autoridad para dar debido seguimiento a los casos y captura a los feminicidas. Los errores fatales que comete el personal en la integración de carpetas, lo cual facilita que los asesinos sean liberados y ahora estén en las calles.
Ya no digamos de la atención que se le prodiga a las víctimas de violencias de género: desde la coerción para el desistimiento a denunciar hasta la burocratización de los casos sin acatar la ley y los protocolos, pese a la capacitación con perspectiva de género y apegada a derechos humanos que el personal de la Fiscalía recibe a manera de cursos de capacitación.
Ha brillado por su ausencia la aplicación de estrategias expertas que permitan la prevención de la desaparición de personas, puntualmente de jóvenes que sean blanco de tráfico de mujeres para trabajo sexual forzado. No se ha diseñado ni publicado un diagnóstico serio que permita conocer cuáles son los detonantes de desaparición de mujeres en el estado de Veracruz (¿crimen organizado? ¿Violencia de género en las familias?).
Y, pasando a otro tema, el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública reporta que de enero a noviembre de 2023, la Fiscalía General del Estado de Veracruz registró para la entidad un total de 35 delitos por aborto.
¿Alguien sabe sobre ello? Pese a que es legal hasta las doce semanas de gestación, los hospitales públicos no cuentan con disponibilidad de personal médico ni con medicamentos para realizar procedimientos que permitan una interrupción legal del embarazo.
Entonces, ¿qué pasa con esos 35 casos? ¿Son falsas denuncias o las mujeres que se encuentran bajo proceso se practicaron abortos fuera de la semana límite que marca la ley? No lo sabemos.
Parece que el tiempo se ha detenido en materia de atención a los derechos humanos de las mujeres en Veracruz. El desdén es transexenal y caracteriza a todos los partidos políticos por igual.
En tanto, continuemos simulando que sabemos tocar una jarana y fomentando el tráfico desbocado en la capital del estado con desfiles navideños insultantes para las familias que no tendrán en la mesa a sus seres amados para cerrar 2023 con alegría.
Agradezco la lectura que cada lunes dedican a #SerParaSí. Dadas las fiestas decembrinas que han llegado, nos leemos hasta el 8 de enero de 2024. Seguiremos reflexionando sobre la vida y los derechos de las mujeres. Hasta entonces.
*Coordinadora del Observatorio Universitario de Violencias contra las Mujeres. Universidad Veracruzana