¿Te has preguntado alguna vez qué es el transtorno bipolar? Aunque el trastorno bipolar es una enfermedad de por vida, los cambios en el estado de ánimo y otros síntomas pueden ser controlados gracias a un plan de tratamiento. Es importante señalar que en la mayoría de los casos, este tipo de trastorno se puede tratar con medicamentos y apoyo psicológico.
El trastorno bipolar es una afección del estado de ánimo que puede provocar cambios de ánimo intensos. Existen tres posibles escenarios ante esta enfermedad, entre los cuales se puede encontrar con los siguientes. Es posible que en ocasiones, pueda llegar a sentirse extremadamente "animado", eufórico, irritable o con energía. Comúnmente a esto se conoce como episodio maníaco.
Por otra parte, hay ocasiones en las que pueda sentirse deprimido, triste, indiferente o desesperanzado. Conocido también como episodio depresivo o también puede tener síntomas maníacos y depresivos a la vez, también conocido como episodio mixto.
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¿Qué tipos de transtorno bipolar existen?
Así como provoca cambios de ánimo, también se pueden ver afectados sus niveles de actividad, afectaciones en los niveles de energía o comportamiento. La bipolaridad, se puede dividir principalmente en tres:
- Transtorno bipolar I: este tipo de transtorno suele durar al rededor de 7 días, acompañado de episodios depresivos que en ocasiones, puede llegar a ser necesario la hospitalización debido a la gravedad e intensidad que se puede presentar. En el caso de los episodios depresivos, se pueden extender hasta dos semanas y puede resultar en un transtorno con episodios mixtos.
- Transtorno Bipolar II: aquí se presentan episodios totalmente depresivos.
- Transtorno Bipolar Ciclotímico: los síntomas pueden variar en tiempo, teniendo una duración en los adultos de dos años y un año en adolescentes y niños. Se caracteriza por presentar síntomas hipomaníacos y depresivos.
¿Cuáles son los síntomas?
Aunque se desconoce la causa principal del transtorno bipolar, se consideran algunos factores que pueden detonarlo como puede ser la genética, función y estructura del cerebro. Por otro lado, es probable correr riesgo de padecerlo si algún familiar cercano lo padece o también vivir traumas o momentos estresantes durante su vida, puede ocasionar un aumento considerable en este tipo de casos.
Es importante señalar que aunque los síntomas pueden variar, involucran cambios de ánimo conocidos como episodios anímicos, los cuales se dividen en:
Síntomas de un episodio maníaco: sentirse muy optimista, eufórico o animado, sentir nervios o estar acelerado, más activo de lo habitual, tener muy mal genio o parecer extremadamente irritable, sentir que los pensamientos van muy rápido, dormir menos, sentirse inusualmente importante, talentoso o poderoso o hacer cosas arriesgadas que muestren falta de juicio, como comer y beber demasiado, gastar o regalar mucho dinero o tener relaciones sexuales poco seguras.
Los síntomas de un episodio depresivo pueden incluir: estar muy triste, desesperanzado o inútill, aislarse de los demás o sentirse muy solo, hablar demasiado despacio, sentir que no tiene nada que decir u olvida mucho las cosas, presenta poca energía, dormir demasiado, comer demasiado o muy poco, falta de interés en sus actividades habituales y pensar en la muerte o el suicidio.
Por último, en un episodio mixto se presentan síntomas maníacos y depresivos. Por ejemplo, puede sentirse muy triste, vacío o desesperanzado, mientras que al mismo tiempo se siente extremadamente lleno de energía.
Es importante saber que para detectarla puede realizar principalmente un examen físico, pruebas médicas o evaluaciones de salud mental con un especialista.
¿Cómo puedo tratarlo?
Aunque presente síntomas graves de bipolaridad, puede ser tratado principalmente por medicamentos o psicoterapia. Por el lado de los medicamentos, se tiene que encontrar el que funcione mejor para usted, ya que son muy distintos los síntomas o intensidades que presenta cada persona.
La psicoterapia puede ayudar a reconocer y cambiar emociones, pensamientos y comportamientos. Por este medio se pueden crear estrategias que ayuden a enfrentar el transtorno. Existen varios tipos diferentes de psicoterapia que pueden ayudar con el trastorno bipolar y es recomendable llevar los tratamientos juntos para obtener los mejores resultados.
