Tiene razón el joven aspirante a la dirigencia estatal del partido Morena, en Veracruz, Esteban Ramírez Zepeta...
Cuando habla de la importancia de la unidad de la militancia para “la defensa del cambio verdadero”, en la ruta de las elecciones de 2021 que están a la vuelta de la esquina.
El Movimiento de Regeneración Nacional nació como parte de un fenómeno de inculturación política, impulsado por millones de mexicanos que no han entendido bien a bien esto de la 4T, pero que creen ciegamente en su líder, en su caudillo, en Andrés Manuel López Obrador.
¿Pero qué pasaría si el presidente de México no tuviera el tamaño que tiene o su figura se viniera abajo —como ha venido sucediendo— por los escalonados escándalos en donde hasta uno de sus hermanos, Pío López Obrador, fue involucrado en un presunto acto de corrupción?
¿Podría sobrevivir Morena sin la figura de AMLO? ¿Qué le espera al partido frente a una posible debacle de la imagen presidencial? ¿Está ya lista la estructura electoral para afrontar las elecciones de 2021? ¿Seguirán peleándose los grupos políticos los cotos de poder, poniendo en riesgo el futuro del partido?
Por eso llama la atención el discurso del joven político Esteban Ramírez Zepeta, al reunirse con integrantes del Comité Ejecutivo Estatal “para trabajar en torno a la unidad del partido y el apoyo a las políticas del gobierno estatal y federal”.
Claro, el mensaje también deberían de enviárselo a don Alejandro Rojas Díaz Durán, aspirante a la dirigencia nacional de Morena, quien ayer, a través de un video, se le fue al cuello al secretario de Gobierno, Éric Cisneros Burgos, por la desatinada amenaza vía WhatsApp a la directora ejecutiva del diario El Dictamen, Berta Ahued Malpica. No me ayudes, compadre, podría haberle contestado el encargado de la política interna.
Pero regresando a Ramírez Zepeta, ayer comentó que “es importante recordar a todas y todos los militantes de Morena que la defensa del cambio verdadero, de la 4T, debe ser nuestra principal tarea para no dejar espacio a la oposición conservadora y corrupta; esto sólo es posible desde la unidad partidista, dejando de lado las diferencias que puedan dividir nuestros esfuerzos”.
En el encuentro, en donde estuvieron presentes Carol Esbeidy Condé Martínez, secretaria de arte y cultura; Yair Ademar Domínguez Vázquez, secretario de organización y José Ángel Echeverría Escamilla, secretario de jóvenes, Ramírez Zepeta abundó sobre el papel fundamental de la unidad del partido de cara a los retos en los procesos internos y externos que están por venir, a través del diálogo y el entendimiento para la construcción de acuerdos que permitan impulsar el desarrollo y crecimiento de la sociedad.
Finalmente, agradeció a sus compañeros de partido a quienes califica como personas con gran compromiso para servir al pueblo de manera honesta.
El reto de la unidad en Morena se nota complicado, sobre todo porque los grupos políticos se encuentran enfrentados a todo lo que dan, tirando a diestra y siniestra, sin dimensionar la oportunidad histórica que tienen en sus manos para transformar nuestra sociedad.
Nos vemos los jueves.
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