Veracruz, Ver.- Edificios antiguos y abandonados cuentan algunos capítulos de la historia de Veracruz y aunque no todos son históricos, conservan leyendas que son contadas a través de los años y que se quedan como un patrimonio cultural en la sociedad.
Uno de estos edificios es el antiguo sanatorio del Doctor Nicandro Melo, ubicado en las calles de Bravo entre Cortés y Canal en plena zona comercial de Veracruz, muy cerca del Mercado Hidalgo, rodeado de una veintena de puestos.
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El lugar luce abandonado, con avanzado deterioro, no tiene puertas ni ventanas, se ve tenebroso y sobre él versan muchas leyendas.
¿Cuándo se construyó el sanatorio Dr. Nicandro Melo?
De acuerdo con Ricardo Cañas Montalvo, encargado del Museo de la Ciudad, dicho edificio se construyó entre los años 20 ó 30, con un estilo europeo, resaltaba por ser de tres niveles y era muy bonito a la vista de todos.
Señala que la información del lugar estaba disponible en un antiguo directorio comercial del año de 1939, como el Sanatorio del doctor Nicandro Melo y tenía como dirección Nicolas Bravo número 74 entre Hernán Cortes y Francisco Canal, es decir el nombre de las calles no ha cambiado de esa fecha a la actualidad.
Aunque era un hospital privado, un presunto mal manejo con la pila de cobalto que era utilizado para el tratamiento contra el cáncer, provocó la evacuación de todo el personal y desde entonces no volvió a ser reutilizado.
“Se habla que allá por los años 50 fue de los primeros lugares que tuvieron una pila de cobalto para el tratamiento contra el cáncer, al parecer, se habla de eso porque ha quedado en la cuestión oral, en la tradición oral, de que la pila de cobalto que se tenía en uso tuvo una fuga por lo cual el edificio tuvo que ser cerrado y no pudo reutilizarse”, expresa.
Refiere que no era el único hospital privado, pero fue uno de los primeros del siglo XX y aunque estaba cerca del Mercado Hidalgo, no estaba rodeado de comercios como actualmente.
“Si estaba cerca del Mercado Hidalgo que se fundó en 1925 pero estaba a cierta distancia y no había tantos puestos, había muchos patios de vecindad alrededor, lo que se habla es que tuvo esa fuga y por lo cual el edificio tuvo que ser cerrado”, expone.
En realidad, no hay mucha información de lo que realmente sucedió y lo único que se habla es que la pila de cobalto había tenido una fuga y desde su evacuación quedó en el abandono.
Uno de los sanatorios más grandes de Veracruz
El historiador señala que para la época de 1920 a 1940, aún no se creaba el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) por lo que en Veracruz había varios sanatorios; algunos otros del doctor Guillermo Lucha Deschamps que se encontraba en Independencia, así el Sanatorio de un médico militar y se encontraba en Rayón entre el Callejón de Clavijero y Zaragoza.
De los sanatorios más grandes que había en Veracruz era el del doctor Antonio Rodríguez Rosas que se encontraba en la calle de Azueta entre Díaz Mirón y González Pagés.
“Hubo varios edificios que eran sanatorios privados y que fueron importantes para la ciudad, entonces cada médico le invertía a su clínica para tener lo más moderno”, dice.
Actualmente el edificio del Sanatorio del Doctor Melo, sigue perteneciendo a la familia Melo pero se encuentra cerrado al público; una vieja estructura como reja y un candado restringen el paso a personas extrañas.
Una placa con el nombre del lugar y del doctor Melo aún son visibles al exterior y un vigilante resguarda la zona.
