TOLUCA, Edomex.- En el coraje de Rodrigo Salinas y la valentía de Alfredo Talavera se refleja el infernal momento del líder en el balompié mexicano. El Diablo, sin compasión por el salvado Veracruz, venció 3-0 para amarrar la cima y alargar a nueve su racha de triunfos en el Clausura 2018, una nueva marca en torneos cortos.
Del infierno al cielo o al revés. El Toluca llegó a 36 puntos y aseguró el primer sitio a falta de una fecha por concluir la fase regular. Ayer amansó al Tiburón en otra jornada memorable a su historia que escribió Rodrigo Salinas con un doblete y un penal atajado de Talavera en el ocaso.
EL JUEGO
Veracruz ya no podía ser condenado en el infierno. Tras la caída de Lobos BUAP en la Sultana del Norte, Guillermo Vázquez y su equipo habían asegurado la permanencia. El Tiburón se metió a la cancha del líder sin complejos; arremetió en la primera a través de la profundidad de Carlos Esquivel, viejo conocido del Toluca.
El susto tempranero despertó al cuadro escarlata. Ante la ausencia de Rubens Sambueza, el Diablo encontró en Pablo Barrientos su cerebro para gestar peligro en la media cancha. Toluca comenzó a hilvanar toques que marearon al visitante. Lo que obligó al Veracruz a recurrir a las infracciones. En un tiro libre directo, el “Pitu” mandó un trazo largo que nadie tocó en el área y terminó por incrustarse en el arco jarocho tras picar a unos metros de Melitón Hernández.
La virtud del actual Toluca es su juego de conjunto. Movió el balón por todos lados; Antonio Ríos dio salida en media cancha para penetrar a un endeble cuadro porteño. Leonel López robó un balón y enfiló a la meta jarocha; sin embargo, perdió el mano a mano con el arquero veracruzano.
La inteligencia de Barrientos nutrió a Quiñones y Canelo por las bandas. El argentino pudo ampliar la ventaja tras una jugada en la que intentó clarear a Hernández, pero el guardameta desvió en el momento justo. Las otras dos ocasiones las desperdiciaron Cristian Borja y Luis Quiñones, los colombianos se internaron a velocidad en la banda izquierda, sólo les faltó puntería para liquidar.
Parecía que la salvación tenía relajado al Tiburón, que apenas enseñó los dientes mediante un cañón de Osmar Mares que contuvo el portero escarlata. Adrián Luna se vio sorprendido en el área por una intervención de Alfredo Talavera que evitó el gol del empate en la agonía del primer tiempo. Pese al esfuerzo en la recta final, Veracruz no pudo con la figura del seleccionado nacional y se fue abajo 1-0 después de 45 minutos.
El infierno mexiquense se volvió a encender en la reanudación con escopetazo de Gabriel Hauche que se estrelló en la base del poste izquierda de Hernández. Así que Memo Vázquez ordenó dos cambios en afán de dar frescura a su ataque: Miguel Murillo y Cristian Menéndez. Del otro lado, Hernán movió su esquema con el ingreso de Ángel Reyna. Un minuto después de su ingreso, el talentoso volante sacó un zurdazo que pasó a centímetros del ángulo.
Para el final se destapó lo más emocionante de la contienda. Tras una gran jugada colectiva, Rodrigo Salinas hizo un recorte dentro del área y fusiló con rencor al guardameta jarocho. Casi al final y en el momento de más apremio sobre la cabaña toluqueña, Alfredo Talavera se dio el lujo de atajar un penal a Daniel Villalva. El propio Salinas disecó al Tiburón en tiempo de compensación, 3-0 que puso cifras definitivas en la “Bombonera”. Veracruz no salió vivo del averno, pero por suerte está con vida en la Primera División.
