El otrora brillante jugador Heladio del Juncal Flores colgó sus tacos en un emotivo partido de despedida que le brindaron esos amigos que le reconocieron su aporte al futbol xalapeño.
En su homenaje sólo hubo un encuentro en la cancha principal de la Unidad Deportiva Universitaria, campo de mil batallas donde el fino mediocampista surgido en el barrio Azcárate escribió páginas gloriosas con los equipos en los que jugó, desde Flamengo hasta el Dique, pasando por Betancourt, Potros y Tepic.
El famoso Negro tomó parte de este partido, no podía perdérselo, al menos jugar unos minutos, ya que su condición física no le permite llegar a más, quedó imposibilitado de realizar un esfuerzo como el que se hace en este deporte, el de sus amores, al que le debe todo, el que lo encumbró como uno de los más grandes que ha nacido en esta capital, cuna de valientes y guerreros del futbol.
El choque ante el Dukla San Bruno resultó entretenido, ameno, incluso el homenajeado mostró esos destellos que lo hicieron diferente a cualquier futbolista, de hecho marcó un gol muy a su estilo, de penalti.
Sus amigos lo consintieron y él se dejó querer. El detalle que tuvieron todos para realizarle este encuentro del adiós quedó en su memoria porque no siempre se despide a un jugador, a un amigo, a un hermano de esta manera.
Vimos como de manera sincera todos se le acercaron para felicitarlo, todos los asistentes le dieron las gracias por lo que ha dado al futbol y aprovecharon para tomarse la fotografía del recuerdo con uno de los más gigantes creativos del balompié local, el que supo darle su importancia al número 10 que siempre portó en su espalda donde quiera que jugó.
Es verdad que no fueron todos los que debieron asistir, pero quienes fueron suplieron todo sentimiento, las risas, las bromas y las anécdotas surgieron por decenas, había mucha historia que contar, mucha tela donde cortar.
Entre los asistentes vimos a Juvencio Chímal, Roberto Booker Hernández, Pablo Castor Herrera, Alejandro Diablo Vázquez, Miguel Sierra, Fito Cedano, Jorge Pollo Pérez, Tanos Díaz, Miguel Cortés, Roberto Pantera Herrera, Roger Galván, Óscar Chapo Hernández, Pablo García, Fernando Viveros, Gumersindo Hernández, Roberto Cornejo, Arturo Petete Prado, Giovanni Albarrán, Heriberto Pescado Castillo, el buen Gerónimo Cota y el Quico Roberto González.
Después del triunfo del Dukla, 3-2, ambos equipos se trasladaron a la exfábrica de San Bruno, donde Julio César Fernández, el famoso Borrega y el Choco José Alberto Pérez Fuentes brindaron una comida a todos los asistentes, quienes disfrutaron del momento y del espectáculo que dio el comediante Adrián Show, quien por cierto en el concurso Parodiando llegó hasta la semifinal.
Así llegó el final de una jornada que todos querían que nunca acabara, que fuera eterna, pero sobre todo que la despedida de este gran futbolista jamás se hubiera dado, pues verlo jugar era un deleite, un verdadero espectáculo que lamentablemente hoy el destino no lo ha arrebatado.