El culto a la muerte en México comenzó en tiempos prehispánicos y ha logrado trascender hasta nuestra época, parte de las historias que lograron quedarse en la cultura nacional es la leyenda del Xoloitzcuintle un perro que fue venerado por nuestros antepasados, el cual era considerado como el “guardián de los espíritus” el que guiaba a las almas en su camino a la tierra de los muertos.
La temporada de Día de Muertos inició desde el 27 de octubre cuando las almas de nuestras mascotas regresaron a casa a visitarnos, después de 1 y 2 de noviembre, en Veracruz también existen tradiciones que celebran a nuestros difuntos, parte de esas tradiciones contemplan al “Xolo” que forma parte importante de nuestra cultura.
- También puedes leer: ¿Cuánto gastarás en tu altar de muertos? locatarios de Xalapa te dan precios
El culto al Xoloitzcuintle no sólo estaba enfocado a la tierra de las almas, todo iniciaba en este plano de la existencia ya que nuestros antepasados asociaban a estos animalitos con Xólotl, Dios de la muerte, y la idea era mostrar bondad con estos seres con la intención de gozar de una muerte tranquila, una en la que no hubiera dolor.
¿Cuál es el origen del Xoloitzcuintle?
Comencemos por platicarte que la historia de este animalito, de acuerdo a la tradición prehispánica, se remonta al Dios de la muerte Xólotl que era la estrella vespertina, de la oscuridad, el inframundo y la muerte; cuenta la historia que nació de la astilla del hueso de la vida, su función era proteger al hombre, por eso fue creado con todas las características necesarias para convivir con él.
Pero lo triste de la historia, es que su función no sólo se quedaba en vida, al morir el dueño, era cuando se volvía más importante la misión del perrito que consistía en transitar con el humano hacia el mundo terrenal, por lo que el Xoloitzcuintle era sacrificado y enterrado junto a su compañero de vida.
¿Cuál es la leyenda del Xoloitzcuintle?
Ya que sabes cuál es el origen de este perrito, vamos al relato que se contó de generación en generación, el cual se basa en que estos bellos animales eran guardianes de los espíritus, su función después de la muerte era guiar a las almas por el largo y difícil camino que los conduce al Mictlán, que es la ciudad de los muertos.
La función era ayudar a las almas a pasar por el río que atraviesa la tierra de los muertos, aquí es donde la trama se complica, según cuenta la leyenda existía un pequeño detalle que haría que e Xolo te ayudará o simplemente te dejará sólo en tu trayecto, ¿cuál era? El trato que le dabas a los animales en vida, si eras una persona que trató bien a los perros, el Xolo con gusto te ponía en su lomo y te ayudaba a pasar hasta el otro lado.
En caso contrario, el perro se negaría a ayudarlo a pasar, por lo que el alma perecería y no podría cumplir con la ruta de llegar hasta la ciudad de los muertos.
¿Por qué no todos los Xoloitzcuintles pueden ayudarnos a pasar?
De acuerdo al relato, para que un Xolo pudiera ayudar a los espíritus a caminar rumbo a la ciudad de los muertos, éste debería tener un color gris jaspeado, ya que eso demostraba que era el momento adecuado para ayudarte; pero si su color era blanco o muy claro, no podía ya que se creía que todavía no estaba listo para la responsabilidad, es muy joven.
Pero, si éste alcanzaba el color negro ya no podía llevar más almas, eso significaba que se había sumergido varias veces en el río, lo que significaba que ya había guiado suficientes almas en su recorrido rumbo al Mictlán.
