A Veracruz le urge una estrategia de seguridad que le permita al gobierno combatir la delincuencia, bajar los índices de violencia y garantizar la tranquilidad y la seguridad de la población.
Y digo le urge porque no se ve una acción planeada y organizada, como tampoco se percibe la coordinación entre los tres niveles de gobierno para crear un solo frente contra los delincuentes y sus acciones.
Los vecinos de Xalapa, por ejemplo, se preguntan porqué un patronato de una calle, un barrio o de una colonia tiene que organizarse y pagar vigilancia y seguridad privada.
Y los mismos vecinos se responden: porque ni el gobierno ni la policía han sido capaces de garantizar la seguridad de los bienes de la gente ni la seguridad personal ni familiar de la población.
Otros van más allá al cuestionar el hecho de que la policía esté orientando a esos comités vecinales para que se organicen de manera adecuada para defenderse de los delincuentes.
No haría falta contratar a vigilantes particulares ni que la gente se organizara en grupos de vecinos vigilantes si el gobierno contara con corporaciones policiacas que trabajaran con base en una estrategia y protegieran al pueblo.
Tal parece que el mismo gobierno hace un reconocimiento tácito de su falta de capacidad para combatir la inseguridad y la delincuencia al admitir y fomentar los grupos vecinales que incluso hacen rondines para cuidar su entorno.
¿O todo será parte de su estrategia?
Si es así, entonces será interesante ver y escuchar al gobernador Cuitláhuac García cuando acuda al llamado que le hace el Senado para que explique de manera pormenorizada la estrategia de seguridad que está implementando en el territorio estatal.
La complicada situación por la que atraviesa Veracruz al estar liderando a los estados en número de secuestros, homicidios,feminicidios y otros que se registran todos los días, lo hacen ver como un lugar sin estrategia en la materia.
Así lo sienten y lo padecen los familiares de los desaparecidos y de los asesinados, así como los que han sido asaltados.
Así se ve también desde el Senado de la República,donde de manera unánime los distintos grupos legislativos decidieron llamar al gobernador de Veracruz para que explique su estrategia de seguridad.
A lo mejor de esa manera logra darla a conocer,porque hasta ahora no se le ha visto la difusión, si es que la hay.
Sobre el caso de las magistraturas vacantes, en el que el Congreso local lleva ya más de mes y medio con las seis primeras propuestas guardadas, un lector nos recordó que fue en diciembre pasado, concretamente el día 20, cuando el presidente de la Mesa Directiva José Manuel Pozos Castro dio a conocer que la Legislatura recibió la documentación de 443 aspirantes a ocupar las vacantes del Poder Judicial y que en ese grupo había162 mujeres y 281 hombres.
También que el 13 y 14 de diciembre los diputados recibieron los documentos de los interesados y el 17 quedó integrado un comité que revisó dicha documentación y lo conformaron los diputados Magaly Armenta,Mónica Robles, Adriana Paola Linares, Éric Domínguez, Raymundo Andrade,Montserrat Ortega y Enrique Cambranis.
Y que el total de los expedientes fue entregado el 19 de ese mismo mes al gobernador Cuitláhuac García, quien hizo la propuesta delos primeros seis.
Por cierto, el 4 de abril próximo el expresidente delTSJ, Alberto Sosa Hernández, llegará a los 70 años de edad, por lo que está próximo a dejar la magistratura. Habrá, entonces, otra vacante.
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