Bajo el falso argumento de la lucha contra la corrupción, el gobierno de la Cuarta Transformación decidió en octubre de 2020, desaparecer 109 fideicomisos, entre ellos el Fondo para la Atención de Emergencias (Fonden) y a la fecha nadie ha mostrado pruebas de dicha corrupción, mucho menos a dónde fueron a parar los miles de millones de pesos que manejaba este fideicomiso.
Antes del paso del huracán Grace, que dejó una estela de destrucción y muerte en Veracruz y otras entidades, en octubre y noviembre de 2020, por el mal manejo de los desfogues de la presa Peñitas por parte de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), se inundó el estado de Tabasco y a la fecha los afectados siguen esperando el apoyo prometido.
A tres años de que Andrés Manuel López Obrador tomó las riendas del país, diariamente en su palestra matutina habla de su “lucha contra la corrupción” y de la “austeridad republicana”, pero al día de hoy no existe un hecho tangible que evidencie algún resultado de este gobierno en combatir la ilegalidad o de verdaderos ahorros.
La 4T ha demostrado que la incompetencia, la negligencia, la incapacidad y hasta la ignorancia es más dañina, máxime cuando más poder se tiene.
Todos sabemos que el país siempre se ve afectado por los diversos fenómenos naturales. Tenemos muchas regiones propensas al impacto de ciclones; sufrimos inundaciones, sismos, además de sequías e incendios, y como resultado de los eventos climáticos hay terribles pérdidas humanas y materiales.
Y ante todos los esos desastres de la naturaleza que estamos enfrentando los mexicanos, hoy vivimos en una completa indefensión, es mentira que “a los damnificados los están atendiendo mejor que nunca”.
El Presidente por desaparecer el Fonden por una “corrupción” que no ha demostrado, está dejando más desastres en el país que los huracanes y los sismos.
Tan solo cifras oficiales de este gobierno mencionan que el huracán Grace ocasionó daños en Veracruz, Puebla e Hidalgo, afectando 149 municipios y más de 3 mil localidades, con un saldo de 13 fallecidos (ocho en Veracruz y cinco en Puebla).
El ciclón Nora, que se formó el pasado 25 de agosto en el Pacífico mexicano, afectó seis estados y 44 municipios, cifras de las autoridades estatales, y provocó dos muertes; la noche del martes 7 de septiembre se registró un terremoto de magnitud 7.1 en el centro y sur de México, con epicentro en Acapulco, dejando 2 muertos y más de mil inmuebles dañados tan solo en Guerrero.
Y parece que el sismo vino precedido de otro desastre, por las fuertes lluvias registradas en el Valle de México y en la zona del Valle del Mezquital, en Hidalgo, ocasionando severas inundaciones que cobró la vida de 17 personas en el Hospital General de Zona No. 5 del IMSS, por la inundación y la falta de energía eléctrica en el hospital, además de afectaciones en 31 mil viviendas.
Morena es peor que un ciclón. si el Fonden era un barril sin fondo, como lo dijo el Presidente y por eso lo desapareció, entonces que haga otro fondo y que lo registre con su marca, que lo nombre “fondo del bienestar para desastres naturales”, o como él quiera, pero que sirva para ayudar de manera rápida a las familias que hoy perdieron sus bienes, o peor aún, a un ser querido.
Sea como sea, el Fonden era tangible, ahora las acciones y el apoyo sólo existen en el discurso de un gobierno inhumano y por más que vea inundaciones, temblores, deslaves de cerros y sismos, solo se preocupa en llevar los recursos a sus enormes ocurrencias.
Senador por Veracruz del PAN
